7 militares acusados por supuesto tráfico de armas

Ayer, las autoridades colombianas reportaron la captura de siete militares por supuesto tráfico de armas para las FARC y delincuencia común.

A través de un comunicado de prensa, la Fiscalía General indicó que su Unidad Nacional contra el Terrorismo detuvo a siete uniformados (sargentos y cabos) y a seis particulares en operativos en cuatro ciudades del país, entre ellas Bogotá.

Según el reporte oficial, la banda se dedicaba al tráfico de armas, municiones y explosivos para las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y también para la delincuencia común y las bandas narcoparamilitares.

De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, la organización criminal operaba desde el 2012 y “el material con el cual traficaba era sustraído de diferentes guarniciones militares”.

Todos los aprehendidos serán concentrados en la capital colombiana para ser presentados ante los jueces. (I)

Italia anima al diálogo en Libia para evitar el avance del Estado Islámico

El ministro de Exteriores de Italia, Paolo Gentiloni, se reunió este sábado en Roma con su homólogo libio, Mohamed al-Dairy, y le trasladó la necesidad de proseguir con las negociaciones de paz para afrontar la presencia de milicias afines al yihadista Estado Islámico (EI) en el país norteafricano.

«He subrayado con el ministro al-Dairy la importancia de que la delegación de Tobruk, que la próxima semana participará en las negociaciones de Marruecos, tenga un mandato fuerte, una composición adecuada y sea plenamente operativa», dijo el ministro en una nota.

Y añadió: «Las divisiones y la desconfianza recíproca entre los principales actores favorecen a grupos terroristas como el EI, que trabaja para consolidar su propia presencia en Libia».

El jefe de la diplomacia italiana ratificó «el fuerte apoyo italiano al diálogo político» facilitado por el representante especial del secretario general de la ONU para Libia, Bernardino León, y lo consideró «la única solución posible a la crisis».

En este sentido recomendó que la «condición crucial para el éxito del diálogo es la puesta en marca de un alto el fuego respetado por todas las partes».

«Italia está lista para apoyar un Gobierno de unidad nacional, jugando un papel de primer plano en la observación de la tregua, previa petición de las autoridades libias y en un cuadro jurídico multilateral», aseguró.

Dos gobiernos

Libia se encuentra sumida en la anarquía y la guerra civil desde que en 2011 fuera derrocado el régimen de Muamar al Gadafi.

Durante los últimos meses, dos gobiernos, uno en Trípoli y otro instalado en Tobruk (este), luchan por hacerse con el control del país, situación que grupos yihadistas afines al EI aprovechan para ampliar su influencia y poder territorial.

En la actualidad ambas partes protagonizan una serie de negociaciones que giran principalmente en torno a la posibilidad de conformar un Gobierno de unidad nacional y que tienen lugar en la localidad marroquí de Sjirat, a 30 kilómetros al sur de Rabat.

El pasado jueves estas negociaciones fueron aplazadas hasta el 19 de marzo para dar más tiempo a las partes a analizar las propuestas de las que se han hablado estos días.

La situación en Libia es de gran importancia para Italia, un país que, por su situación geográfica, recibe un muy elevado número de inmigrantes procedentes especialmente de las próximas costas de dicho país norteafricano.

Asimismo las autoridades italianas siguen con especial interés el desarrollo de los acontecimientos en Libia y la presencia de milicianos afines al autoproclamado EI, grupo que en varias ocasiones han amenazado con conquistar Roma.

Sismo de magnitud 6,6 sacude zona de Colombia sin causar víctimas

Un sismo de magnitud 6,6 que sacudió el martes una amplia región del centro y norte de Colombia, incluyendo edificios de varias ciudades capitales, causó daños menores en carreteras, aeropuertos y decenas de edificios, pero no dejó víctimas fatales ni heridos, informó el Gobierno.

El temblor que se registró a las 15.55 hora local (2055 GMT) tuvo su epicentro cerca al municipio de Los Santos, en el departamento de Santander, una región montañosa con permanente actividad sísmica, informó el Servicio Geológico Colombiano.

El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por su sigla en inglés) reportó que el sismo tuvo una magnitud de 6,2.

Un temblor de esa magnitud puede causar graves daños en áreas densamente pobladas, pero la profundidad de 161 kilómetros en la que se originó minimizó las consecuencias, explicó el Servicio Geológico Colombiano.

Aunque la región sacudida por el movimiento es altamente poblada y se desarrollan actividades de agricultura y ganadería, no concentra grandes operaciones de minería ni de petróleo.

En Bogotá, varios edificios fueron evacuados ante el temor de réplicas, las redes de telefonía móvil colapsaron y se dispararon alarmas de los automóviles.

«¡Me dio mucho miedo, tembló durísimo! Hace 20 años que no temblaba así», dijo Ismael Oviedo, un vendedor ambulante de dulces de 65 años.

«Las alarmas en la oficina se prendieron y todos salieron de una vez», sostuvo Francisco Ramírez, un empleado de 38 años, mientras permanecía parado frente a un edificio del norte de la capital con uno de sus compañeros de trabajo.

La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo del Desastres reportó averías en edificios, casas e iglesias en 27 municipios de nueve de los 32 departamentos del país.

En Bogotá se registró afectación en seis edificios y en el Aeropuerto Internacional El Dorado.

Los temblores son relativamente frecuentes en diferentes regiones del país sudamericano exportador de petróleo, carbón y café.

La región cafetera del centro de Colombia fue sacudida en enero de 1999 por un terremoto de magnitud 6,2 que dejó 1.230 muertos, cerca de 5.000 heridos y 250.000 damnificados, la peor tragedia natural del país en su historia reciente.

El movimiento del martes se sintió además en Venezuela, según la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas.

Fuerte sismo sacudió el noreste de Colombia

Un fuerte sismo sacudió el martes a la capital de Colombia sin que hasta el momento se reporten víctimas o daños.