San José espera por Odúbel

San José de Heras, un pequeño pueblo ubicado en el estado Zulia, todavía no puede presumir de ser cuna de un grandeliga, pero para el 2015 eso puede cambiar. Al menos, Odúbel Herrera se tiene mucha fe.

Después de despuntar con su bate en las menores en sus seis años de carrera, el jugador de Tiburones de La Guaira se coronó como campeón bate en la liga de Texas de Doble A, y actualmente lidera a los toleteros de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional en promedio (.385), y eso que se trata de su año debut en el circuito.

El siguiente paso podría ser iniciar la venidera campaña en la sucursal Triple A de los Rangers, pero el madero zurdo es ambicioso. «Ahora mis expectativas son más altas», respondió entre risas. «Vamos a ver qué es lo que pasa. La meta es llegar a Arlington (Texas). Hay que pensar en positivo». Confianza le sobra.

Desde el terruño que lo vio nacer hasta la Gran Carpa hay mucho trecho. «Es un pueblito chiquito y humilde. De pequeño siempre fui al estadio a jugar como fuera, y de ahí crecí, de jugar con mis compañeros, con quienes competía por quién bateara o metiera más jonrones», recuerda Odúbel, quien sigue muy conectado a sus raíces. «En San José de Heras siempre hacemos una ‘caimanera’ el 29 de diciembre entre los firmados de mi pueblo y los firmados de otro comunidad vecina llamada Caja Seca».

Para esa fecha, día de su cumpleaños número 23, ya debe saber si jugará el round robin o no con Tiburones, que de clasificar tendrá en el zuliano a uno de sus baluartes. “Gracias a Dios que hasta ahora me está yendo bien, y le pido que me siga yendo así”, dijo el infielder reconvertido en jardinero. «Yo trabajo muy duro en las prácticas y eso se ve en el juego».

Tan bien le va que podría alzarse con el título de bateo y el premio Novato del Año. «Vamos a ver ¿por qué no? Yo lo que tengo que hacer es seguir enfocado sin pensar en eso, como hasta ahora», indicó Herrera, quien comentó que la presión le llega por otros lados. «En el dugout o cuando estoy con la familia siempre me hablan de eso».

Pero él sigue a lo suyo, que es batear para mantenerse en la alineación de Buddy Bailey, donde estuvo en el primer día y no ha dejado de contar porque no ha bajado del potro de los .300 de average desde el décimo juego de la campaña. Si los premios individuales llegan “bien recibido serán”.

Este éxito le ha traído muchos seguidores, sobre todo niños que ya utilizan pelucas semejantes a su peculiar peinado. El ímpetu que le pone a su juego ha dejado boquiabierto a más de un adulto también.

«Eso me gusta, porque uno siente el apoyo y siente que no está solo en esto. Me inspiran a sacar lo mejor de mí», expresó el novato, quien no ve comparación en ningún otro lado a su vivencia con la fanaticada guairista. «Lo de aquí es único. Aquí hay más pasión y eso lo sientes».

La cifra:

50 Hits tiene Odúbel Herrera en su primera campaña en la LVBP. Está a diez del récord para criollos de Ronny Cedeño en la 2005-2006.