América Latina «es incapaz de progresar en la democratización» y solo dos países de la región -Uruguay y Costa Rica- califican como «democracias plenas», según un informe de The Economist Intelligence Unit (EUI) realizado para la cadena británica de noticias BBC.
El estudio intenta cuantificar, con un índice que va de 0 a 10, el estado de la democracia liberal en 165 estados independientes y dos territorios.
Los países son clasificados en cuatro categorías: aquellos que cuentan con «democracias plenas», los que son «democracias imperfectas», aquellos que tienen modelos «híbridos» y los «regímenes autoritarios».
Para llegar a sus conclusiones, los investigadores evaluaron no solo el clásico acceso a las urnas, sino cinco factores más: proceso electoral y pluralismo, libertades civiles, funcionalidad del gobierno, participación política y cultura política.
«Elegimos estos criterios para dar una definición más fuerte, amplia y sólida que no sea solo tener elecciones y tener respeto a las libertades civiles», le explica a BBC Mundo Irene Mia, directora regional de Latinoamérica en EIU.
Y bajo esos parámetros, América Latina experimentó una regresión respecto del índice del año anterior.
«A pesar de la democratización en América Latina en las décadas recientes, muchos países de la región cuentan con democracias frágiles», se lee en el informe.
Sin embargo, entre los expertos no hay consenso sobre cómo definir –ni menos, medir- la democracia.
Debilidad
De acuerdo con el estudio de EIU, en América Latina «los niveles de participación política son generalmente bajos y la cultura democrática es débil».
La mayor parte de los países de la región, según el estudio, ha logrado establecer «elecciones libres y justas» y el respeto a las libertades civiles.
De hecho, en ambos factores, Latinoamérica se posiciona mejor que sus pares de Medio Oriente, África y Europa del Este.
Pero el proceso democrático está estancado, asegura el documento.
«Democracias plenas»
La región «es incapaz de progresar en la democratización», señala el estudio. A excepción de Uruguay y Costa Rica, con índices de 8,17 y 8,03 respectivamente, lo cual permite incluirlos en la categoría de «democracias plenas».
Estas, según el EIU, se entienden como países donde no solo las libertades civiles y políticas básicas son respetadas, sino que son la base de una «cultura política que conduce al florecimiento de la democracia».
En términos generales, la democracia plena mejor evaluada, con el número uno del índice, es Noruega, con 9,93.
Del otro extremo, en América Latina, Cuba (3,52) y Haití (3,82) son los peor evaluados. Ambos países son considerados por el informe de EIU como «regímenes autoritarios».
Sin embargo, el concepto de «democracia popular o participativa», como define el gobieno cubano su propio sistema político, no es comparable al concepto de «democracia liberal», bajo el cual se entiende el índice.
De todo el listado, el país menos democrático es Corea del Norte, con un índice de 1,08.
«Democracias imperfectas»
Chile (7,80), Brasil (7,38), Panamá (7,24), Argentina (6,84), México (6,68), Colombia (6,55), Perú (6,54), El Salvador (6,53) y Paraguay (6,26) están consideradas por el índice como «democracias imperfectas».
Esta categoría abarca aquellos estados que, según el estudio, tienen elecciones libres y justas, libertades civiles básicas respetadas, pero presentan debilidades en otros aspectos como gobernabilidad, bajos niveles de participación y una cultura política poco desarrollada.
Sin embargo, los límites entre las categorías del informe son difusos, según le explica a BBC Mundo Francisco Panizza, profesor e investigador de London School of Economics (LSE) y experto en Democracia y Derechos Humanos en América Latina.
«Muchos otros índices ponen a un país como Chile como una democracia plena (…). No existen las democracias perfectas, pero yo diría que países como Chile, Brasil, Uruguay, son democracias en general de buena calidad», señala el experto.
«Regímenes híbridos»
Otra categoría que identifica el índice de EIU son los «regímenes híbridos».
En estos sistemas existen, según el estudio, irregularidades sustanciales en las elecciones que usualmente las alejan de ser libres o justas, el gobierno presiona a los partidos de oposición y cuentan con serias debilidades más prevalentes que las democracias imperfectas.
Además, en esos países, el Estado de Derecho es débil y el poder judicial no es plenamente independiente.
El EIU enmarca en este grupo a Ecuador (5,87), Honduras (5,84), Guatemala (5,81), Bolivia (5,79), Nicaragua (5,32) y Venezuela (5,07).
Sin embargo, según el profesor de London School of Economics, el punto de división entre democracias imperfectas y regímenes híbridos «no está hecho con demasiado rigor».
Por ejemplo, en el caso de Bolivia, asegura Panizza, «en muchos sentidos el gobierno de Evo Morales profundizó la democracia al integrar y dar participación a amplios sectores excluidos de la sociedad, como los indígenas».
