PLC o WiFi, la mejor alternativa si no puedes conectar por cable
La conexión por cable es una conexión que utiliza un cable de fibra óptica que debe ser instalado en tu casa cuando solicitas el servicio a un proveedor de internet. Este cable es similar al que provee la señal de televisión, que es conectado a un módem y este a su vez se conecta por medio del cable Ethernet. Pero, ¿qué podemos hacer si ni por esas podemos establecer una red a Internet buena? La solución está en el PLC. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.
El PLC para una conectividad con redes locales
Actualmente, la de por cable es una de las conexiones más usadas en los hogares, y es la que te recomendamos tener instalada en tu casa, ya que te ofrece una mejor velocidad de navegación. De todos modos, es verdad que a veces esta puede darse con algunos problemas a los que enfrentarnos y que nuestro Internet falle.
Además del omnipresente WiFi y aunque para muchos usuarios el mejor sistema para interconectar equipos es el típico cable de red, existen otras alternativas interesantes como por ejemplo las redes PLC, que es junto al WiFi la mejor opción para nuestra conexión.
Hablamos de PLC como Power Line Communications, y su objetivo actual es proporcionarnos conectividad con redes locales a través de la instalación eléctrica ya existente en hogares y empresas. Es decir, PLC utiliza el cableado de nuestras casas para transmitir datos además de la corriente eléctrica.
Qué es el PLC y cómo puede ayudarte
Al principio, estos equipos empezaron para funcionar con ADSL donde, por entonces, las velocidades no superaban los 50 MB, que a la hora de la verdad eran 5 Mbps. Entonces, y en lo referido al PLC, hablamos del que es un ‘cerebro’ que se utiliza para ampliar nuestras redes de conexión, enviando los datos de nuestra conexión a Internet a través del cable de la luz. La conexión a Internet y la electricidad funcionan en dos fases diferentes, así que no interfieren entre sí.
Puedes usar la luz y llevar Internet por la corriente eléctrica, sin ningún problema. Además, es mucho más seguro, ya que tus datos no van por el aire y son más difíciles de hackear.
Con ello, por tanto, podemos decir que es sin duda la solución más eficiente y sencilla para poder llevar la conexión a Internet a cualquier instancia de nuestro hogar por muy lejos que se encuentre del router, pues solo necesitaremos de un enchufe para conectarlos. Por lo tanto, si tiene puntos ciegos en los que justo deseas colocar una consola o Smart TV, dar uso a un adaptador PLC es una de las soluciones más adecuadas.
Su instalación es más que sencilla
En teoría un dispositivo PLC es Plug-n-play, es decir, lo conectamos y estaría listo para su uso. No obstante, como el PLC ocupa un enchufe sí o sí, algunos vienen ya con un enchufe adicional para que no te quedes sin él. Normalmente estos se venden por pares porque se necesitan dos dispositivos para hacer funcionar el sistema:
- Uno recoge la señal del WiFi para transmitirla al cableado eléctrico.
- Otro (extensor) recibe la señal y la extiende a la zona donde esté enchufado éste. Como es obvio, se pueden utilizar más extensores para que llegue a diferentes zonas de nuestro hogar.
Posteriormente, y para la conexión/instalación de todo el sistema, el método es igual de simple:
- El PLC emisor se conecta a un enchufe cercano del router y se conecta al mismo mediante un cable ethernet.
- El PLC receptor se enchufa en la zona deseada y podremos conectar un cable ethernet (o mediante WiFi) al dispositivo deseado.
¡Listo! ¿Hay que hacer algo más? Poco más que comprobar que la conexión llega correctamente. Como puedes observar, la instalación es muy sencilla: no ha habido que hacer bricolaje en casa y solo necesitamos unos pocos minutos para ponerla en funcionamiento.