Rabascall considera que el Consejo Nacional Electoral debe ratificarla, para que quede en firme.

Punto Noticias. Carlos Rabascall, candidato a la Vicepresidencia de la República por la coalición UNES (Unión por la Esperanza), denunció que existiría una agenda para descalificar y no permitir la inscripción del binomio que conforma con el candidato presidencial Andrés Arauz.

A criterio de Rabascall, esa agenda va más allá de solo pretender dilatar el proceso eleccionario fijado para el 7 de febrero de 2021, sino que se busca eliminar a este binomio, respaldado por las organizaciones sociales y políticas progresistas.

Para el postulante, los hechos han demostrado que el proceso eleccionario carece de transparencia, por lo que incluso ha provocado una reacción de carácter internacional que rechaza la intención de negar el derecho de participación política de este sector y sus candidatos.

Rabascall calificó de antijurídica la decisión del Tribunal Contencioso Electoral (TCE) de devolver al Consejo Nacional Electoral (CNE) el trámite de impugnación a la decisión de calificar al binomio Arauz-Rabascall, porque, a su entender, el TCE renuncia a su competencia para tratar un tema de otro organismo de carácter inferior.

Considera que, con su resolución, el Contencioso Electoral no cuestiona la calidad de la calificación de este dúo presidencial, que más bien ha quedado resuelta, pero tiene que ser ratificada, sino que queda pendiente la determinación sobre la apelación de Arboleda y Freire, que argumentan sobre la vida jurídica de Compromiso Social, no sobre las candidaturas.

Para Rabascall, el tema de la vida jurídica de la organización política fue resuelto por el mismo TCE, en su sentencia 83; en consecuencia, lo que está pasando en lo que denominó telenovela, que se está prolongando más allá de la jurídico, tiene que ver con lo político, porque se quiere dilatar la inscripción en firme del binomio.

Esta pretensión, a decir del candidato vicepresidencial, perjudica los intereses del binomio, porque, por ejemplo, al no ser candidatos de forma oficial, no pueden abrir un RUC o una cuenta para acceder a financiamiento de auspiciantes de personas naturales o jurídicas que quieran apoyar a la candidatura, mientras los otros candidatos, que tienen el estatus de oficial, ya lo pueden hacer desde hace mucho tiempo.

Otro de los fines sería crear nerviosismo, para dilatar el posicionamiento de este binomio, que sigue creciendo en las encuestas y va liderando.