El presidente de EE.UU., Barack Obama, urgió ayer a poner fin a los conflictos y luchas sectarias, de los que dijo que son un “imán” para los terroristas, y abogó también porque haya “más voces de tolerancia y paz”, especialmente en internet.
Obama habló desde el Departamento de Estado ante representantes de más de 60 países en la clausura de la Cumbre contra el Extremismo Violento. Según el mandatario, en la lucha global contra los extremistas es clave abordar los “agravios” políticos y económicos que llevan a que especialmente los jóvenes se sientan “atrapados” en comunidades pobres, lo que les convierte en blanco perfecto de radicales. Grupos como el EI o Al Qaeda están “desesperados por legitimidad” y por eso es fundamental rechazar a nivel global que esas organizaciones “representan al islam”.
El secretario de la ONU, Ban Ki-moon, anunció para los próximos meses una reunión global con líderes religiosos del mundo para “mandar un mensaje poderoso de tolerancia, solidaridad y reconciliación”.
EI tomó ayer el control de Sirte, una importante localidad portuaria de Libia.(I)