Qué es una recesión económica

Qué es una recesión económica

Desde el último trimestre de , la economía ecuatoriana entró en una etapa de contracción —o disminución de la actividad económica—, de acuerdo con un informe del Banco Central del Ecuador. Después de esto, y hasta junio de 2024, los datos de dicho informe dan cuenta de que el país entró en una etapa de recesión económica. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

La economía puede pasar por diferentes etapas: primero hay un período de expansión o crecimiento, luego llega un momento de auge, al que le puede seguir una recesión económica (caída) y, al final, llegar a una depresión o crisis económica.

Después de esa depresión, el ciclo debería empezar de nuevo con una nueva fase de recuperación y expansión. Y, así, la economía puede avanzar de una fase a otra de manera continua. En este ciclo, que se repite una y otra vez, la recesión es ese momento en que la economía empieza a caer.

Pero no siempre llega a una depresión. Algunos ciclos terminan con una recesión seguida por una recuperación.

Pero, ¿cómo se llega a una recesión económica? El ejemplo de 2024 de Ecuador es útil para graficarlo.

A inicios de 2024, el desempleo en Ecuador alcanzó la tasa más alta desde 2022, llegando a 4,2%.

Esto se sumó a la caída de las inversiones en América Latina que, durante , fue de un 9,9%, y la disminución del consumo de los ecuatorianos que, junto a otros factores, causaron un proceso de estancamiento. Gráficamente, este comportamiento económico se ve como un valle en medio de las montañas —ese valle es la recesión económica.

Pese a ello, el gobierno del presidente  Daniel Noboa insiste en que ya atravesamos esa etapa y que ahora estamos pasando a una recuperación.

Para determinar el estado de la economía hay que medir un periodo determinado; suele ser anual o trimestral.

En teoría, se considera que una economía está en recesión cuando registra dos trimestres seguidos con crecimientos en negativo (o a la baja de la montaña) de su Producto Interno Bruto (PIB).

El PIB mide la riqueza que genera un país. Es decir, da cuenta del valor de todos los bienes y servicios producidos en un periodo determinado.

 

Pero esa no es la única definición de la recesión económica.

Algunos economistas la consideran como un período prolongado de declive económico, más allá de solo dos trimestres.

En el valle, o recesión, la economía se contrae en lugar de crecer. “Es una disminución significativa de la actividad económica de un país”, explica Rubén Flores, economista y decano de la Facultad de Economía de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador.

Esto significa que la oferta de bienes y servicios disponibles en el mercado disminuye, lo que provoca una caída en la inversión, del consumo y la producción. Es decir, esta reducción en la actividad económica lleva al despido de trabajadores, aumentando el desempleo y limitando la capacidad adquisitiva y de consumo de las personas.

Como resultado, se crea una espiral descendente en la economía, donde la menor demanda lleva a una menor producción, más despidos y, en última instancia, a una mayor reducción en el consumo.

Durante una recesión económica, los precios suelen bajar, lo que se llama deflación. Sin embargo, a veces pasa lo contrario: a pesar de que la economía está en declive, los precios siguen subiendo.

Esto se conoce como estanflación, y es un problema porque combina la desaceleración económica con inflación alta.

Un artículo de Banco Santander sobre la recesión económica dice que esta etapa llega después de periodos de crecimiento y bonanza, cuando hay sobreproducción, un aumento de precios y creciente endeudamiento.

Es decir, una sobreoferta de bienes o servicios podría hacer que todo lo que se ofrece no sea comprado, lo que lleva a las empresas a reducir la producción, despedir empleados y disminuir el consumo.

La especulación —comprar barato para vender caro— también juega un papel importante; si los precios suben demasiado debido a la especulación, también puede ser un factor entre muchos que cause una recesión.

Por último, la incertidumbre económica también puede llevar a las personas y empresas a posponer gastos e inversiones, lo que contrae la actividad económica, precisamente, contribuyendo a una recesión.

 

Entonces, ¿está Ecuador en recesión?

Para Rubén Flores, Ecuador tiene un serio problema desde antes de la pandemia del covid-19, en 2020, sobre la activación del aparato productivo. Con esto, Flores se refiere a que desde hace años no ha habido un impulso en el funcionamiento de la economía que permita un aumento en la producción de bienes y servicios.

Este impulso implicaría la capacidad de las empresas para producir, invertir en infraestructura, y fomentar la actividad económica en general.

“En los últimos años, la economía ha crecido mucho menos que la población”, dice el economista. Según Flores, el ingreso promedio de la población será cada vez menor, lo que reduce la capacidad de consumo y de compra.

Como resultado, esto repercute en una disminución de la producción de bienes y servicios del país. “Ecuador, desde antes de la pandemia, no ha tenido señales de recuperación, entonces estaríamos hablando que desde entonces está en una recesión”, opina Flores.

El gobierno sostiene otra versión. En una entrevista para el medio Visionarias, el 9 de agosto de 2024, el ministro de economía, Juan Carlos Vega, aseguró que estamos en una recuperación de un ciclo económico y encaminados a una senda de crecimiento. “Este es un año de ajuste, de poner las cosas en orden para cambiar el ciclo económico del segundo semestre hacia uno más positivo que el primero”, dijo.

Según Flores, estas afirmaciones se basan en un primer trimestre en el que se observó un crecimiento, que califica de “incipiente”, como para hablar de un periodo de expansión y asegurar que llega un ciclo de recuperación. “Si el próximo trimestre vuelves a caer, ¿de qué estamos hablando?”, dice Flores.

Flores explica que una fase de expansión o recuperación ocurre cuando la economía está en crecimiento y la producción aumenta a un ritmo más rápido que la población. Como resultado, el ingreso promedio sube y la capacidad de compra de las personas también mejora.

Siguiendo el ciclo económico, después de la fase de expansión llega un proceso de desaceleración. En esta etapa, el crecimiento del ingreso promedio comienza a disminuir, aunque aún no cae por debajo de los niveles anteriores. Es decir, que el ritmo de crecimiento se reduce, pero la economía sigue creciendo.

Luego llega la recesión, que se caracteriza por la ausencia de crecimiento. En una recesión, la economía no solo deja de crecer, sino que también puede contraerse. “Es importante distinguir entre la desaceleración, donde el crecimiento se reduce, y la recesión, donde la economía comienza a declinar”, dice Flores. “En los últimos años la economía ha tenido un débil comportamiento y un débil crecimiento”, concluye.

En este contexto, el economista Flores explica que tomar medidas como la subida del IVA del 12 al 15% o eliminar los subsidios a los gasolinas no son la mejor opción.

En economía existen medidas procíclicas y anticíclicas. Las medidas procíclicas son acciones que intensifican las fluctuaciones económicas, como aumentar impuestos en una recesión. Las medidas anticíclicas buscan estabilizar la economía, así como aumentar el gasto público durante una recesión.

Considerando que Ecuador enfrenta desde hace tiempo un periodo de recesión, según el experto, no es conveniente subir costos que sólo profundizan el problema. “Se bajó esa idea de que ya estamos recuperándonos y por eso creen que pueden hacerlo, pero estás generando poca capacidad de gasto y de consumo”.

Esto, en medio de un gobierno de transición y a puertas del proceso electoral, según Flores pone a la economía ecuatoriana en mayor incertidumbre. “Ni este año, ni el próximo vamos a tener la posibilidad de dar señales positivas”, opina Flores.