Peña Nieto apela a sociedad y partidos para enfrentar la violencia en México
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, enfrentado a una incesante presión por la desaparición de 43 estudiantes en septiembre pasado, apeló hoy a la sociedad civil para emprender cambios de fondo y que hechos como ese no se repitan.
En un acto público celebrado en el Palacio Nacional, sede del Ejecutivo, el mandatario hizo un llamado a unir «esfuerzos en favor del Estado de derecho, combatir la corrupción y cerrar el paso a la impunidad».
Peña dio la «bienvenida» a los pronunciamientos de partidos y organizaciones civiles en torno a lo ocurrido el 26 de septiembre en Iguala, estado sureño de Guerrero, cuando policías atacaron a tiros a alumnos de una escuela rural para maestros presuntamente por órdenes del entonces alcalde, José Luis Abarca, hoy prófugo.
Esa noche murieron seis personas, 25 resultaron heridas y 43 jóvenes fueron detenidos y entregados al cártel Guerreros Unidos, que se encargó de su desaparición, según las pesquisas de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía).
Independientemente de la investigación de la PGR, «es indispensable tomar medidas institucionales para que hechos como estos no se vuelvan a repetir», declaró.
«En los próximos días convocaré a la representación del Estado mexicano, a las fuerzas políticas y a las organizaciones de la sociedad para asumir el compromiso de emprender cambios de fondo, fortalecer nuestras instituciones y, sobre todo, asegurar la vigencia plena del Estado de derecho en nuestro país», añadió.
Por el caso hay 56 detenidos, entre policías de Iguala y del vecino municipio de Cocula y miembros del mencionado grupo criminal incluido su líder, Sidronio Casarrubias, quien reveló que cada mes el cártel entregaba elevadas sumas de dinero al alcalde e incluso decidía quiénes se integraban a la fuerza policial.
Los hechos de Iguala se han convertido en la principal crisis política y de imagen para el Gobierno de Peña Nieto tanto al interior de país como del extranjero, con pronunciamientos de preocupación de la Casa Blanca y de solidaridad con las víctimas del papa Francisco.
En el país se han producido manifestaciones, a menudo violentas, en demanda del esclarecimiento del caso y de que los culpables sean castigados.
Un grupo de asociaciones civiles inició hoy una caminata para exigir que aparezcan con vida los 43 estudiantes desaparecidos y protestar por la situación de inseguridad imperante en el país.
El Consejo Estatal de Organizaciones-Ciudad de México (CEO-CDM) es el organizador de esta marcha llamada «43×43. Ni un desaparecido más», que partió de Iguala y llegará el 9 de noviembre a la capital mexicana.
Según explicó a Efe el dirigente de este colectivo, Pepe Alcaraz, un total de 43 personas, cada una de una organización, caminará «por cada uno de los 43 jóvenes desaparecidos».
«Nos sumamos a la exigencia nacional, los queremos vivos, le exigimos al Gobierno que se ponga las pilas a fin de que nos dé mayor seguridad en el país», apuntó Alcaraz, quien dijo que hay un «problema nacional de inseguridad muy grave».
En total recorrerán 195 kilómetros en siete días, en los que elaborarán una «propuesta ciudadana» que planean entregarle al Gobierno mexicano, un «granito de maíz o arena», en el reclamo nacional de una mayor seguridad.
Los organismos participantes de la marcha exigen asimismo el cese a la cadena de complicidades e impunidad que han permitido que la práctica de las desapariciones forzadas sea común.
«¿Cómo es posible que con todos los aparatos de inteligencia que posee el Estado no sepamos, a 40 días, dónde están los jóvenes» de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, dijo Alcaraz.
De acuerdo con el dirigente, «tal pareciera que cuando hay muertos o desaparecidos de la sociedad civil, resulta que no pasa nada y surgen interminables dudas y evasión de los responsables, y en cambio cuando hay muertos o hay agravios entre la clase política resulta que encuentran los responsables de manera casi inmediata».
«Lo que estamos diciendo con esta caminata es que no bajen la guardia en el país, que la sociedad no baje la guardia, que honremos a los jóvenes normalistas exigiendo su aparición vivos, pero que honremos a los que se fueron, a fin de que esta exigencia se convierta en un clamor nacional», acotó.