Tulcán cumple este sábado 169 años de cantonización, en medio de la tensión entre la población por el crecimiento de casos de coronavirus COVID-19.

La pandemia global complicó la situación económica de la capital carchense, que tras la depreciación del peso colombiano mantiene a la economía local en terapia intensiva y en una recesión que traumatizó el comercio desde hace cinco años.

La falta de leyes que reactiven las economías de las poblaciones de frontera con incentivos que inviten a generar inversiones deteriora el sistema económico de Tulcán. A esto se suma el alto contrabando de mercancías y productos que fluye por 37 pasos fronterizos no autorizados.

Este sábado, el Municipio de Tulcán aspiraba firmar con el Gobierno Nacional la declaratoria para convertir a esta ciudad en Polo de Desarrollo, proyecto que busca inversión nacional y extranjera para la creación de industrias que se acogerán a varios beneficios tributarios.

Patricio Silva, director de Planificación Municipal, comentó que existían cinco empresas interesadas en centralizar sus operaciones en esta parte de la frontera, aprovechando la estratégica situación geográfica y el aeropuerto que al momento no está funcionando.

Tras el aislamiento social y cuarentena que rige en el país esta propuesta debe esperar, los proponentes esperan que el próximo escenario económico nacional no desanime a los inversores, sostuvo Silva.

Hasta tanto los rubros de la producción de papa y leche, siguen siendo los más fuertes de la región por los altos volúmenes de comercialización a nivel nacional.

Pasadas las 18:30 de este sábado, se tenía previsto el encendido de velas en las viviendas de Tulcán, para recordar el aniversario de este cantón.

Mientras que a las 20:00, los tulcaneños saldrán a los balcones y portales de las casas para aplaudir y rendir así un homenaje a la centinela norteña, custodio de la nacionalidad en la frontera norte. (I)