El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, abogó hoy por eliminar el derecho a veto que tienen los países miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU).
El canciller planteó dotar de «participación plena a las regiones del mundo» en el organismo de la ONU y no a los países y además propuso «eliminar el derecho de veto con que se invistieron los países ganadores de la conflagración global más cruenta de la historia», en referencia a la Segunda Guerra Mundial.
Patiño dijo que «sería hermoso tener un Consejo de Seguridad en donde no tengan veto los cinco países que lo tienen ahora, sino en donde se pueda debatir con equidad los problemas del mundo».
Los cinco miembros permanentes del Consejo son Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia y China.
El canciller criticó que el Consejo de Seguridad de la ONU funcione en la actualidad de forma «imperfecta y viciada» y reclamó un «reparto más equilibrado y democrático del poder y de la palabra entre los países y las regiones».
En ese sentido, destacó los avances que han dado los países de América Latina y El Caribe construyendo «una identidad común, genuinamente americana», aunque puntualizó que aún «falta mucho por hacer».
El pronunciamiento de Patiño se dio en el marco de una de las deliberaciones del Foro Parlamentario Asia-Pacífico que se desarrolla en Quito con la presencia de legisladores de 17 países de las dos regiones.
La Vigésima Tercera Reunión de este ente parlamentario concluirá el miércoles con la firma de una declaración conjunta de la que se ha anticipado contendrá más de 40 resoluciones.
El presidente chino, Xi Jinping, anunció este jueves en la inauguración del I Foro Ministerial China-CELAC que su país se ha fijado la meta de elevar la inversión de la segunda economía mundial en Latinoamérica hasta 250.000 millones de dólares en los próximos 10 años.
En un discurso pronunciado ante los presidentes de Ecuador (Rafael Correa), Venezuela (Nicolás Maduro) y Costa Rica (Luis Guillermo Solís), Xi citó ése como uno de los grandes objetivos en los lazos entre ambas partes, siendo otro destacado el doblar el comercio bilateral en una década hasta 500.000 millones de dólares.
«China está dispuesta a trabajar con América Latina y el Caribe para crear una nueva plataforma de cooperación conjunta», señaló Xi en una solemne ceremonia en el Gran Palacio del Pueblo, sede del Legislativo chino, ante delegaciones gubernamentales de 30 países del CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños).
Xi aseguró que América Latina es «una de las regiones emergentes con mayor potencial para desarrollarse» y que ha crecido de forma estable ayudada por organizaciones como la CELAC, a la que Pekín ha prestado gran atención desde su creación hace apenas un lustro.
China y Latinoamérica, afirmó, «están unidos por sendos proyectos de revitalización» económica y política, unos caminos que el presidente chino señaló que ofrecerán muchas oportunidades para todo el planeta.
En ese sentido, Xi subrayó que en el próximo lustro China deberá importar para mantener su crecimiento bienes por valor de más de 10 billones de dólares, invertirá en el exterior 500.000 millones o será la fuente de 500 millones de turistas al extranjero.
Xi destacó por otra parte que el I Foro China-CELAC, al que asisten 20 cancilleres latinoamericanos y caribeños (incluidos los de países sin lazos diplomáticos con Pekín), se elaborarán las reglas para el funcionamiento permanente de este nuevo mecanismo de diálogo, nacido por iniciativa del propio presidente chino.
También se firmará la llamada «declaración de Pekín», que marcará las líneas futuras de la cooperación entre China y la CELAC, y se anunciará un plan 2015-19 de cooperación en áreas como seguridad pública, comercio, inversión, finanzas, infraestructuras, energía, recursos, industria, agricultura o ciencia, anunció Xi. (I)