Xiaomi Robot Vacuum X20 Max análisis review características precio y especificaciones
Los robots de la familia X20 de Xiaomi siguen pasando por nuestra mesa de análisis y tras probar al hermano pequeño, el Xiaomi Robot Vacuum X20+, ahora le toca el turno al mayor, el Xiaomi Robot Vacuum X20 Max. Lo primero que me llamó la atención al ver la ficha técnica al completo fue el precio: el mejor robot aspirador de Xiaomi cuesta menos de la mitad que la gama alta de la competencia. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
Nadie regala nada y eso significa hacer ciertas concesiones, como iremos descubriendo. No obstante, no tiene por qué ser malo: el truco está en sacrificar allí donde menos importa para ofrecer en lo global una buena experiencia. Hemos probado a fondo el Xiaomi Robot Vacuum X20 Max y esta ha sido nuestra experiencia.
Ficha técnica del Xiaomi Robot Vacuum X20+ Max
Diseño: el secreto está en el rodillo
Lo primero que me llamó la atención de este robot aspirador al sacarlo de la caja es que tiene un diseño sobrio y minimalista, con líneas bastante modernas. Tiene una de esas bases avanzadas y aunque no puede decirse que sea pequeña, no es tan grande como cabría esperar en una tres en uno: tiene una bolsa para recoger la suciedad sólida, otra para almacenar agua limpia para limpiar el robot y fregar y un tercer depósito para el agua sucia acumulada.
Parece una papelera de diseño. Está hecha completamente de un robusto plástico negro mate, salvo por algunos detalles como la tapa de la zona superior y el reborde inferior, con un acabado que recuerda al metal. La única pega que le pongo es que en ese acabado oscuro se ve el polvo depositado y se marcan las huellas de los dedos.
En el frontal, en la zona de abajo está el cajón extraíble para la bolsa de sólidos, con una textura estriada bastante chula y arriba un LED que luce en blanco si está todo bien. Al levantar la tapa tendremos acceso a los dos depósitos de agua, por lo que el acceso es cómodo. Abajo, una especie de alfombrilla de plástico rígido para limpiar el aspirador y evitar que se moje el suelo.
Pero vamos a lo importante: el robot aspirador. Es también de un negro mate con el mismo problema que la base, aunque en este caso con detalles en naranja que resulta llamativo. Tiene un diseño clásico de cilindro achatado con la txapela para el visor láser y una tapa para acceder al depósito de sólidos. En los laterales, sensores y parachoques. Las sorpresas están al darle la vuelta al aspirador y ya te adelanto que prometen en limpieza.
La configuración de cepillos consta de un cepillo lateral y un rodillo central de goma y cerdas antienredos bastante curioso, ya que tiene una especie de ranuras con cuchillas para cortar el pelo y así que no se formen bolas y descienda su rendimiento a la hora de atrapar suciedad.
En la parte trasera, dos paños circulares al estilo de las lijadoras radiales que rotan y además el punto de unión se descoyunta (hasta cuatro centímetros) para permitir que la mopa sobresalga un poco y así poder llegar mejor a fregar bordes y esquinas.
Navegación rápida y optimizada
Los principales responsables de la navegación de este robot aspirador son el visor láser de la parte superior y un sistema de luz estructurada a 120 grados que tiene como misión evitar obstáculos y vaya si lo hace bien: en estas semanas de prueba nunca se ha perdido.
Por otro lado, tampoco se ha atascado con cables ni ha chocado con el bebedero del perro (un cuenco con acabado espejado) ni se ha tragado zapatillas. Eso sí, esquivar obstáculos tiene un peaje a pagar: no aspira la zona aledaña, pero sí que la friega como veremos más adelante.
La clave está en que mientras que las mopas de fregar sobresalen y tiene un brazo extensible, para aspirar solo dispone de un único cepillo lateral y un rodillo central que no ocupa todo el diámetro del robot. No obstante, basta con despejar el suelo para mejorar esa eficiencia de aspiración. También hay que subir un poco esas cortinas largas o esos edredones que rozan el suelo si queremos que se meta por debajo.
Aunque la aplicación permite tres formas de recorrer el espacio llamadas ‘rutas’, la que viene por defecto y usaremos más es la estándar, cubriendo todo el área seleccionada para limpiar siguiendo una trayectoria lógica para recorrerla al completo sin dar pasadas de más. Como acostumbro a probar los aspiradores en casa de mis padres sé cuánto tiempo suele tomar a los aspiradores limpiarla al completo y este Xiaomi Robot Vacuum X20 Max apenas le lleva 40 minutos completar la misión. En pocas palabras: navegación de lo más optimizada para acabar cuanto antes.
