Naciones Unidas, 1 septiembre (Prensa Latina). El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) alertó hoy del fuerte impacto en el medio ambiente producido por la reciente explosión en el puerto de la capital de El Líbano.

Como resultado de la destrucción del puerto de Beirut, se generaron enormes cantidades de residuos de construcción y demolición: las estimaciones arrojan de 100.000 a 800.000 toneladas, de acuerdo con el reporte del PNUD.

El costo de la recuperación ambiental resultante de las explosiones del pasado 4 de agosto se calcula en más de USD 100 millones, lo cual se agrega al costo de la degradación ambiental en El Líbano, que en 2018 se estimó en unos USD 2.350 millones, añadió el informe.

“La recuperación debe ser más ecológica con integración de la energía solar, medidas de eficiencia energética, material aislante y diseño resiliente al clima en la reconstrucción de los edificios”, indicó la portavoz del PNUD, Jihan Seoud, citada por la sitio digital de noticias de ONU.

Actualmente, informó, la ONU y la Unión Europea trabajan conjuntamente para garantizar que la eliminación de escombros y la gestión de desechos se realicen de manera adecuada y respetuosa con el medio ambiente.

Este martes, un grupo del Banco Mundial evaluó en USD 8.000 millones las pérdidas ocasionadas por la gran explosión del 4 de agosto en el puerto de Beirut.

La onda expansiva de la detonación destruyó vastas zonas de esa ciudad y hundió al país en una agitación más profunda, en un momento en que la situación ya era compleja en medio de la pandemia de Covid-19.

Antes de la tragedia, el Banco Mundial estimó una contracción de 10.9 % del producto interno bruto de El Líbano.

Según esa institución internacional, el país de los cedros requiere ayuda inmediata de USD 600 a 760 millones.

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