
Qué trabajo realiza un gestor de contenidos
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Qué trabajo realiza un gestor de contenidos
No basta con tener un blog bonito o una web llena de ideas: si el contenido no engancha, todo se queda en nada. Aquí es donde entra la figura del gestor de contenidos, un profesional que hace que cada palabra, imagen o vídeo en una página web valga la pena. Es la persona que supervisa todo lo que se publica en blogs y sitios, asegurándose de que sea fresco, útil y atractivo, ya sea para vender un producto o contar una historia. Si te gusta escribir, organizar y trabajar online desde cualquier lugar, este trabajo podría ser tu próximo paso. Vamos a ver qué es, qué hace y por qué es clave en el mundo digital.
Un gestor de contenidos no es solo un redactor ni un editor: es un perfil estratega que mantiene vivo el alma de una web. Desde un portátil en casa, oficina, o una cafetería en otro país, decide qué se publica, cómo y cuándo, para que el público no pase de largo. En un mercado donde hay millones de sitios compitiendo, su trabajo es que el tuyo destaque. Te contamos todo sobre esta profesión y cómo encaja en una vida flexible.
¿Qué hace un gestor de contenidos?
Ser gestor de contenidos no es sentarse a redactar todo el día —aunque a veces toca—. Es estar pendiente de lo que se publica en blogs o webs, asegurándote de que cada palabra tenga sentido. Por ejemplo, pasa mañanas revisando textos de redactores freelance: “Este título no engancha, cámbialo a ‘5 trucos para un café perfecto’”. Luego se mete a planificar: ¿qué sale la próxima semana? ¿Un post sobre tendencias o una promo? Si hay equipo, coordina; si no, ella misma escribe, edita y sube todo desde su portátil.
Es un trabajo que cambia según el día. En una empresa grande, podrías liderar a cinco personas, revisando cada artículo para que sea útil y esté optimizado para Google. En solitario, como freelance, quizás gestiones un blog de viajes desde una cafetería, subiendo “Rutas secretas por Yucatán” mientras tomas un café. El punto es mantener el contenido vivo, fresco y con propósito, ya sea para vender, enseñar o entretener.
¿Por qué es esencial para trabajar online?
Sin un gestor de contenidos, una web es un caos: posts desactualizados, textos aburridos o mensajes que no venden. Este profesional:
- Mantiene relevancia: Actualiza contenido para que Google y los usuarios lo amen.
- Conecta con ventas: Trabaja con el equipo comercial para que cada artículo impulse compras o leads.
- Ahorra tiempo: Organiza el flujo para que no todo caiga en el dueño o el marketing.
En Trabajar por el Mundo, vemos su valor para nómadas: puedes gestionar un blog desde cualquier lugar, solo con tu portátil y wifi. Básicamente es una profesión que te ofrece la libertad de hacerlo desde cualquier lugar.
¿Cómo es su día a día?
Un gestor de contenidos no tiene dos días iguales. Por la mañana, revisa un borrador sobre “viajes baratos” y lo ajusta para SEO (palabras como “destinos económicos”). Al mediodía, planifica posts para un mes, coordinando con un redactor freelance. Por la tarde, sube un vídeo a la web y responde comentarios. Si trabaja solo, escribe él mismo; si es en equipo, lidera.
Habilidades que necesitas para ser gestor de contenidos
No te piden un título de Harvard, pero sí ciertas cosas. Saber escribir bien es básico —nada de frases que suenen a robot— y editar con ojo crítico, para que cada texto tenga chispa. También hay que ser organizado: si no llevas un calendario, te pierdes entre deadlines. Un poco de SEO no viene mal; saber que “mejores mochilas 2025” atrae clics ayuda. Y si coordinas gente, toca comunicarte claro, sin rodeos.
No es solo escribir bonito; este rol pide un mix único:
- Redacción y edición: Crear textos claros y pulir los de otros.
- Organización: Manejar calendarios y deadlines como un reloj suizo.
- SEO básico: Saber meter palabras clave sin que suene forzado. [Cursos para aprender SEO]
- Comunicación: Hablar con redactores, ventas o clientes con claridad.
- Adaptabilidad: Saltar de un blog personal a una web corporativa sin pestañear .
¿Cómo empezar como gestor de contenidos?
No necesitas un título específico, pero sí preparación:
- Aprende: Cursos online de redacción o marketing digital (50-200€) te dan base.
- Practica: Escribe en un blog propio o haz prácticas en una web.
- Herramientas: Familiarízate con WordPress, Google Analytics o Trello.
- Experiencia: Empieza freelance en plataformas como Upwork (5-15€/hora al inicio).
¿Cuánto gana un gestor de contenidos?
En España, un gestor de contenidos junior en una empresa puede sacar 1,500-2,000€ al mes. Si vas por libre, empiezas con 15-20€ la hora, pero con experiencia subes a 30-50€. Para empezar, escribe algo propio (un blog, un perfil en Medium), haz un curso corto de redacción o SEO, y busca proyectos pequeños.
¿Dónde buscar trabajo como gestor de contenidos?
Vale, ya te imaginas gestionando contenido desde una terraza con vistas o un café con wifi decente, pero ¿dónde encuentras esos trabajos? No es que caigan del cielo, aunque con un poco de ojo y ganas, hay más opciones de las que piensas. Te cuento por dónde ir.
Si estás empezando, puedes usar plataformas para freelance. Upwork es un clásico: subes un perfil, pones que sabes escribir, editar y planificar contenido, y empiezas pujando por proyectos pequeños, como 5-10€ la hora. Al principio es lento, pero con un par de reseñas buenas, subes tarifas. Fiverr también vale, sobre todo si ofreces algo concreto como “redacto posts optimizados para SEO” o “armo tu calendario editorial”.
Luego están los portales de empleo más tradicionales, pero con truco. En InfoJobs, RemotoJob o LinkedIn, busca “gestor de contenidos”, “content manager” o incluso “redactor SEO”; muchas empresas en España, desde pymes hasta startups remotas, cuelgan ofertas ahí. La clave es filtrar por “teletrabajo” si quieres currar desde cualquier sitio. Vi una vez una oferta de una agencia en Barcelona que pedía alguien para llevar blogs de turismo, 100% online, y pagaban 1,800€ al mes para empezar. No está mal, ¿no? LinkedIn además te deja conectar directo con gente.
Si prefieres ir por libre, las redes sociales son oro hoy en día. En Twitter o Instagram, sigue a marcas pequeñas o creadores que te molen y ofrécete: “Oye, tu contenido mola, pero con un empujón podría petarlo más”. Suena atrevido, pero a veces funciona. También hay grupos en Facebook como “Freelance España” o “Trabajo Remoto”, donde la gente cuelga proyectos sueltos o busca gestores para webs.
Y no te olvides de la red vieja escuela: habla con quien ya conoces. Ese amigo que tiene una tienda online o tu prima con un blog de manualidades podrían necesitar ayuda, aunque sea para empezar. En España, el boca a boca sigue funcionando, incluso para trabajos digitales.