Rusia llevará central nuclear flotante para el Ártico en 2016

Rusia llevará el próximo año una central nuclear flotante para abastecer con energía eléctrica a la inhóspita región del Ártico, anunció este martes Dmitri Rogozin, viceprimer ministro ruso.

«Este es prácticamente un reactor nuclear que puede atracar en cualquier infraestructura portuaria y que, a través de un cable, suministrar energía a cualquier ciudad ártica», dijo Rogozin, citado por medios locales.

Rogozin, que visitó el fin de semana el Polo Norte para inaugurar una nueva base de observación rusa, recordó que esta tecnología es única en el mundo.

«Pronto todo estará construido. La primera central flotante de esa clase estará preparada en octubre del próximo año. Considero que es un campo que merece la pena desarrollar», dijo.

Dichas centrales móviles, que están equipadas con dos reactores y una potencia conjunta de 70 megavatios, han atraído también el interés de otros países como China.

Según el consorcio atómico ruso, Rosatom, las plantas nucleares flotantes se desplazarán por el mar para después ser emplazadas en tierra, donde puede permanecer hasta 15 años sin necesidad de repostar combustible.

Uranio en el Ártico

La planta podrá suministrar energía eléctrica a una ciudad de un cuarto de millón de habitantes, funcionar también como desalinizadora de agua y proveedora de calefacción, y permitirá ahorrar 200.000 toneladas de carbón y 100.000 de petróleo al año.

Utilizarán uranio enriquecido a menos del 20%  y son ideales para las regiones remotas, donde el coste del carbón y el combustible es muy alto debido a la carestía de su transporte.

Greepeace ha descrito las centrales flotantes como auténticas «bombas de relojería» y «un regalo para los terroristas», ya que, aduce, éstas almacenarán casi una tonelada de uranio, y advierte de que se necesitará una flota de guerra para garantizar su seguridad. (I)

Cuatro detenidos por el mayor robo en la historia de Chile

La Policía chilena detuvo a cuatro implicados en el que es considerado el mayor robo en la historia del país, ocurrido hace cinco meses en el aeropuerto de Santiago, con un botín de más de siete millones de dólares.

«Oficialmente hay cuatro detenidos, pero este es un procedimiento que está en curso», dijo este miércoles el subsecretario del Interior y Seguridad, Mahmud Aleuy, a Canal 13.

Las detenciones ocurrieron en distintos puntos de Santiago. Uno de los detenidos fue aprendido mientras intentaba gastar parte del dinero en un centro comercial, donde fue encontrado con una maleta con 120.000 dólares.

El robo ocurrió el 12 de agosto pasado, cuando en pocos minutos y sin disparar un solo tiro, ocho sujetos robaron más de siete millones de dólares de un camión blindado de la empresa Brink’s en la pista del aeropuerto de Santiago.

Vestidos de operarios, rompieron los candados de la reja que protege la pista de aterrizaje de los aviones e interceptaron el camión blindado, que debía entregar el dinero a un vuelo con destino al norte del país, para abastecer bancos y empresas mineras.

Casi como en un guión de película, la banda huyó luego en dos furgonetas, una de las cuales abandonó y quemó a unos tres kilómetros del aeropuerto.

El espectacular robo motivó una reestructuración de los protocolos de ingreso a la principal terminal aérea de la capital chilena, y de los camiones transportadores de valores.