Sirven los puntos negros en el fondo del parabrisas
Sirven los puntos negros en el fondo del parabrisas. En la actualidad la mayor parte de los coches nuevos (y los que tienen unos años, incluso), cuentan con los que son los denominados como puntos negros en el coche, todo en el lado del fondo del parabrisas. Un aspecto que, si bien es algo que se ve a diario, no todos conocen totalmente ni para que sirve. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.
La franja negra con puntos del coche que no sabías
Desde la flecha que acompaña al testigo de la gasolina y el cuentakilómetros, fundamental para saber en qué lugar se encuentra el depósito sin salir del vehículo, hasta las perchas que puedes encontrar en las agarraderas situadas sobre las puertas traseras.
Entre todos estos detalles podemos encontrar los pequeños puntos que probablemente habremos visto cientos de veces… pero de lo que no sabemos realmente qué usos tienen. Por eso te preguntamos; ¿alguna vez has visto para qué sirven?
Para situarnos, hablamos de la que es una franja negra con puntitos del mismo color que rodean las lunas, unas fritas cerámicas, que se ve como una mezcla de sustancias químicas inorgánicas que van mucho más allá de lo estético porque tienen una razón lógica para estar presentes en cada parabrisas.
Protegen la luna coche del sol o evitan el paso del agua
Como decimos, esta tira de puntos negros en el borde del parabrisas del coche tiene nombre propio, frita. Es una pintura cerámica de gran resistencia que resulta prácticamente imposible de arañar o rascar. Lleva a cabo una triple tarea muy importante para asegurar la función de protección del parabrisas, y alargar su vida útil.
Lo cierto es que muchas veces no le damos a los cristales la importancia que se merecen, pero en realidad son una obra maestra de la ingeniería, no simples trozos de vidrio cortados.
La frita es básicamente una pintura cerámica ultra-resistente horneada en el vidrio y cumple varias funciones, entre ellas las de ofrecer una superficie más rugosa al adhesivo o, por ejemplo, ejercer una función estética, que es ocultar el adhesivo a la vista. Además, impide que el agua y otras sustancias se introduzcan en nuestro coche.
Antiguamente se aplicaba para impedir que el cristal vibrara
Es entonces que, por su parte, el lado de la frita que mira al interior del coche permite sellar los cristales al vehículo, mientras que el lado exterior actúa como escudo contra rayos ultravioleta para proteger esa unión. O lo que es lo mismo; de no existir la frita el adhesivo se debilitaría por la continua exposición a la luz solar.
Dado que la banda frita o los puntos del coche en el parabrisas es de color negro, esta tiende a calentarse más rápido que el vidrio transparente. Por suerte, los ingenieros de los distintos fabricantes entendieron que, instalando una pequeña banda de puntos entre la frita y el vidrio, conseguirían una transición al calor mucho más suave que podría evitar ese efecto.
Antiguamente, los fabricantes de coches solían usar juntas a medida para sellar los cristales. Sobre esas juntas se aplicaba un borde cromado para impedir que el cristal vibrara.
Debemos saber, no obstante, que en los años 50′ y 60′, los fabricantes comenzaron a abandonar esa técnica de la junta metálica y a reemplazarla por adhesivos. En ese momento se hizo obvio que hacía falta algo más para proteger el pegamento y mejorar la adherencia. En algún momento la banda frit se convirtió en un estándar en todos los parabrisas.