El Ingreso Mínimo Vital (IMV) es una prestación económica creada por el Gobierno de España con el objetivo de reducir la pobreza y la exclusión social de las personas que viven en situaciones de vulnerabilidad económica. Esta ayuda se dirige especialmente a hogares con bajos ingresos y está diseñada para garantizar un nivel mínimo de ingresos que permita cubrir las necesidades básicas. La ayuda se define como una renta garantizada que asegura un mínimo de ingresos a los hogares en situación de pobreza. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

Esta prestación se ajusta a las circunstancias personales y familiares, lo que significa que la cantidad recibida varía según el número de miembros del hogar y los ingresos actuales del mismo. El objetivo principal es proporcionar estabilidad económica y permitir que los beneficiarios puedan acceder a recursos esenciales como alimentación, vivienda, y otros servicios básicos. El propósito del IMV va más allá de la mera transferencia económica; también busca fomentar la inclusión social y la participación activa en la sociedad. Además, esta ayuda está vinculada a programas de inserción laboral y formación, con la intención de facilitar la entrada o el retorno al mercado laboral de los beneficiarios.

El proceso para solicitar el Ingreso Mínimo Vital es relativamente sencillo y puede realizarse de manera telemática a través de la sede electrónica de la Seguridad Social, o presencialmente en las oficinas de la Seguridad Social. Los solicitantes deben cumplir con ciertos requisitos de elegibilidad, entre ellos:

• Tener residencia legal y efectiva en España.
• Haber solicitado previamente todas las prestaciones y pensiones a las que se pudiera tener derecho.
• Cumplir con los criterios de ingresos y patrimonio establecidos por el programa.

La documentación necesaria incluye, entre otros, el DNI o NIE, certificado de empadronamiento, y documentos que acrediten los ingresos y el patrimonio del hogar. Una vez presentada la solicitud, la administración tiene un plazo de seis meses para resolver y notificar al solicitante.

Para el año 2024, el Ingreso Mínimo Vital no contempla el pago de pagas extras, como es habitual en otras prestaciones o salarios. Esta prestación se distribuye en 12 mensualidades a lo largo del año, sin la inclusión de pagas extraordinarias en junio y diciembre. La cuantía total anual se divide equitativamente en estos doce pagos mensuales, lo que significa que los beneficiarios reciben una cantidad fija cada mes.

Esta estructuración de los pagos tiene como objetivo proporcionar una ayuda constante y predecible que permita a los hogares beneficiarios planificar sus gastos con mayor estabilidad. Aunque no haya pagas extras, la cuantía del IMV se revisa anualmente y puede ajustarse para reflejar cambios en el coste de vida y asegurar que siga cumpliendo su propósito de reducir la pobreza y la exclusión social.

La nómina del Ingreso Mínimo Vital (IMV) ha llegado en julio a 639.968 hogares en los que viven 1.928.430 personas, según la última estadística publicada por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). La cuantía media de la prestación es de 484,9 euros por hogar y, en conjunto, la nómina de este mes ha ascendido a 354,5 millones de euros, según ha informado este lunes el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en un comunicado.

En el mes de julio, había 152.662 prestaciones activas más de las que había hace un año, lo que supone un incremento del 31,3%. En esos hogares conviven 505.976 beneficiarios más que los registrados en julio de (un 35,6% más). En este sentido, de los datos se desprende que el 67,5% de las unidades de convivencia receptoras de esta prestación en julio son hogares con menores (432.225) y que, entre ellos, hay 110.992 hogares monoparentales.