Puedo guardar una plaza de aparcamiento siendo peatón
A todos nos ha podido pasar alguna vez que hemos ido a aparcar y nos hemos encontrado a alguien que estaba guardando ese sitio libre de aparcamiento para otra persona. A pesar de que este comportamiento está bastante extendido, puede dar lugar a una de las multas más absurdas de tráfico. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
Encontrar un lugar en el que aparcar correctamente nuestro coche puede convertirse en una tarea imposible en ciertas zonas de las urbes más pobladas. Es por ello que muchos conductores y ocupantes tratan de tirar de picaresca y guardar un sitio impidiendo que el resto de conductores aparquen hasta que llegue el coche. ¿Está permitida esa reserva de plaza?
Peatones guardando plazas de aparcamiento
Seguro que os ha pasado en alguna ocasión, pues se ha convertido en un comportamiento habitual. Vamos a aparcar y vemos que una persona se encuentra detenida en la plaza de aparcamiento libre porque se la está guardando a alguien. Más allá del cabreo porque vamos a tener que seguir dando vueltas buscando sitios libres, ¿esa persona puede hacer eso?
No hablamos ya de aquellos que se buscan la vida precisamente gestionando los sitios libres a cambio de una propina, los conocidos comúnmente como gorrillas, sino usuarios que están reservando ese sitio para un conocido o familiar al que está reservando la plaza libre.
Este comportamiento, más allá del debate ético sobre civismo, puede incluso conllevar una sanción y su correspondiente multa. Todo ello teniendo en cuenta que el comportamiento de reservar plaza no está prohibido como tal, pero el artículo 122.6 del Reglamento General de Circulación refleja lo siguiente:
«Cuando exista refugio, zona peatonal u otro espacio adecuado, ningún peatón debe permanecer detenido en la calzada ni en el arcén, aunque sea en espera de un vehículo, y para subir a éste, sólo podrá invadir aquélla cuando ya esté a su altura».
Así, bajo el paraguas de la seguridad vial y que el peatón se encuentra en la zona donde no le corresponde, el agente de tráfico que presencie una de estas acciones puede perfectamente sancionar con una multa de 80 euros.
La mejor alternativa puede ser una app
Si estamos desesperados buscando aparcamiento, la mejor solución sin poner en peligro a un acompañante que se quede guardando el sitio y tampoco hacer peligrar el bolsillo con la posible multa puede estar en la tecnología.
Hay una serie de aplicaciones gratuitas que te ayudan a encontrar sitios libres donde aparcar. Estas se basan en posicionamiento a través de GPS para detectar cuándo los usuarios de las mismas han abandonado un estacionamiento, haciendo que automáticamente se libere para el resto de usuarios de la app y que puedan incluso añadir una ruta de navegación hasta la misma. Siempre puede haber aparcado otro vehículo mientras, pero siempre es mejor que no tener ningún tipo de asistencia, ¿verdad? Algunos ejemplos de este tipo de aplicación son E-Park, Parkifast, Parkopedia, Easypark o El Parking.