Recordó que más del 80% de ciudades en el mundo brinda el servicio de su Metro de manera pública y no concesiona su administración a privados como al parecer se quiere hacer en este caso.

Gissela Chalá, vicealcaldesa de Quito, mostró preocupación por el cambio de opinión del alcalde Jorge Yunda, el concejal Bernado Abad y el secretario de Movilidad Guillermo Abad, para rever el modelo de gestión directa del Metro y en ese sentido destacó que la administración de ese medio de transporte no puede ser visto como un negocio sino como un servicio público sin fines de lucro.

Recordó que por unanimidad del directorio del Metro de Quito se optó por un modelo de gestión directa basado en el análisis de 50 informes y varias reuniones de trabajo: “Pero en este nuevo directorio toman la decisión de formar una comisión técnica de veedurías para que se analicen las ventajas y desventajas del modelo de gestión ya sea para su ratificación o rectificación”.

“No estoy en contra de las veedurías ojalá no fuera la única, se vinculará la academia, pero aquí se genera la posibilidad de rever o revertir un modelo que fue aprobado por directorio con base a siete consultorías que se realizaron con el apoyo de la banca multilateral”.

Recordó que más del 80% de ciudades en el mundo brinda el servicio de su Metro de manera pública y no concesiona su administración a privados como al parecer se quiere hacer en este caso.