Perú recuerda este miércoles el 18 aniversario de la operación de rescate de 72 rehenes del Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA) en Lima, en momentos en que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) se alista a emitir un fallo sobre presuntas ejecuciones extrajudiciales en ese operativo.
El 22 de abril de 1997 alrededor de 140 militares ingresaron a la casa del entonces embajador japonés en Lima, Morihisa Aoki, para rescatar a los rehenes que el MRTA mantuvo cautivos durante 126 días con la expectativa de canjearlos por sus militantes presos.
El operativo Chavín de Huántar, denominado así en homenaje a los túneles de una construcción preincaica del mismo nombre, liberó a los rehenes, entre los que figuraba el entonces canciller Francisco Tudela, pero en el intercambio de fuego murieron un rehén, dos militares y los 14 secuestradores.
El expresidente Alberto Fujimori dijo, ese día, que los secuestradores murieron en el enfrentamiento y por los explosivos que los militares detonaron en un salón para ingresar a la casa por túneles.
Sin embargo, uno de los rehenes, el exdiplomático japonés Hidetaka Ogura, declaró luego haber visto a tres «emerretistas» capturados con vida, lo cual fue respaldado por la versión de dos policías.
A partir de esos testimonios, la familia de Eduardo Cruz Sánchez, uno de los secuestradores conocido por el alias de «Tito», planteó una demanda contra el Estado peruano ante la CorteIDH para encontrar a los responsables de su presunta ejecución extrajudicial.
Según las autoridades peruanas, la Corte, con sede en San José de Costa Rica, debe emitir su fallo durante estos días y el ministro de Justicia, Gustavo Adrianzén, señaló que confía en que se absolverá al Estado de estas denuncias.
Cuando investigó el caso, el Poder Judicial peruano absolvió al exasesor de inteligencia Vladimiro Montesinos y a exjefes militares de la presunta responsabilidad, mientras que el fuero militar absolvió a los militares que participaron en el rescate.
El presidente peruano, Ollanta Humala, un excomandante del Ejército, declaró el pasado fin de semana que le preocupa que «estos comandos que enfrentaron al terrorismo y expusieron su vida, e incluso murieron en ello, pasen de ser héroes a villanos», en el proceso seguido por la CorteIDH.
Humala agregó que su Gobierno «no los abandona y saldrá a defenderlos, porque ellos pusieron el pecho para defendernos».
En tanto, Adrianzén señaló que no existe evidencia forense que haga suponer que alguno de los secuestradores del MRTA haya muerto en circunstancias diferentes a un combate.
«Ningún comando participó en un acto ilícito fuera de las operaciones regulares del combate que sucedió allí», remarcó.
Algunos militares que participaron en el rescate, como el coronel Jhonny Cabrera, declararon no entender «por qué pasamos de héroes a villanos», mientras que el general en retiro José Williams Zapata opinó que «otro proceso sería injusto» para ellos y enfatizó que su «único compromiso era rescatar a los rehenes con vida».
El viceministro de Políticas para la Defensa, Iván Vega, y los principales jefes de las Fuerzas Armadas participaron hoy en una ceremonia de homenaje al exitoso operativo en la réplica de la casa del embajador japonés donde los militares entrenaron hace 18 años para el operativo de rescate. (I)
El presidente peruano, Ollanta Humala, instó ayer a los países americanos a “desatar las amarras que atan al pasado” y a dejar de lado las diferencias ideológicas, para apostar en la cooperación como fórmula para reducir las desigualdades.
Saludó el proceso iniciado entre EE.UU. y Cuba, así como la presencia por primera vez del mandatario cubano, Raúl Castro, y dijo que ese es “el camino” que permitirá al continente concentrarse en las demandas de las sociedades.
