Supuesto asesino de opositor ruso confiesa
El pasado 27 de febrero tuvo lugar un evento que conmocionó a Rusia entera: Boris Nemtsov, un político opositor a Putin, fue asesinado a sangre fría y de improviso a unos pocos metros del Kremlin. El hecho fue considerado por algunos como una medida descarada por parte del gobierno oficial, cuya popularidad ha bajado tras los bloqueos económicos impuestos por occidente. Para otros, se trató de un plan bien orquestado justamente para dar esa apariencia.
El día de hoy, uno de los detenido por el caso, de quienes se desconocía si eran o no culpables, ha confesad su participación en el crimen. Esta confesión se considera prueba suficiente y su culpabilidad ha quedado confirmada, de acuerdo con la palabras de la juez Nataliya Mushnikova.
El hombre responde al nombre de Zaur Dadáev, y lo acompaña un segundo sospechoso de nombre Anzor Gubashev.
Por su parte, el acusado declaró:
«Nunca antes he sido acusado penalmente. Espero que mi caso sea tratado con justicia».
Mientras tanto, Gubashev niega toda responsabilidad en el caso. Los instructores que investigan el caso de asesinato presentaron cargos formales contra ambos.
En total, las fuerzas de seguridad han detenido a cinco personas, tres de ellas el sábado -Dadáev, Gubashev y su hermano Shaguid- y dos en las últimas horas, Ramzat Bajáev y Tamerlán Eskerjanov. Los tres últimos también se declaran inocentes.
«Los detenidos niegan estar involucrados en dicho crimen, pero la investigación tiene pruebas de su implicación», señalaron los instructores.
Todos se encuentran bajo prisión preventiva hasta el 28 de abril. Todos son de origen chechen y sus parientes viven en la república norcaucásica de Ingushetia, donde la policía local ha iniciado interrogatorios.
Esto, sin embargo, no es suficiente para los abogados de la familia Nemtsov ni para los opositores políticos de Putin, que exigen la captura no sólo de los autores materiales, sino también de quien haya encargado en asesinato.
Antes de su asesinato, Nemtsov había denunciado antes autoridades rusas de distintas esferas sobre las amenazas de muerte que existían en su contra, pero éstas nunca le prestaron atención. La sospechas ciudadanas en contra de la administración rusa continúan.