Limpieza: brilla en fregado
Aunque el aspirador ofrece una capacidad de aspiración máxima de 8.000 Pascales, desde la aplicación pueden elegirse diferentes programas de limpieza:
- Aspiración: silencioso, estándar, fuerte y turbo.
- Modo: aspirar, aspirar y pasar la mopa, aspirar antes de pasar la mopa y pasar la mopa.
- Salida de agua para fregar nivel uno, dos y tres, siendo este último el más intenso.
- Ruta: rápida, estándar y en profundidad.
En este sentido es de destacar la gran variedad de opciones de limpieza, si bien en la práctica lo que viene por defecto servirá para la mayoría de ocasiones (aspiración estándar, aspirar y pasar la mopa, nivel 1 de dosificación y ruta estándar), salvo que tengamos zonas con moqueta o que haya un suelo muy sucio al que interese darle una pasada inicial solo de aspiración.
En el día a día con ese modo estándar de aspiración ha sido más que de sobra para llevarse suciedad pequeña como el polvo, arenilla o pelos, pero también con migas bastante grandes como las que deja nuestro viejo cocker cuando mis padres le dan comida (para muestra, la imagen de arriba), así como pelusas o hasta hojas secas que han caído de las macetas.
Eso sí, de vez en cuando sigue tocando pasar la escoba porque como hemos visto en el apartado de navegación, deja alguna esquina o zona sin recorrer y su combinación de cepillos no es la que más apura los lugares de difícil acceso. En cualquier caso, si despejamos el área a limpiar y retiramos obstáculos, podemos minimizar muchísimo la limpieza manual.
Con las alfombras hay claroscuros: las limpia bien, pero solo sirve para las finas (de menos de 10 milímetros). Me explico: como tiene las mopas integradas, si intentas aspirar una gruesa con pelo desgraciadamente va a rozar, lo que no es una buena idea en términos de higiene y de cuidado del textil, por lo que en ese caso toca elegir la configuración de ‘Evitar alfombras’. Pero si la alfombra es fina, la deja impecable, tanto es así que prácticamente nos podemos evitar aspirarla a mano.
Lo que más me ha gustado es cómo friega. He tenido la oportunidad de probar todos los sistemas de fregado de la actualidad y atendiendo a los resultados, las dos mopas radiales es lo más efectivo con las manchas secas ya que, además de limitarse a frotar un paño rugoso, la rotación es algo así como frotar. La guinda del pastel es que al poder cubrir más área gracias a ese bracito extensible, llega bien a esquinas, los alrededores de patas de mesas y sillas y hasta limpia la base de los rodapiés, donde suele acumularse suciedad.
Su funcionamiento es similar al de la fregona. Así, la base humedece las mopas y tras fregar un área, vuelve a la base para repetir el proceso. Normalmente he usado el nivel de dosificación 1, que ofrece un equilibrio correcto entre que el suelo se seque pronto y que tenga agua suficiente como para fregar bien. Además, viene configurado de serie para ofrecer el mejor rendimiento e incluso con el nivel 1 de agua ofrece buenos resultados. De hecho, solo hemos usado la fregona de vez en cuando porque nos permite un fregado con productos de limpieza (más higiénico) y cuando se derraman líquidos.
Autonomía: incombustible
Una de las pocas diferencias entre el X20 Pro y este X20 Max es que mientras el primero tiene una autonomía teórica máxima de 160 máximos, el que estamos analizando es de «solo» 120 minutos. Además, cabe destacar que las cifras ofrecidas por el fabricante constituyen una aproximación considerando las condiciones más favorables. Eso sí, que su autonomía sea menor no implica ni mucho menos que sea para casas de tamaño pequeño o medio. Este modelo da la talla para casas grandes.
Pese a que esa cifra de la ficha técnica suele ser ventajosa, en tanto en cuanto suele tomarse como referencia la duración de la batería aspirando a mínima potencia, ya os adelanto que Xiaomi lo ha hecho muy bien en este apartado. Para homogeneizar resultados siempre medimos la autonomía en modo solo aspiración y máxima potencia y aquí me ha dejado con la boca abierta: casi 100 minutos funcionando sin parar a tope, más que suficiente para limpiar la casa de mis padres (unos 100 metros cuadrados) dos veces y pico.
Ese pico ha correspondido a limpiar solo el salón, momento en el cual ha vuelto a la base dejando un mensaje en la app para informar que la batería estaba demasiado baja. Un par de horas después, cuando se ha cargado, ha retomado la limpieza justo donde lo había dejado hasta completarla, algo que hemos podido comprobar en el plano de la aplicación.
No obstante y como hemos comprobado en el apartado de limpieza, rara será la vez en la que pongamos el aspirador en modo turbo, por lo que cabe esperar algo más de autonomía. En cualquier caso, ya hemos comprobado que esa batería de 5.500 mAh da para una casa bastante grande y si no llega, tampoco sería problema. Eso sí, si tienes una casa de más de 200 metros cuadrados y quieres que la limpie del tirón, entonces elige el modelo Pro.