«En Ecuador no cabe duda de que la reelección de Correa reflejó muy claramente la popularidad que tiene el presidente Correa en Ecuador», dice el académico.
Otros países como Nicaragua, Guatemala y Honduras «tienen problemas en lo que tiene que ver con la neutralidad del Estado, la vigencia del Estado de Derecho y uso de la libertad de prensa, pero aun así las elecciones siguen siendo libres y sin coerción, por lo que no podría hablarse de regímenes híbridos».
Riesgos
El informe advierte que existen riesgos que afectan a la democracia en general en la región.
«El crimen descontrolado en algunos países –particularmente la violencia y el tráfico de drogas- así como la corrupción, están teniendo un impacto corrosivo sobre la democracia en América Latina», explica el informe.
Pero estos no son los únicos peligros. «Los problemas más graves para la democracia en la región siguen teniendo que ver con las debilidades institucionales de los Estados, los continuos niveles de desigualdad socioeconómica y los bajos niveles de educación», le explica a BBC Mundo Francisco Panizza, profesor e investigador de London School of Economics (LSE) y experto en Democracia y Derechos Humanos en América Latina.
Un índice más preciso debiera contemplar también estos factores, apunta Panizza.
La imagen era impensable hasta hace apenas cinco semanas: una alta delegación gubernamental de Estados Unidos negociará a partir del miércoles en La Habana con el gobierno de Raúl Castro, de igual a igual, para poner fin a más de medio siglo de «guerra fría» entre ambos países.
El histórico acercamiento entre los viejos enemigos ideológicos fue anunciado el pasado 17 de diciembre tras meses de negociaciones secretas, y debe concluir en los próximos meses con la reapertura de embajadas en Washington y La Habana.
Se cambiaron décadas de una política exterior «de un día para otro», resumió el lunes el senador norteamericano Patrick Leahy desde la capital cubana. Leahy lideró el fin de semana una delegación del Congreso estadounidense que visitó la isla de cara a las negociaciones que deben abrir una nueva era entre ambos países.
El senador demócrata por el estado de Vermont fue también él mismo uno de los gestores del anuncio hecho en diciembre por el presidente estadounidense Barack Obama, y su homólogo cubano, Raúl Castro.
Leahy medió para conseguir la liberación de Alan Gross, un cooperante norteamericano preso en Cuba desde 2009 y una de las piezas claves para el nuevo comienzo diplomático. Otra fue la excarcelación de tres espías cubanos presos en Estados Unidos desde 1998.
La reconciliación entre Washington y La Habana relanza una relación que ha marcado como pocas los vínculos de Estados Unidos con América Latina. Desde los turbulentos días de los años 60 en que Fidel Castro expropió a las empresas norteamericanas en Cuba y en que las tensiones de la Guerra Fría pusieron al mundo al borde del conflicto nuclear en el Caribe, la isla ha sido un bastión de la oposición a Estados Unidos en la región.
Diálogos migratorios
El acercamiento a Cuba no sólo le podría devolver ahora a Obama el protagonismo político en Washington, sino que redefinirá también previsiblemente sus relaciones con América Latina. La Casa Blanca se había quedado sola desde hacía tiempo en la región con su política de aislamiento hacia el gobierno de los Castro.
El giro político de Obama prevé ahora una serie de flexibilizaciones al embargo que Estados Unidos impone a Cuba desde los 60. Las medidas que entraron en vigor el pasado viernes permitirán a los norteamericanos viajar con más facilidad a la isla, por ejemplo, o a empresas estadounidenses ofrecer tecnología a Cuba.
El embargo, no obstante, sólo puede ser levantado por el Congreso, donde ambas cámaras están bajo el control de los republicanos. Los conservadores abogan tradicionalmente por una política de mano dura con el castrismo.
«El Congreso tiene que aceptar su responsabilidad también», pidió Richard Durbin, senador demócrata por Illinois, durante su visita a La Habana.
Las delegaciones de Cuba y Estados Unidos se reunirán este miércoles por primera vez. En la agenda para las conversaciones en el Palacio de Convenciones, en el oeste de La Habana, están inicialmente los diálogos migratorios que ambos países celebran ya regularmente.
Las conversaciones para regular los flujos migratorios entre ambos países son uno de los raros contactos bilaterales que ya existían de antemano y que Washington y La Habana celebran con interrupciones de los años 90.
Diplomacia
La primera reunión para tratar el restablecimiento de los lazos diplomáticos está prevista para el jueves. La delegación estadounidense estará presidida por la secretaria adjunta del Departamento de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson.
Jacobson será la más alta representante del gobierno estadounidense que llega en viaje oficial a La Habana en décadas.
La delegación cubana estará presidida por Josefina Vidal, una alta funcionaria de la cancillería de La Habana que se ocupa desde años de asuntos relacionados con Estados Unidos.