“Tenemos que llegar a convergencias para concentrarnos en achicar las brechas de la desigualdad”, que es el “gran conflicto” que tiene una región que “no es la más pobre del planeta”, pero sí la que presenta los mayores abismos sociales en el mundo, manifestó. También alertó sobre el impacto que el cambio climático tiene en el continente. (I)
Perú retiró a su embajador en Santiago en protesta contra las supuestas acciones de espionaje por parte de Chile, y aseguró que no volverá hasta recibir explicaciones satisfactorias, mientras su vecino insistió en que no incurrió en esas prácticas y que responderá en su momento.
«En tanto no se den las satisfacciones del caso, se procederá al retiro del embajador del Perú en Santiago de Chile», dijo el ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado la madrugada del sábado. El embajador Fernando Rojas Samanez ya había sido llamado en consulta el 20 de febrero y se encuentra en Lima.
En esta segunda nota de protesta sobre el tema, Perú «reitera su más firme rechazo y profunda preocupación por las acciones de espionaje de Chile en contra de la seguridad nacional, actos que no se condicen con el espíritu de colaboración y buena vecindad que deben guiar las relaciones entre ambos países».
El gobierno de Lima también insiste en que las acciones de espionaje «se encuentran debidamente acreditadas» y remitió información complementaria a la que brindó en una primera nota diplomática del 20 de febrero.
Perú ademas pide con urgencia «recibir una pronta respuesta que contenga los resultados de la investigación interna que se está llevando a cabo en Chile, así como las seguridades de que no se habrán de repetir actos de espionaje».
El canciller chileno, Heraldo Muñoz, insistió en que su país no incurre en esas prácticas, y dijo que buscan «mantener el buen nivel de relaciones que hemos estado construyendo».
En una primera nota diplomática enviada a Chile del 20 de febrero, Perú denunció que tres miembros de la Marina de Guerra peruana fueron pagados para espiar en favor de Chile entre 2005 y 2012. Los tres militares están detenidos en Perú.
En ese momento Perú llamó en consulta a su embajador en señal de protesta. Chile hizo lo propio y entregó una nota diplomática días después, en donde niega que su gobierno promueva estos actos.
Tras la reciente decisión peruana, el canciller chileno Herlado Muñoz dijo el sábado que «no vamos a comentar el contenido de esas notas porque son de carácter reservado y, debidamente en su momento, vamos a responder. No puedo decir cuándo, pero analizaremos el contenido de la nota que nos ha enviado Perú», aseveró Muñoz a la prensa de su país.
El último miércoles, el presidente de Perú, Ollanta Humala, aseguró que aquella respuesta chilena sobre el tema no era satisfactoria y anunció que Perú reaccionaría de forma enérgica, lo que parece cumplirse con el retiro del embajador anunciado esta madrugada.
Paralelamente, la bancada parlamentaria del gobernante Partido Nacionalista, pidió revisar los acuerdos comerciales con Chile, mientras que el gremio empresarial peruano pidió dejar el tema en manos de la Cancillería.
Para algunos analistas y sectores políticos, la actitud de Humala y de su bancada puso en aprietos al cuerpo diplomático peruano, que probablemente podría haber agotado otras instancias antes de llegar a retirar temporalmente a su embajador.
«Normalmente un presidente deja que su cuerpo diplomático resuelva estas cosas. Pero aquí es él quien ha asumido las riendas. Retirar al embajador puede ser una posición desmesurada porque había otros niveles políticos que agotar», dijo a la AFP el expertos en temas internacionales Carlos Novoa, profesor de la Universidad de Lima.
No obstante, fuentes diplomáticas explicaron que la dura reacción del presidente -un comandante del ejército en retiro- tiene un punto clave: las pruebas evidencian que Chile lo espió durante todas las etapas del diferendo limítrofe marítimo que ambos resolvieron finalmente en 2014 en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Humala además tiene la prerrogativa constitucional de dirigir la política exterior del país.
Medios peruanos han dado a conocer la identidad de un supuesto espía chileno que pagó a los militares peruanos para obtener informaciones sensibles, dato que está en poder del gobierno de Perú y con el que acreditaría que el hecho se produjo, sobre todo en temas de capacidad operativa de la Marina de Guerra peruana.