Cómo es la app
Una aplicación para gobernarlos a todos (los Xiaomi). La aplicación para manejar el Xiaomi Vacuum X20 Max es exactamente la misma que la de sus hermanos y en general, de cualquier producto de la casa: Xiaomi Home para iOS disponible gratis en App Store y Mi Home para Android disponible gratis en Google Play Store.
Teniendo en cuenta el amplio catálogo de Xiaomi, es una buena noticia no necesitar apps extra y tenerlo todo unificado, lo que por ejemplo simplifica tareas como crear automatizaciones. Si ya tienes un producto de Xiaomi, basta con integrarlo dentro de la app y ya. Y si no, además de bajarte la app, tendrás que crearte una cuenta.
La primera vez que lo pones en marcha en casa, el robot trazará un mapa con una división estimada de habitaciones y será necesario cambiarles el nombre para que se corresponda con el plano real y editar los límites si no son correctos. Desde ese momento podremos acudir a la aplicación para ponerlo en marcha o pararlo, configurar programas o simplemente, ver por dónde ha pasado y por dónde no. Si se atasca, basta con echar un vistazo para tenerlo localizado (aunque tiene un modo de ‘Encontrar el aspirador’ en el que te habla para ayudarte a localizarlo. Como curiosidad, al ponerlo en español el robot te da este mensaje en francés, un pequeño fallo).
En la pantalla principal hay muchísima información, quizás demasiada: el mapa, un pequeño resumen de la limpieza actual, los modos, zonas, atajos, el play/pause, el botón de la base y el acceso a los ajustes. La verdad es que estaría genial que Xiaomi simplificase un poco la interfaz para hacerla más ágil y agradable a la vista, dejando algunas de estas opciones más ocultas. Si además la tecnología no es lo tuyo, puede llegar a ser abrumador.
Así, quien busca algo más completo podría tenerlo rebuscando más, pero para lo más habitual o para no complicarse, bastaría con quedarse en esta primera pantalla. No obstante, es un robot aspirador de lo más completo para techies que permite limpiezas parciales y/o personalizadas, diferentes ajustes para aspiración y fregado o navegación, modo de no molestar, bloqueo infantil, programar limpiezas, ajustes de limpieza de la base, configuración para alfombras, opciones para las mopas, gestión de consumibles, zonas restringidas, automatizaciones, entre otros.
El fallo del idioma no es el único, ya que hay alguna que otra traducción bastante regular y palabras cortadas que denotan que además de requerir tanto un lavado de cara para simplificarlo todo, no vendría mal un poco más de depuración para pulir estos detalles.
Mantenimiento Manteniqué
Lo normal con un robot aspirador fregador es que tener que preocuparse por llenar el depósito de agua para fregar y retirar las mopas después para limpiarlas y que no huelan. Asimismo, es conveniente vaciar el depósito de sólidos para que siga guardando la suciedad que aspira. Finalmente, de vez en cuando toca darle la vuelta al aspirador para extraer el rodillo y quitarle las bolas de pelo que se van enredando. Plot twist: con el Xiaomi Robot Vacuum X20 Max no hay que hacer nada de lo anterior.
Para empezar, porque tiene una base 3 en 1 que se encarga de proporcionar el agua para fregar y vaciar el depósito de sólidos tras cada limpieza. Pero es que además cuando retorna a la base también lava las mopas con agua caliente y se pasa unas horas secándolas. Aunque el proceso de vaciado de sólidos es estruendoso solo dura un suspiro, el lavado apenas se percibe como un borboteo y con el secado te puedes echar la siesta en la misma habitación. Todo esto resuelve casi todo lo enunciado en el primer párrafo, pero hay más.
Lo que más me ha llamado la atención tras un par de semanas poniéndolo a diario es que al darle la vuelta el rodillo central seguía sin pelos y eso me ha parecido todo un logro, ya que lo normal es que se forme algún enredo que toque quitar extrayendo el cepillo. Tiene truco: esconde unas cuchillas bajo esa superficie rugosa que cortan el pelo, de modo que este no se enreda. Además, puedes pasar el dedo por encima sin miedo a cortarte.
Tiene truco: esconde unas cuchillas bajo esa superficie rugosa que cortan el pelo
Cada semana toca preocuparse por llenar el depósito de agua y apenas se ha llenado la mitad del depósito de agua sucia en este tiempo. En cuanto a la bolsa de sólidos la marca estima unos 75 días de duración, pero según mi experiencia puede estirarse hasta los tres meses. En cuanto a recambios y sustituciones, tanto en el manual como en la app se detallan frecuencias y procedimientos.