Ataques presuntamente con gas cloro por helicópteros del gobierno sirio dejaron 40 heridos y un niño muerto en el noroeste del país, dijeron activistas ayer, un día después de que un organismo internacional que vigila el uso de armas químicas se declaró dispuesto a investigar varias denuncias.
El grupo Defensa Civil Siria difundió videos en los cuales se ve a paramédicos y vecinos llevar niños a un hospital mientras tosen y jadean por falta de aire en Saraqeb, provincia de Idlib. Un video desde Nareb muestra a un paramédico recibiendo oxígeno después de rescatar gente en otro ataque. Una coalición de grupos insurgentes en Idlib registró avances contra las fuerzas leales al presidente Bashar Assad.
Los videos parecían auténticos y correspondían con lo averiguado por AP.
El Observatorio Sirio para los DD. HH., que se basa en una red de activistas en el terreno, dijo que los ataques durante la noche dejaron al menos 40 civiles heridos, incluidos varios niños. El observatorio, con sede en Gran Bretaña, dijo que según funcionarios médicos en Nareb, un niño murió por causas que no estaban claras. Comités Coordinadores Locales, otro grupo activista, también informó sobre el presunto ataque químico en Saraqeb. (I
Lluvias en zonas desérticas del norte de Chile, donde los lechos de ríos se mantuvieron sin agua durante décadas, y un intenso temporal que deja inundaciones y deslaves en departamentos del Perú son parte de los efectos del clima en la región.
Las autoridades peruanas han interpretado las inundaciones registradas en los departamentos de Piura (que limita con Ecuador), Arequipa y Cuzco, como el anticipo del fenómeno de El Niño, que organismos internacionales pronostican estará presente en el mundo al menos hasta septiembre próximo.
Las fuertes lluvias en Perú provocaron inundaciones y avalanchas que han dejado al menos 43 muertos y 58 heridos en los últimos seis meses, según un informe divulgado esta semana por el Instituto Nacional de Defensa Civil de ese país.
El último reporte de marzo pasado de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), que se nutre de informes de varios organismos del mundo que hacen análisis y predicciones climáticas, indica que “de las previsiones de los modelos y las opiniones de los expertos se desprende que durante abril y mayo del 2015 persistirán unas condiciones entre neutras y cálidas o características de un episodio débil del fenómeno de El Niño”.
El informe agrega que las temperaturas del Pacífico tropical superarán los umbrales característicos de El Niño hacia mediados de año. Sin embargo, la OMM advierte que “las proyecciones de muchos de los modelos actuales muestran una considerable dispersión en cuanto a esas temperaturas, lo cual se debe a que las predicciones a largo plazo realizadas en esta época del año tienen un grado de acierto limitado. Debido a esa dispersión todavía se puede dar una gama amplia de resultados, que van desde un episodio de El Niño de condiciones neutras a un episodio muy intenso”.
Marcelo Nilo Gatica, director de asuntos científicos y recursos pesqueros de la Comisión Permanente del Pacífico Sur (CPPS), cuya sede está en Guayaquil, señala que la región tiene un buen nivel científico y técnico para dar respuestas certeras frente a la incidencia del fenómeno de El Niño, que provoca inundaciones y sequías a nivel global. “Lo que puede ocurrir aquí es que efectivamente tienes un problema asociado a los datos, que no necesariamente se toman en la misma temporalidad y en la misma escala… Son modelos matemáticos muy probados, pero como cualquier modelo depende de la calidad del dato”, refiere Nilo.
Aunque las lluvias caídas en marzo pasado en zonas desérticas de Antofagasta y Atacama, en el norte de Chile, no han sido vinculadas al fenómeno de El Niño, las autoridades de ese país sí han sido cuestionadas debido a que no se alertó a la población del temporal que se venía. El gobierno ha informado que la reconstrucción de las áreas afectadas tendría un costo aproximado de 1.500 millones de dólares.