Las negociaciones han generado enormes expectativas en la isla. La mayoría de cubanos espera que el acercamiento se traduzca pronto en mejoras para sus condiciones de vida y en un impulso para superar la crónica crisis económica que sufre el país desde los años 90.
Poco después de salir a un parque habanero con un pin en la chaqueta que mostraba unidas las banderas de ambos países, «se me acercaron muy rápido los cubanos», contó el congresista estadounidense Chris Van Hollen.
Estaban «muy entusiasmados por las perspectivas de cambio», aseguró el representante demócrata por Maryland, que estuvo, al igual que Durbin, tres días en La Habana con la comitiva de Leahy. A la isla llegan también desde hace días numerosos representantes de medios estadounidenses para cubrir la histórica negociación. (I)
“Todavía no me lo han confirmado. No sé cómo está el asunto… Me han propuesto hacerme cargo de uno de los nuevos programas”, señaló.
La modelo comentó que evitará los escándalos para asumir su rol protagónico en la telenovela Gabriela, que saldrá por Latina.
El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, abogó hoy por eliminar el derecho a veto que tienen los países miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU).
El canciller planteó dotar de «participación plena a las regiones del mundo» en el organismo de la ONU y no a los países y además propuso «eliminar el derecho de veto con que se invistieron los países ganadores de la conflagración global más cruenta de la historia», en referencia a la Segunda Guerra Mundial.
Patiño dijo que «sería hermoso tener un Consejo de Seguridad en donde no tengan veto los cinco países que lo tienen ahora, sino en donde se pueda debatir con equidad los problemas del mundo».
Los cinco miembros permanentes del Consejo son Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia y China.
El canciller criticó que el Consejo de Seguridad de la ONU funcione en la actualidad de forma «imperfecta y viciada» y reclamó un «reparto más equilibrado y democrático del poder y de la palabra entre los países y las regiones».
En ese sentido, destacó los avances que han dado los países de América Latina y El Caribe construyendo «una identidad común, genuinamente americana», aunque puntualizó que aún «falta mucho por hacer».
El pronunciamiento de Patiño se dio en el marco de una de las deliberaciones del Foro Parlamentario Asia-Pacífico que se desarrolla en Quito con la presencia de legisladores de 17 países de las dos regiones.
La Vigésima Tercera Reunión de este ente parlamentario concluirá el miércoles con la firma de una declaración conjunta de la que se ha anticipado contendrá más de 40 resoluciones.
El presidente iraní Hasan Rohani y su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, de visita en Teherán, anunciaron ayer su intención de cooperar dentro de la OPEP para hacer subir los precios del petróleo, que desde junio perdieron la mitad de su valor.
Maduro se refirió a los cambios en el mercado del petróleo durante su encuentro en Teherán con el mandatario de Irán, Hasan Rohani, según la agencia oficial iraní de noticias, IRNA.
Rohani opinó que la cooperación en el seno de la OPEP puede consolidar el precio del crudo en el 2015. “La cooperación de los países que en la OPEP están en la misma línea, aparte de neutralizar los programas de algunas potencias contra esta organización, puede ayudar a la consolidación de un precio aceptable para el petróleo en el 2015”, expresó.
El precio del barril del petróleo ha caído más de 55% desde junio para cotizarse en menos de 50 dólares por barril, lo que ha causado graves problemas a las economías de Irán y Venezuela.
La OPEP no ha alcanzado un acuerdo para reducir su producción. Irán, gobernada por chiíes, ha culpado indirectamente a Arabia Saudí, su rival regional cuyos gobernantes pertenecen a la rama suní del islam, de negarse a reducir la producción.
Irán es el cuarto país en reservas de crudo del mundo y el primero en las de gas natural, aunque su capacidad de explotación está muy limitada por las sanciones internacionales que sufre debido a su controvertido programa nuclear.
La visita de Maduro a Irán es parte de la gira por los países de la OPEP que inició en busca de colaboración para enfrentar la crisis económica de su país agravada por la caída del precio del petróleo.
En la reunión, ambos mandatarios abordaron también las relaciones bilaterales. Maduro afirmó que Venezuela busca ampliar lazos con Irán, en todos los campos especialmente en economía y política.
El presidente iraní manifestó que Irán proseguirá “su cooperación con Venezuela en los ámbitos de la vivienda, los transportes, la industria, la alimentación y los medicamentos para satisfacer las necesidades del país”. En tanto, Maduro llamó a mantener la “presencia de sociedades iraníes” en Venezuela, que podría constituir una “buena base para las exportaciones iraníes hacia América Latina”. (I)
El presidente chino, Xi Jinping, anunció este jueves en la inauguración del I Foro Ministerial China-CELAC que su país se ha fijado la meta de elevar la inversión de la segunda economía mundial en Latinoamérica hasta 250.000 millones de dólares en los próximos 10 años.
