Suzuki presenta su nuevo S Cross Híbrido 2025

Suzuki presenta su nuevo S-Cross Híbrido

27/11/2025

Suzuki presenta su nuevo S-Cross Híbrido en un evento en Cumbayá. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

Suzuki del Ecuador presentó su nuevo modelo S-Cross Híbrido en una noche que evocó una temática aérea que simboliza el despegue de la innovación.

Dentro de la actual oferta automotriz en Colombia, la Suzuki S-Cross Híbrida es uno de las SUV subcompactas más interesantes al integrar hibridación ligera y un importante refuerzo de seguridad. Si bien lleva la misma carrocería que conocemos desde 2022, bajo el capó y en sus entrañas hay novedades que merecen atención. Por eso, decidimos probarla a fondo en su versión automática, viajando de Bogotá a Bucaramanga como es común.

Más allá de la apariencia, lo interesante está en cómo la camioneta combina un motor Turbo de 1.4 litros con un sistema eléctrico de 48 voltios, cuyo efecto se siente en aceleraciones cortas y en el ahorro de combustible. A eso se suman las asistencias avanzadas (ADAS), que aportan a la seguridad y el confort. Así, buscamos comprobar si la hibridación sí entrega beneficios tangibles en ruta y ciudad, o si es solo un gancho comercial.

Por supuesto, esta prueba real no se limitó a un par de vueltas rápidas. Llenamos tanque, reseteamos computador y medimos autonomía, consumo y desempeño en diferentes condiciones de terreno, a lo largo de varios recorridos en carretera y ciudad. En este contexto, la S-Cross Híbrida debía demostrar su capacidad como vehículo cotidiano, pero también como opción para viajes largos. Y lo hizo con creces.

Vehículo analizado: Suzuki S-Cross Híbrida GLX Automática.
Tipo de motor: Gasolina + Generador eléctrico 48 voltios (Mild Hybrid).
Precio: 132.990.000 COP (septiembre/2025).

NOS GUSTÓ

Muy bajo consumo de combustible.
Paquete completo de asistencias avanzadas a la conducción.
Espacio de carga amplio y versátil.
Suspensión muy suave y eficiente.
Posición de manejo muy cómoda.

PODRÍA MEJORAR

No hay salidas de aire ni puertos USB en la segunda fila.
Aún tiene freno de mano mecánico.
La cortinilla del techo deja pasar luz y calor.
Plaza central trasera estrecha.

Suzuki S-Cross Híbrida: a simple vista

La Suzuki S-Cross Híbrida que analizamos esta vez, mantiene un estilo tradicional con detalles modernos. Sus ópticas LED, parrilla en negro piano y listón cromado central marcan un frontal llamativo, acompañado de exploradoras halógenas que resultan útiles en lluvia fuerte, algo común en carreteras colombianas. El lateral destaca con rines de 17 pulgadas, barras de techo funcionales y pasos de rueda en plástico negro que refuerzan el aire crossover.

Atrás, los stops transparentes con listón cromado y el portón de gran boca cumplen más con la practicidad que con un estilo deportivo. Y, finamente, esa es la intención de este vehículo. El diseño cuadrado favorece la habitabilidad interior y un baúl que arranca en 430 litros y se amplía a 665 litros con segunda fila abatida. Todo bien pensado para familias que cargan maletas, mercado y hasta bicicletas pequeñas.

En general, no busca ser una camioneta de lujo o deportiva, sino un vehículo familiar con proporciones equilibradas. Además, tiene un despeje al suelo de 17,5 cm, suficiente para lidiar con rampas, andenes y caminos destapados ligeros. El conjunto estético es sencillo pero práctico y busca cumplir con esa función, algo que suele valorar el comprador que busca más utilidad que detallitos decorativos.

Vida a bordo: interior, equipamiento y seguridad

Al entrar a la cabina, es claro que la Suzuki S-Cross Híbrida se pensó para viajes largos. La posición de manejo se ajusta fácilmente gracias al volante regulable y a unas sillas que, aunque no tienen ajuste eléctrico, resultan cómodas y firmes en carretera. Los relojes analógicos combinados, con la pantalla central, permiten monitorear el vehículo de forma clara, mientras la pantalla multimedia de 9 pulgadas ofrece Android Auto y Apple CarPlay, aunque en el caso de Android requiere cable.

En los asientos traseros, dos adultos viajan cómodos y con buen espacio en cabeza y piernas, aunque la plaza central se siente estrecha. No hay salidas de aire, ni puertos USB. A cambio, hay buen espacio de almacenamiento, reposabrazos con portavasos y techo panorámico que aporta luminosidad. El baúl es plano y práctico, con organizador de doble fondo, ganchos y hasta toma de 12V, ideal para familias que cargan desde maletas hasta bicicletas plegables.