El temporal provocó la muerte de 26 personas y otras 150 más están desaparecidas, al igual que se registraron 29.741 damnificados. El Ministerio de Educación informó que más de 40.000 niños esperan retornar a clases en Atacama. (I)
El incendio desatado en la zona cordillerana de la provincia argentina de Chubut (sur) ha arrasado ya 4.400 hectáreas de bosques nativos y mantiene evacuadas a una decena de familias, informaron este lunes fuentes oficiales.
Más de 150 brigadistas trabajan por contener el foco principal, en las cercanías de la localidad de El Hoyo, y se han visto beneficiados en las últimas horas por la mejora de las condiciones climáticas, afirmó el director de Defensa Civil provincial, Evaristo Melo, en un comunicado.
«La temperatura en la zona tuvo una notoria disminución y durante la noche la humedad permitió que el fuego que afecta a la zona de El Hoyo no se propagara a gran velocidad», dijo Melo.
Las llamas, que comenzaron hace diez días, han quemado tres viviendas de la zona y un depósito de forrajes y leña, detalló el funcionario.
El otro gran foco, que afectó el Parque Nacional Los Alerces, un área protegida de la zona, está parcialmente controlado y se prevé que hoy «se pueda declarar controlado en todo su perímetro», agregó el director de Defensa Civil.
El fuego tiene lugar pocas semanas después de uno de los peores incendios desatados en la Patagonia argentina, que se originó en las cercanías de la localidad de Cholila, también en la provincia de Chubut, y que arrasó 35.000 hectáreas de bosque. (I)
Nigeria elige presidente el sábado bajo un clima de miedo y en medio de una grave escalada de violencia.
La directora de la Unidad de Climatología del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), Grinia Ávalos, declaró este martes que existen condiciones para la llegada de un fenómeno del Niño moderado en Perú, entre mayo y junio próximos.
Ávalos declaró a RPP Noticias que si las condiciones océano-atmosféricas se mantienen, «podría darse un evento de moderada intensidad».
«Si las ondas Kelvin que esperamos arriban al mar peruano en abril o mayo, ayudarán a mantener el calentamiento costero», indicó.
«Estamos en el periodo de vigilancia máxima, monitoreando muy intensamente los patrones de circulación atmosférica del mar para ver si en las próximas semanas estas condiciones siguen favoreciendo la presencia de este evento en las costas del Perú», explicó la especialista.
Dado que el fenómeno climático llegaría fuera de la temporada de lluvias en Perú, el evento se reflejaría como un «otoño cálido», con dos grados centígrados más altos por encima de la temperatura habitual.
El fenómeno del Niño suele presentarse en las últimas semanas del año y se extiende hasta marzo o abril con la llegada de una corriente cálida en el océano Pacífico, que incrementa las temperaturas en la costa y las precipitaciones en el norte del país.
Sin embargo, valos dijo que el fenómeno de este año probablemente no producirá inundaciones, sino una sensación térmica más alta con perjuicios para la pesca y la agricultura.
El Estado peruano tiene un comité de expertos, a cargo del monitoreo permanente del fenómeno del Niño, formado por especialistas del Senamhi, la Autoridad Nacional del Agua (ANA), el Instituto del Mar del Perú (Imarpe), el Instituto Geofísico del Perú (IGP), la Marina de Guerra y el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).(I)
Dos niños perdieron la vida, una mujer embarazada y otro niño se encuentran desaparecidos y unas 12.000 personas fueron evacuadas por inundaciones en el norte de Argentina, informaron el lunes la policía y gobiernos provinciales.
En la provincia de Salta, fronteriza con Bolivia, el drama se desató cuando una camioneta con nueve personas a bordo intentó cruzar un río que había aumentado su caudal en los últimos días por fuertes precipitaciones.
«El vehículo fue arrastrado por la correntada y dos niños se ahogaron, mientras una mujer embarazada y otro niño se encuentran desaparecidos», dijo a la AFP una portavoz de la oficina de prensa de la Policía de Salta.
Los cuerpos de los dos niños fallecidos -menores de cinco años- fueron encontrados mientras el resto de los pasajeros fue trasladado a un hospital y se encuentran en observación por traumatismos, agregó la misma fuente.
