Por Ricardo Armendáriz

Seguramente hay descontento no tanto por lo que gana Jefferson Montero, porque cada cual arregla su contrato y debe sentirse a gusto con lo que arregló. El tema es que Montero no ha rendido, no ha respondido y no ha sido un buen profesional. Realmente no sé qué decir del quemeimportismo con el que ha jugado. Hay poco amor al equipo, poco afecto al trabajo y una displicencia total. Eso repercute en los demás compañeros que tal vez dicen ‘este gana tanto para lo que rinde’.

Emelec tiene una serie de problemas tremendos, como los de indisciplina, que son de dominio público. Esto lo tienen que arreglar entre los jugadores, cuerpo técnico y la dirigencia; nadie más. Los futbolistas tienen que demostrar porqué están en Emelec y porqué ha sido el equipo más ganador de la década en Ecuador. Alfredo Arias ha intentado gobernar a los jugadores, pero por el momento la cosa se le ha ido de las manos.

En el caso de la directiva eléctrica, tienen que hacerles un homenaje a Jorge Guagua, Marcos Mondaini, Pedro Quiñónez y Óscar Bagüí, que le han dado cuatro campeonatos al club, pero ya tienen más de 500 partidos cada uno en las piernas y eso, a la larga, pesa.

En Emelec es necesario que se den un baño de verdad. Deben reconocer que están actuando mal o sino las cosas no se van a arreglar. Tienen que sentarse y decirse las verdades en la cara porque hay brotes de indisciplina que están molestando a la buena marcha del plantel. Si no soluciona eso, si no hay una buena convivencia con el entrenador, y si no hay empatía entre los futbolistas no se va a llegar a ningún lado.

Lo peor es que le toca jugar (mañana) contra un River Plate que viene mejorando y Emelec no tiene una alineación estable, está lesionado Brayan Angulo y si hay un mal resultado puede ser el detonante para que haya sorpresas en la institución.

Y otra cuestión, los millonarios han basado su juego en estos diez años en su nómina nacional, que ya también siente un desgaste importante. El actual aporte extranjero no es el mejor. El colombiano Estéfano Arango juega poco y está tapado por la mayoría de futbolistas que actúan en esa posición.

El argentino Fernando Luna no es mal jugador, pero aún no rinde como en el 2017. Hay dos cupos de foráneos y deben usarse de urgencia. Se lesiona Angulo y Marlon de Jesús no está en condiciones de suplirlo. Se fue Fernando Gaibor y no hay un 8 de esa categoría. Pueden incluso prestar a Arango y traer un central. Si no se refuerza con mejores extranjeros será muy difícil pelear por el título. (O)