A pesar de sus desavenencias, mantienen en la actualidad sólidas relaciones comerciales: Chile tiene invertidos en Perú 14.000 millones de dólares, en tanto que los capitales peruanos en tierras chilenas suman 8.000 millones, según cifras oficiales de 2014.(I)
El presidente del Perú, Ollanta Humala, rechazó hoy la decisión de la Fiscalía de reabrirle investigación a su esposa, Nadine Heredia, por presunto lavado de activos, y lamentó que se construyan procesos a partir de «titulares periodísticos».
«Como esposo claro que me siento maltratado. Se está sentando un precedente jurídico funesto. ¿Si esto le pasa a la primera dama, qué le podrá pasar a un ciudadano de a pie?», dijo Humala en un encuentro con corresponsales de prensa extranjera en Palacio de Gobierno.
Para el mandatario, el fiscal del caso, Ricardo Rojas León, ha incurrido en irregularidad al reabrir una investigación que había sido calificada en segunda instancia como «causa decidida», lo que en términos fiscales equivale al «cosa juzgada» de la Justicia.
Rojas León reabrió la investigación con el argumento de que hay nuevos indicios de que más de 200.000 dólares acumulados en una cuenta bancararia por Heredia entre 2006 y 2010, que en principio habían sido documentados como pagos por servicios profesionales de dos empresas peruanas y una venezolana, tienen otro origen.
Los documentos supuestamente indican que ese dinero no fue depositado por esas empresas sino por personas del entorno de Heredia con escasas posibilidades económicas, entre ellos su hermano Ilán.
«Y ahora, como no tienen esas pruebas, se quieren meter con las propiedades de mi suegra», se quejó Humala en referencia a las pesquisas a que han sido sometidas compras inmobiliarias hechas por la madre de Heredia, Antonia Alarcón.
Las investigaciones tienen en el centro de la mirada a Heredia, presidente del gobernante Partido Nacionalista Peruano (PNP) y de quien la oposición asesgura que es por carácter y conocimientos quien en realidad gobierna al país. (I)
Con un fuerte llamado a la unidad nacional Tabaré Vázquez asumió este domingo como nuevo presidente de Uruguay en sustitución de José Mujica, quien culminó su mandato constitucional de cinco años. Vázquez, un médico oncólogo de 75 años, ya presidió el país entre 2005 y 2010, cuando abandonó el poder con un índice de popularidad mayor al 70%.
En su primer discurso en el Parlamento al asumir el cargo, Vázquez apeló a la unidad nacional por encima de las diferencias partidarias y llamó a «analizar y discutir juntos y con respeto los distintos caminos para lograr la mejor educación pública» y mejoras en los sistemas de salud y vivienda.
Vázquez dijo que su gobierno se inspirará en el legado del prócer José Artigas (1764-1850), un caudillo inflexible en su lucha por la libertad, la república y los derechos de los más desposeídos, hoy venerado por todos los sectores políticos del país.
El nuevo presidente recordó que Artigas, tras vencer en una batalla contra los españoles en la época de la colonia, pidió clemencia para los vencidos, y usó esa imagen para una velada crítica al grupo terrorista Estado Islámico: «Qué diferente al momento actual, donde se inmolan víctimas, se graban por televisión y tristemente se muestran como su fuera un espectáculo circense o deportivo».
En esa línea, el nuevo presidente señaló que hoy en el mundo ocurren cosas «sencillamente horribles». «Pocas veces en su historia la humanidad se vio tan sacudida y tan golpeada, tan abrumada, como en estos tiempos. La violencia, el miedo, el terror, la intolerancia campean en distintas regiones de nuestro planeta», dijo.
Reacciones
Para el politólogo Daniel Chasquetti, profesor de la Universidad de la República, «Vázquez apeló a Artigas buscando rescatar los fundamentos de la democracia y la república en Uruguay».