En tanto, en la provincia vecina de Tucumán, las autoridades ordenaron este lunes la evacuación total de dos poblaciones que involucran unas 12.000 personas, como consecuencia de graves inundaciones.
«Esperamos graves problemas en Lamadrid y en Graneros. Vamos a tratar de evacuar a todos», sostuvo en rueda de prensa el gobernador provincial José Alperovich.
Lamadrid y Graneros se encuentran a unos 120 km de la capital provincial (1.312 km al norte de Buenos Aires).
Las torrenciales lluvias caídas en los últimos días obligaron a la apertura de todas las compuertas del dique Escaba, sobre el río Marapa, y esa masa de agua es la que se desplaza hacia las poblaciones evacuadas.
Las autoridades ordenaron la apertura de las compuertas porque corría peligro la seguridad de la represa, dijo Fernando Torres, titular de Defensa Civil provincial al canal de noticias TN.
En 1992 y en 2000, Lamadrid ya había quedado bajo el agua por la crecida del rio Medinas y hubo miles de evacuados que debieron abandonar sus casas de forma intempestiva.
En el sur tucumano, donde arrecian las inundaciones, fueron suspendidas las clases.
La semana pasada unas 6.000 personas tuvieron que abandonar temporalmente sus hogares en las provincias centrales de Córdoba, Santa Fe, San Luis y Santiago del Estero.
Organizaciones ambientalistas, como Greenpeace, atribuyeron las inundaciones a la pérdida «de gran parte de bosques nativos por el avance descontrolado de la frontera agropecuaria, lo que hizo a la zona mucho más vulnerable a las intensas precipitaciones».(I)
Dos niños perdieron la vida, una mujer embarazada y otro niño se encuentran desaparecidos y unas 12.000 personas fueron evacuadas por inundaciones en el norte de Argentina, informaron el lunes la policía y gobiernos provinciales.
En la provincia de Salta, fronteriza con Bolivia, el drama se desató cuando una camioneta con nueve personas a bordo intentó cruzar un río que había aumentado su caudal en los últimos días por fuertes precipitaciones.
«El vehículo fue arrastrado por la correntada y dos niños se ahogaron, mientras una mujer embarazada y otro niño se encuentran desaparecidos», dijo a la AFP una portavoz de la oficina de prensa de la Policía de Salta.
Los cuerpos de los dos niños fallecidos -menores de cinco años- fueron encontrados mientras el resto de los pasajeros fue trasladado a un hospital y se encuentran en observación por traumatismos, agregó la misma fuente.
En tanto, en la provincia vecina de Tucumán, las autoridades ordenaron este lunes la evacuación total de dos poblaciones que involucran unas 12.000 personas, como consecuencia de graves inundaciones.
«Esperamos graves problemas en Lamadrid y en Graneros. Vamos a tratar de evacuar a todos», sostuvo en rueda de prensa el gobernador provincial José Alperovich.
Lamadrid y Graneros se encuentran a unos 120 km de la capital provincial (1.312 km al norte de Buenos Aires).
Las torrenciales lluvias caídas en los últimos días obligaron a la apertura de todas las compuertas del dique Escaba, sobre el río Marapa, y esa masa de agua es la que se desplaza hacia las poblaciones evacuadas.
Las autoridades ordenaron la apertura de las compuertas porque corría peligro la seguridad de la represa, dijo Fernando Torres, titular de Defensa Civil provincial al canal de noticias TN.
En 1992 y en 2000, Lamadrid ya había quedado bajo el agua por la crecida del rio Medinas y hubo miles de evacuados que debieron abandonar sus casas de forma intempestiva.
En el sur tucumano, donde arrecian las inundaciones, fueron suspendidas las clases.
La semana pasada unas 6.000 personas tuvieron que abandonar temporalmente sus hogares en las provincias centrales de Córdoba, Santa Fe, San Luis y Santiago del Estero.
Organizaciones ambientalistas, como Greenpeace, atribuyeron las inundaciones a la pérdida «de gran parte de bosques nativos por el avance descontrolado de la frontera agropecuaria, lo que hizo a la zona mucho más vulnerable a las intensas precipitaciones».(I)