Entre ocho y diez “puntos importantes” tendría el proyecto de reformas al Código de Trabajo vigente, que enviará el Ejecutivo a la Asamblea el próximo 15 de noviembre, al recordarse otro aniversario de la masacre de los obreros de 1922.

Así lo adelantó el secretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, aunque no dio detalles de cuáles serían.

Mera dijo que el régimen desistió de plantear un nuevo Código porque la discusión política “se complica muchísimo”.

“El problema de los cuerpos (legales) grandes es que se manejan mal políticamente; entonces la derecha dice que estamos entregados a la izquierda, la izquierda dice que estamos entregados a la derecha…”, señaló el funcionario.

En un conversatorio, el pasado jueves, Correa habló de tres temas: el despido ‘nulo’ para favorecer a las embarazadas, altas indemnizaciones para quienes sean despedidos por discriminación y las utilidades de las empresas telefónicas.

Ayer, en tanto, empezaron a llegar a Guayaquil las delegaciones provinciales de los gremios de sindicatos que participarán en su convención nacional, hoy, desde las 09:00.

En la reunión se definirá una postura frente al anuncio presidencial de no presentar un nuevo Código Laboral y a la “regresión” en derechos laborales que impulsa el régimen, señaló Verónica Montúfar, representante de la Internacional de Servicios Públicos.

Montúfar señaló que podrían desarrollarse otras medidas de presión similares a las anteriores (protestas), a las que se sumarían otros sectores sociales.

En el marco de la reunión, ese gremio prevé plantear la creación de un Observatorio de Servicios Públicos desde los sindicatos del sector público, que se enfocará en la salud.

Este trabajaría en dos frentes: hacer denuncia sobre la situación de los servicios y proponer cambios en políticas públicas.