La Toyota Hilux de actual generación podría recibir una nueva actualización estética. Si bien todo indica que se trata de fotos recreadas de manera digital, las mismas sirven para tener una referencia de los cambios que estrenaría la pick up más vendida del mercado local.

Antes de analizar las posibles novedades hay que aclarar que se trata de información extraoficial y por el momento no hay ningún indicio de que Toyota vaya a presentar un rediseño de la Hilux. Es más, hasta ahora todas las expectativas están sobre la nueva generación, que debería salir a la luz entre 2025 y 2026.

Así sería la renovación de Toyota Hilux

Pero volviendo a las proyecciones que circularon en las redes, el cambio central estará en la trompa, con retoques en paragolpes, parrilla y ópticas que alinean el frente de la pick up con el de otras ‘chatas’ de Toyota conocidas en otros mercados, como las Tundra y Tacoma, por ejemplo.

De costado casi no se observan novedades salvo por un cambio en el diseño de las llantas, algo que suele ser casi moneda corriente a la hora de hacer un rediseño. La Toyota Hilux mantendría sus proporciones con predominancia de líneas angulosas pero con una carrocería que ya siente el paso de los años. Cabe destacar que esta generación se presentó en 2015 y luego pasó por varias pasadas en limpio (la última la tuvo en 2020).

Por último, en el sector trasero tampoco hay cambios considerables como en la trompa, salvo por alguna pequeña diferencia en la zona del portón y las ópticas, que mantendrían la tecnología LED para las versiones más equipadas, al igual que el paragolpes cromado. La unidad utilizada para las proyecciones es una tope de gama, lo que queda evidenciado por la abundancia de cromados y los accesorios como estribos o barra tipo San Antonio.

Lo que podría cambiar en el interior

Quizás la evolución más interesante se podría dar en el interior, porque entre las imágenes aparece una captura de la plancha de a bordo con una interesante presentación bitono y cambios en la arquitectura. El tablero conserva la disposición con agujas y display central, pero el sistema multimedia podría incorporar una pantalla más generosa ubicada por encima de las salidas del aire.

También se aprecian cambios en el diseño de la consola central y los tapizados, que hacen juego con el tono de la plancha. En definitiva, cambios que le sentarían muy bien a la Hilux actual, que adentro es quizás donde luce más anticuada frente a rivales como la Ford Ranger.

¿Novedades mecánicas?

Al ser un rediseño naturalmente no se esperan novedades para la mecánica. En Argentina la Toyota Hilux se ofrece con un motor 2.4 turbodiesel de 150 CV para las versiones más económicas llamadas DX y el conocido 2.8 de 204 CV, que queda reservado para las variantes intermedias y tope de gama. Por su parte, la transmisión puede estar a cargo de una caja manual de seis marchas o una automática, también de seis.

Vale aclarar que en otros mercados como Europa o incluso en países de la región como México, la Hilux ya se ofrece con una variante híbrida del tipo ligera, con un pequeño motor de 48 volts que asiste en determinados momentos y permite una mejor respuesta en baja y un menor nivel de emisiones. Por el momento no se sabe si esta opción será ofrecida en nuestro país.

Respecto del equipamiento, la Hilux hoy está en un nivel promedio para el segmento, con algunas cosas interesantes como los ADAS del Toyota Safety Sense, que incluye crucero adaptativo, frenado autónomo con detector de peatones y ciclistas, mantenimiento de carril (corrige con el freno porque la dirección es hidráulica) y luces altas automáticas. En este sentido no se sabe si el rediseño de la pick up podría incorporar más elementos, ya sea de confort o seguridad.

Así las cosas, lo cierto es que todavía no se sabe ni se habla demasiado de un rediseño para la Hilux, aunque hay que prestar atención a lo que suceda en mercados como Tailandia, que siempre anticipa lo que va a ocurrir con la pick up de Toyota en la región, tal como sucedió hace cuatro años con la última actualización.