El paquete de seguridad merece mención aparte. Además de seis airbags y frenos ABS con EBD, integra control de estabilidad y un conjunto ADAS de última generación: frenado autónomo de emergencia, control crucero adaptativo, alerta de cambio de carril, tráfico cruzado, luces altas automáticas y alerta de punto ciego. En la experiencia, el control adaptativo resultó útil en rectas largas y el sistema de colisión se activó con prudencia ante frenadas bruscas en tráfico pesado.

Aspectos mecánicos

La Suzuki S-Cross Híbrida cuenta con un motor K14D Boosterjet de 1.4 litros Turbo que entrega 127 hp y 235 Nm de torque, acompañado de un sistema eléctrico de 48 voltios que aporta 16,3 hp y 50 Nm adicionales. En la práctica, esto significa arranques más suaves y recuperaciones más ágiles, con menos esfuerzo del motor térmico. La transmisión automática de seis marchas cumple con transiciones rápidas, y las levas en el volante ayudan a tener mayor control en descensos o sobrepasos.

Durante la experiencia, lo más notorio es cómo la hibridación entra en juego en ciudad: al frenar o soltar acelerador, el sistema regenerativo acumula energía y la devuelve en arranques. No se siente como un motor eléctrico independiente, sino como un apoyo silencioso que hace el manejo más relajado. En carretera, el conjunto ofrece respuesta suficiente, sin pretender ser deportivo, pero con la confianza de tener torque disponible para maniobras seguras.

En cuanto a la suspensión, absorbe huecos con solvencia y mantiene estabilidad en curvas rápidas. El conjunto se siente sólido, con una dirección muy precisa y un chasís que responde bien en maniobras de esquiva. Aunque no es una SUV pensada para terrenos extremos, sí afronta con tranquilidad carreteras irregulares o destapadas ligeras. Cabe recordar, en este punto, que es un vehículo de tracción delantera.

Prueba de manejo

Como es usual, llevamos la Suzuki S-Cross Híbrida de Bogotá a Bucaramanga, con tanque lleno y una autonomía inicial de 503 km. Desde los primeros kilómetros, la aguja se mantuvo inmóvil, algo que sorprendió al indicar un muy bajo consumo. Dos horas después, a medio camino hacia Tunja, el rango había subido a 546 km, y el computador marcaba 17,9 km/l (67,7 km/galón), como si la camioneta estuviera estirando cada gota de gasolina.

En el Socorro, tras 290 km de camino, las cifras eran aún más llamativas: 19,2 km/l (72,6 km/galón) y autonomía de 602 km, con la aguja apenas movida. Fue allí donde entendimos que este carro juega con el terreno y las pendientes para recuperar energía y devolverla en consumo. Al día siguiente, en descensos como el de Pescadero, la autonomía subió hasta 790 km con poco más de medio tanque. Fue casi como si el carro “regalase” kilómetros extra.

Al llegar a Bucaramanga, el odómetro sumaba 405 km recorridos y el promedio final quedó en 17,7 km/l (67 km/gal). En días posteriores, con uso urbano y trayectos cortos, registramos 633 km por tanque con un consumo total de 15 km/l (56,8 km/gal). La experiencia completa confirmó que, sin trucos, la S-Cross Híbrida puede entregar una eficiencia que sorprende en la práctica, siempre dependiendo del estilo de manejo y del terreno

Conclusiones

Nuestra experiencia con la Suzuki S-Cross Híbrida demostró que este modelo tiene argumentos sólidos para quien busca un SUV familiar eficiente y seguro. En la práctica, los consumos reales entregaron cifras que superaron lo esperado, incluso en carreteras exigentes como las que unen Bogotá y Bucaramanga. La sensación de autonomía creciente durante el viaje mostró cómo la hibridación ligera cumple su papel y aporta un valor tangible.

Más allá de la mecánica, es obvio que este auto fue diseñado pensando en la funcionalidad. El espacio interior, la modularidad del baúl y la incorporación de asistencias a la conducción lo hacen competitivo frente a rivales directos. Aun así, también deja áreas de mejora: la falta de aire acondicionado trasero, la ausencia de conectores USB en la segunda fila y el freno de mano mecánico son detalles que en este rango de precios deberían revisarse.

Así las cosas, la S-Cross Híbrida se perfila como una opción realista y coherente en un mercado que se llena de promesas híbridas poco claras. Las cifras y la experiencia lo confirmaron. Además, responde tanto en ciudad como en carretera, con consumos bajos, seguridad completa y un manejo agradable. En resumen, es una propuesta que encaja bien en las necesidades de familias colombianas que buscan un carro versátil y confiable para el día a día y para los viajes largos.