Qué es la regla del 50 30 20 que te permite controlar gastos y ahorrar
Qué es la regla del 50 30 20. Si alguna vez has querido ahorrar pero no has podido conseguirlo por ninguna de las maneras que has empleado, la regla del 50-30-20 es el método definitivo para hacer que tu situación económica mejore considerablemente. Eso sí, habrá que tomar serias decisiones a la hora de decantarse por una compra con el objetivo de organizar tus gastos de una forma mucho más eficaz. Acompáñanos en este artículo para conocer los entresijos de esta fórmula si lo que quieres es lograr un ahorro seguro. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
En muchas ocasiones nos hemos encontrado en una situación económica devastadora y no hemos sabido administrar debidamente nuestros gastos en compras que en realidad no necesitábamos. Hemos descargado decenas de aplicaciones para poder paliar nuestro malestar, pero enseguida las hemos abandonado por pereza o por no ser constante en la gestión de nuestro dinero. Pues bien, hay un estrategia de cálculo de ingresos y gastos que tienes que poner en práctica si quieres aumentar tus perspectivas económicas de cara a un futuro próximo y salir a flote de una mala racha.
¿Qué es la regla del 50-30-20?
La regla del 50-30-20 es una manera de ahorrar y gestionar todo el dinero neto que recibes mensualmente de una forma fácil y sencilla. Asimismo, puedes organizarte como prefieras para adaptar esta norma a tu situación personal y establecer tu propio objetivo a corto o largo plazo para adquirir un bien, como comprar una vivienda, un coche, e incluso tener la posibilidad de celebrar tu casamiento. Para ello, debes tener en cuenta las siguientes categorías de gastos asociados a unos porcentajes:
- 50% para cubrir tus necesidades primordiales para vivir: hipoteca, alquiler, comida, transporte, luz, agua…
- 30% para gastos prescindibles, que no sugieren ninguna necesidad y aumentan la calidad de vida: ir al cine, salir a comer o a cenar, comprar ropa, suscripciones a servicios de streaming, hacer un viaje en vacaciones…
- 20% para destinar el resto del dinero al ahorro: aseguramos unos ingresos para nuestro futuro y para poder afrontar imprevistos
¿Cómo aplicar la regla del 50-30-20?
El cálculo fundamental para saber que estás ahorrando correctamente es restando los gastos que se tienen a los ingresos que nos llegan. De esta manera, debes recordar el porcentaje del ahorro que tendrás que retirar cada mes si quieres cumplir con la norma estipulada, es decir, el 20% dependiendo de los ingresos que recibas, de tal forma que esa cantidad de dinero será descontada por completo.
A partir de aquí, tendrás que poner en práctica la regla del 50-30-20 calculando en primera instancia cuánto dinero ganas al mes y revisar los gastos que puedas llegar a tener mediante un extracto bancario. A mayores ingresos, mayor será el ahorro. También es preciso adaptarse de la mejor manera posible a esos porcentajes, pues no es recomendable excederse, por ejemplo, de las necesidades básicas (50%) o realizar gastos en caprichos que podríamos ahorrarnos (30%).
En este caso, no hay que confundir los gastos necesarios con los prescindibles, ya que un mes puedes necesitar comprarte ropa y otro mes gastar más de lo debido en prendas que ya tenías y, en este aspecto, realmente puedes perfectamente desecharlo. Y, en el caso de que tengas muchos gastos, tendrás que ajustarlos con un consumo mínimo para destinarlos a la última fase de la regla, el 20% del ahorro.