Roselyn Sánchez se convirtió en la estrella más observaba del Latin Grammy, todo por cuenta de un revelador vestido, que dejó muy poco a la imaginación. El diseño, en color dorado y elaborado en transparencias, contó con aplicaciones de colores que simulaban formas coralinas. Aunque todo el vestido fue muy llamativo, sin duda un tremendo escote que terminaba en un rombo a la altura del abdomen, se robó todas las miradas. La actriz optó por llevar el cabello suelto peinado a la perfección y un maquillaje intenso.