¡Despiden a policía por casarse con una homicida!
¿Un policía se casó con una reclusa? Sí. La peculiar historia se presentó en una cárcel de Bolivia, cuando un hombre de la ley se casó dentro de prisión con una mujer que quebrantó la misma y que pasará décadas encerrada.
El matrimonio civil se llevó a cabo dentro del penal de Palmasola, en Bolivia. El agente penitenciario, identificado como Erick, contrajo matrimonio con su ahora esposa Ximena, quien se encuentra sentenciada a 30 años de prisión por el delito de asesinato.
Por otra parte, el policía fue despedido por haber roto la ley 101 del Régimen Disciplinario de la institución, que establece que ningún efectivo puede visitar con o sin uniforme a reclusos o reclusas que no tengan una relación estrecha de sangre, según las declaraciones recogidas por el medio local El Deber.
El jefe de Policía, Igor Echegaray, informó a los medios que “el matrimonio no es un delito, sino el hecho que haya ingresado de civil al centro de rehabilitación y al interior haya utilizado el uniforme para casarse”.
Esta compleja historia de amor se habría formado y desarrollado dentro de la misma cárcel, cuando el agente trabajaba dentro del penal de Palmasola.