En un discurso pronunciado ante los presidentes de Ecuador (Rafael Correa), Venezuela (Nicolás Maduro) y Costa Rica (Luis Guillermo Solís), Xi citó ése como uno de los grandes objetivos en los lazos entre ambas partes, siendo otro destacado el doblar el comercio bilateral en una década hasta 500.000 millones de dólares.
«China está dispuesta a trabajar con América Latina y el Caribe para crear una nueva plataforma de cooperación conjunta», señaló Xi en una solemne ceremonia en el Gran Palacio del Pueblo, sede del Legislativo chino, ante delegaciones gubernamentales de 30 países del CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños).
Xi aseguró que América Latina es «una de las regiones emergentes con mayor potencial para desarrollarse» y que ha crecido de forma estable ayudada por organizaciones como la CELAC, a la que Pekín ha prestado gran atención desde su creación hace apenas un lustro.
China y Latinoamérica, afirmó, «están unidos por sendos proyectos de revitalización» económica y política, unos caminos que el presidente chino señaló que ofrecerán muchas oportunidades para todo el planeta.
En ese sentido, Xi subrayó que en el próximo lustro China deberá importar para mantener su crecimiento bienes por valor de más de 10 billones de dólares, invertirá en el exterior 500.000 millones o será la fuente de 500 millones de turistas al extranjero.
Xi destacó por otra parte que el I Foro China-CELAC, al que asisten 20 cancilleres latinoamericanos y caribeños (incluidos los de países sin lazos diplomáticos con Pekín), se elaborarán las reglas para el funcionamiento permanente de este nuevo mecanismo de diálogo, nacido por iniciativa del propio presidente chino.
También se firmará la llamada «declaración de Pekín», que marcará las líneas futuras de la cooperación entre China y la CELAC, y se anunciará un plan 2015-19 de cooperación en áreas como seguridad pública, comercio, inversión, finanzas, infraestructuras, energía, recursos, industria, agricultura o ciencia, anunció Xi. (I)
Las contrataciones de seguro de gastos médicos bajo la ley de salud de Obama crecieron lento pero constante.
El gobierno de Cuba liberó a algunos de los 53 detenidos que Washington considera presos políticos, dijo este martes el Departamento de Estado norteamericano, cuando ambos países se encaminan hacia la normalización de relaciones diplomáticas.
«Ya han liberado a varios de esos detenidos», dijo Jen Psaki, portavoz de la cancillería estadounidense. «Obviamente, nos gustaría ver que ese proceso se complete en un futuro próximo, y se trata de un tópico sobre el que volveremos a concentrarnos», añadió.
Psaki, sin embargo, no informó cuántas personas fueron liberadas ni cuando, pero dijo que formaban parte de una lista que Washington presentó a La Habana.
Cuando Washington y La Habana sorprendieron al mundo en diciembre al anunciar el inicio de un proceso de normalización de sus relaciones, el Departamento de Estado mencionó que los acuerdos incluían la liberación de 53 personas de una lista de detenidos que Washington considera presos políticos.
«Continuaremos pidiendo al gobierno de Cuba que implemente sus compromisos», dijo Psaki.
De acuerdo con Psaki, esa lista «no debe ser vista como el final de nuestras discusiones sobre derechos humanos con el gobierno de Cuba. Es parte de ello, sin duda, y vemos que el gobierno de Cuba ha dado un paso al que se había comprometido no sólo con nosotros sino también con el Vaticano».
Por ello, añadió, Washington «exhorta» a los cubanos «a que continúen implementando» esos compromisos de liberar detenidos.
Al ser consultada si las personas que había sido incluidas en la lista eran «realmente presos políticos», Psaki se limitó a comentar que «es la forma en que yo los describiría», sin aportar otros detalles.
La portavoz de la cancillería estadounidense buscó minimizar una relación entre la liberación de estos detenidos y el éxito de las primeras conversaciones de alto nivel que los dos países mantendrán en medio siglo, cuando se reúnan en La Habana a fines de este mes.
«Hay muchos componentes en la forma en que este nuevo abordaje a Cuba ayudará a la sociedad civil, activistas por los derechos humanos en Cuba. Sentimos que la liberación de los prisioneros es importante. Tener un diálogo, abrirse a la capacidad de comunicarse también son pasos que consideramos importantes», comentó.
La subsecretaria de Estado para América Latina, Roberta Jacobson, encabezará la delegación estadounidense que mantendrá esa primera ronda de diálogo para normalizar las relaciones bilaterales. De acuerdo con Psaki, ese viaje aún no tiene una fecha definida porque «aún estamos ultimando detalles». (I)