Secreto para tener WiFi en una habitación sin cobertura
Secreto para tener WiFi en una habitación sin cobertura. A la hora de establecer una red inalámbrica WiFi en nuestro domicilio, no siempre todo sale a pedir de boca. Hay muchos factores en juego y fallar en uno de ellos puede repercutir en la calidad de la cobertura que consigamos, hasta el punto de poder dejar algunas habitaciones completamente inservibles o con una calidad de WiFi pésima. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.
Por suerte, hay muchos cambios que puedes realizar sin hacer gasto y que deberían mejorar tu señal inalámbrica en tu hogar.
Trucos para mejorar la calidad de tu WiFi gratis
Realizando ciertos cambios a nivel de router puedes llegar a mejorar una barbaridad la calidad de tu señal. En primer lugar, asegúrate de que la posición del router sea la ideal. Las recomendaciones de los expertos es que el router esté en una posición central para que reparta la señal de forma equitativa a todos los extremos de tu hogar, aunque esto no sería necesario si solamente lo vas a utilizar en un despacho, sala de videojuegos, etc.
Más allá de la posición del router, recuerda ciertas «normas» sobre cómo posicionar el router para que no degrade la señal que emite. Tendrá que estar en una posición recomendablemente elevada, alejado de aparatos eléctricos que produzcan interferencias, lejos de ventanas y muros que puedan afectar a la propagación de la señal. El metal, ladrillos u hormigón hacen de efecto búnker y limitan la capacidad de propagación de tu señal.
Hablando de propagación, las antenas del router son un elemento muy importante y hay que tener en cuenta su posición desde un punto de vista más allá de lo decorativo. Como la señal WiFi se emite desde los lados de la antena y hacia arriba (perpendicular al router) suele ser lo mejor para que la señal no se proyecte al suelo o al techo y se pierda por el camino. Si tiene varias antenas, puedes intentar ajustarlas en diferentes ángulos para proporcionar una cobertura más amplia.
Por último, considera cambiar entre las bandas de frecuencia de la señal inalámbrica. Cambiar entre 2,4 GHz y la de 5 GHz puede ser la solución a tus problemas. El WiFi de 2,4 GHz tiene más interferencias por tener canales que se solapan entre sí, pero a pesar de ello tiene mayor alcance por operar en una frecuencia más larga, a cambio de una menor velocidad de conexión. Si la distancia desde el router hasta el destino de una señal 5 GHz no es suficiente, quizás la de 2,4 GHz te funcione.
Otras opciones de pago
Repasadas las posibilidades para realizar cambios en tu red inalámbrica doméstica sin gastar ni un duro, si no has encontrado una mejora significativa, puedes invertir algo de presupuesto en ciertas opciones de pago.
Lo primero sería instalar algún elemento que te ayude a amplificar la señal. Una alternativa muy recurrida es la de usar amplificadores WiFi. Básicamente consiste en disponer de uno o varios receptores que posteriormente ofrecen conexión inalámbrica a otros dispositivos. Mediante esta cadena de WiFi, van a potenciar la señal en una determinada zona de la vivienda donde lo tengamos conectado.
Por último, sobre todo si tienes todavía únicamente el router que te suministró el operador, considera cambiar tu router. Si tienes un router inalámbrico más antiguo, deberías considerar reemplazarlo por un dispositivo más nuevo, principalmente con WiFi 6, que ofrece rangos más largos y velocidades de conexión más rápidas.