Tienes que conducir de noche Estos trucos de la DGT te servirán de ayuda para perder el miedo
Una de las principales preocupaciones de los conductores a la hora de iniciar su trayecto es tener que coger el coche por la noche o cuando la visibilidad de la carretera sea prácticamente nula. Tranquilo, no estás solo y a muchos nos ha pasado. De hecho, es el momento del día donde más accidentes se producen, pues obviamente la claridad es inexistente y la cautela al volante debe duplicarse para llegar sanos y salvos a nuestro destino. Entonces, ¿qué precauciones debemos tomar? Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
Ahora que la temporada de otoño ya ha comenzado a despuntar y el anochecer se atisba cada vez más temprano, la circulación en carretera debes ser más prudente que en otras estaciones del año. Con la llegada del frío, los días son más cortos y la reducción de la iluminación se aprecia sobre las autovías, por lo que el miedo a conducir bajo la oscura noche provoca a los conductores inseguridades y las posibilidades de colisión se multiplican.
De hecho, la DGT ha distribuido que el índice de accidentes de conducción nocturna es mucho más elevado que los momentos de mayor luminosidad. Por ello, con el fin de acabar con la incertidumbre e inestabilidad al volante, el organismo autónomo de seguridad vial y la Guardia Civil han puesto sobre la mesa algunos trucos para reducir el riesgo de choque contra un vehículo u otro obstáculo en la calzada.
Comprueba que las luces funcionan correctamente
Una de las recomendaciones que ofrecen la DGT y las autoridades es que siempre compruebes que las luces de tu coche encienden debidamente, tanto las traseras como las delanteras. Es de vital importancia que cuentes con la mayor visibilidad posible para proteger tu seguridad y además apercibir a los demás conductores de que te encuentras circulando por la vía en ese momento.
Independientemente del sistema de iluminación que tengas instalado, ya sean faros de LED o xenón, tienen que estar activados cuando la oscuridad va cayendo. No obstante, los vehículos más modernos ya poseen la característica de encendido automático, así que siempre puedes habilitarla para que nunca olvides encender tus luces.
Descansa bien antes de salir
Si vas a adentrarte en la carretera por la noche, uno de los aspectos a tener en cuenta es precisar de un buen descanso para rehuir a toda costa del cansancio. No hay peor manera de conducir que estar repleto de fatiga y agotamiento.
En el momento que sientas que no has dormido lo suficiente, pide a otra persona de confianza que te acerque a cualquier sitio. Con esto esquivarás una posible situación de riesgo mientras inicias el trayecto.
Regula bien tus retrovisores
Otro de los puntos clave para reforzar tu protección es que acoples bien tus espejos retrovisores, tanto exteriores como interno, de tal manera que no llegues a sufrir deslumbramientos de los vehículos que estén posicionados detrás de ti.
A su vez, utiliza las luces largas cuando sea necesario para no entorpecer la conducción de los demás usuarios en carretera. Por otra parte, activar las luces antiniebla será imprescindible cuando se avecinen condiciones adversas y puedan posicionarte en todo momento.
Adapta la velocidad en condiciones de baja luz
Por último, y no menos importante, aminorar la velocidad será imprescindible para mantener la capacidad de reacción ante cualquier contratiempo que se produzca en carretera. También es conveniente aumentar la distancia de seguridad con el turismo que precedes.
Todo imprevisto es fundamental y no debes fiarte en ningún momento de los demás conductores, ya que una acción imprudente puede resultar fatal. En definitiva, conducir de noche es sinónimo de tener activados los cinco sentidos, pues esta cualidad cobra más importancia que nunca.