«El mensaje fue claro: vivimos en un mundo muy complicado, que está mal y con millones de problemas, pero Uruguay tiene dónde buscar soluciones: están en el legado de Artigas, en su reivindicación de la justicia, la república, los derechos individuales y la protección de las minorías. Esos son los fundamentos de nuestra democracia y nuestra historia republicana».
Para Chasquetti, el tono del discurso marcó una clara diferencia con lo que suelen ser las declaraciones de Mujica, que muchas veces tienen un tono «refundacional».
En el Parlamento, escuchando el discurso de Vázquez, se encontraban los presidentes de Brasil, Dilma Rousseff; de Paraguay, Horacio Cartes; de Chile, Michelle Bachelet; de Perú, Ollanta Humala; de Ecuador, Rafael Correa, y de Cuba, Raúl Castro.
Al igual que Mujica, Vázquez integra el Frente Amplio, una variopinta coalición de partidos de izquierda que reúne desde demócratas cristianos hasta comunistas, pasando por socialistas y ex guerrilleros. Vázquez está asociado a los mayores triunfos de su fuerza política. Fue alcalde de Montevideo entre 1990 y 1995, cuando encabezó la primera victoria electoral de la coalición izquierdista en la capital uruguaya. Y tras dos intentos fallidos también conquistó la presidencia de Uruguay por primera vez para el Frente Amplio.
Sobrio y de vestir elegante, mesurado y calmado al hablar, vecino de un distinguido barrio residencial montevideano, el estilo de Vázquez difiere en casi todo del semblante austero y campechano Mujica. Poco dado a las disquisiciones filosóficas de su antecesor, los puntos fuertes de Vázquez tienen más que ver con la capacidad de mando.
Nuevamente a la Presidencia
Vázquez tendrá el honor de ser el tercer uruguayo en gobernar el país dos veces desde comienzos del siglo XX, algo que no suele ocurrir ya que la reelección directa está prohibida en este país de 3,3 millones de habitantes. «Tabaré», como suelen llamarlo los uruguayos, llegó por segunda vez al cargo de presidente tras vencer en noviembre en un balotaje al candidato del Partido Nacional, el centroderechista Luis Lacalle Pou, con el 53% de los votos contra el 41%.
Mujica le entregará a Vázquez un gobierno con altos índices de aceptación popular y un país con la economía en crecimiento, los salarios en alza y el índice de desempleo en un nivel históricamente bajo. Pero también con un déficit fiscal que preocupa a algunos analistas y problemas en el sistema educativo y en la seguridad pública, entre otros.
El nuevo presidente tendrá también que implementar la ley que legalizó el mercado de la marihuana, una iniciativa de Mujica que llamó la atención del mundo entero pero que todavía no ha comenzado a funcionar en sus aspectos centrales. El estado todavía no ha seleccionado a las empresas que cultivarán la hierba y por ello no se ha sembrado ni comenzado la venta en farmacias, tal como está previsto.
Vázquez ha calificado de «increíble» que la marihuana se vaya a vender en las farmacias y dijo que estará muy atento a los efectos del plan para desandar el camino si los resultados no son buenos.
Con la toma de posesión de Vázquez, Uruguay completa hoy un ciclo de 30 años ininterrumpidos de vida democrática, desde que el 1 de marzo de 1985 asumió el presidente electo Julio María Sanguinetti y puso fin a una dictadura cívico militar que se había iniciado en 1973.
«Quisiera fervorosamente saludar los 30 años ininterrumpidos de democracia que gozamos en el Uruguay», dijo Vázquez.
En otra muestra de su llamado a la unidad nacional, Vázquez dedicó un saludo especial a Sanguinetti, que pertenece al opositor Partido Colorado, presente en la ceremonia de toma de posesión.
Los cibernautas se burlaron de los personajes que aparecen en Esto es guerra, Combate y Bienvenida la tarde.
Los tickets están a la venta desde hoy en los módulos de Tu entrada de Plaza Vea y Vivanda. El show será el 23 de abril en el Estadio Nacional.