OnePlus 12 quiere ser el rey de la gama premium

OnePlus 12 análisis

Voy a empezar este análisis con un entusiasmo poco habitual: este es uno de esos teléfonos por los que merece la pena analizar tecnología. Llevo probando teléfonos desde el OnePlus One, con generaciones que me han convencido más que otras, pero jamás al nivel de esta propuesta. Tras mi análisis del OnePlus Open se reavivó mi entusiasmo con OnePlus, aunque la razón era un poco especial: ese teléfono «no era un OnePlus», era un OPPO con un cambio de nombre. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

No es ese el caso del OnePlus 12. Esto no es un OPPO Find X7 Ultra. Es un OnePlus 12, y es el mejor móvil que la compañía ha creado. No se trata tan solo de un conjunto de las mejores specs, se trata de refinarlas mediante software y mejorar en aquellos puntos que históricamente se habían criticado. Coge asiento, porque este es un teléfono para disfrutar.

Ficha técnica del OnePlus 12

ONEPLUS 12
PANTALLAPanel OLED BOE X1 de 6,82 pulgadas

Resolución 2K de 3.168 x 1.440 píxeles

Densidad de 510 píxeles por pulgada

Refresco LTPO 3.0 de 1 a 120 Hz

Brillo pico de 4.500 nits

PWM de 2.160 Hz

DIMENSIONES Y PESO164,3 x 75,8 x 9,15 mm

220 gramos

PROCESADORSnapdragon 8 Gen 3
RAM12, 16 o 24 GB

LPDDR5X

ALMACENAMIENTO256, 512 GB o 1 TB

UFS 4.0

CÁMARA FRONTAL32 Mpx IMX615 f/2.4
CÁMARAS TRASERASPrincipal: Sony LYT-808 de 50 Mpx, f/1.6, OIS

Gran angular: Sony IMX581 de 48 Mpx, f/2.2

Telefoto 3x: Sensor OV64B de 64 Mpx, f/2.6

BATERÍA5.400 mAh

Carga de 100 W por cable

Carga inalámbrica de 50 W

Carga inalámbrica inversa de 10 W

SISTEMA OPERATIVOOxygen OS 14 + Android 14
CONECTIVIDAD5G

NFC

GPS

WiFi 7

OTROSCertificación IP65

Algoritmo para poder usar la pantalla bajo la lluvia

Lector óptico en pantalla

Precio969 euros

Un diseño tan cuidado como peculiar

La propuesta en materiales apenas ha cambiado respecto al OnePlus 11. Este teléfono repite con una parte trasera de cristal Gorilla Glass 5 y un marco de aluminio. Sigue sin sentirse tan premium como un iPhone 15 Pro Max o un Samsung Galaxy S24 Ultra, pero deja ver en todo momento que estamos ante un móvil de la gama más alta. Ha crecido el tamaño del módulo de cámaras, un punto que pudiera no convencer estéticamente a algunos usuarios (no es mi caso). La principal pega de tamaño elemento es que, con el móvil boca-arriba, baila bastante.

Este es, también, un teléfono algo más grande. Sube desde los 16,3 centímetros a los 16,4, a un ancho de 7,4 centímetros y un ancho de 9,2 milímetros (algo más grueso de lo habitual). Hay dos buenas razones para que esto suceda: la pantalla y la batería son más grandes que nunca.

Si le damos la vueltas al terminal, nos encontramos ante un teléfono que dice adiós al agujero lateral (gracias, OnePlus), para adoptar la clásica configuración de perforación central. Los amantes de la simetría estamos de enhorabuena.

El aprovechamiento frontal es ligeramente superior, de un 90,8% en esta generación según GSMarena, y la principal pega es que estamos ante un panel curvo en el que es bastante fácil rozar los bordes del mismo, como comentaré en el apartado de la pantalla.

El Alert Slider es el principal protagonista.

La posición de la botonera es mejorable. El año pasado teníamos el botón de encendido en el lado derecho, con el Alert Slider arriba. Los botones de volumen estaban en el lateral contrario. Este año, la distribución es la clásica: botón de encendido y volumen en el mismo lado (derecho), con el Alert Slider en la parte alta izquierda.

La posición de los botones de volumen es demasiado alta y el Alert Slider muy pequeño

El botón de encendido recae justo en el pulgar, pero los botones de volumen son sencillamente inalcanzables. El Alert Slider también está bastante alto. En terminales de gran tamaño, los deberes en ergonomía recaen en bajar la botonera para que sea más accesible. No es el caso de este OnePlus.

En resumidas cuentas, el diseño es una de las pocas asignaturas que tiene pendiente este OnePlus. Es premium, está bien rematado y, en lo personal, el nuevo color Flowy Emerald junto a ese acabado texturizado me parece impresionante.

Pese a ello, es hora de abrazar un frontal más plano, de bajar la botonera para que sea más cómoda cuando usamos el teléfono con un mano, y darle una vuelta de tuerca a la construcción final para ponerse a la altura de Apple y Samsung.

Pantalla: que se hagan los nits… o no

Es inevitable empezar la parte del panel con el brillo de la pantalla, ¡4.500 nits! Es la cifra más alta de la telefonía móvil, aunque el brillo HBM es de 1.600 nits. Aquí está un paso por debajo de su hermano el OPPO Find X7 Ultra, con un brutal brillo HBM de 2.600 nits. Como ya conté, actualmente hay una guerra por los nits en la que no todos los fabricantes terminan de ser transparentes.

Los 4.500 nits tan solo hacen referencia a alrededor de un 1% del panel brillando en contenidos HDR

Los 4.500 nits hacen referencia tan solo al pico máximo de brillo que puede alcanzar una proporción mínima del panel en reproducción de contenidos HDR, siempre y cuando el resto del panel no esté completamente iluminado. Para que tengas un ejemplo sencillo, esos 4.500 nits podrían alcanzarse (teóricamente) en una película en la que aparece el sol iluminando una escena. Dentro de ese sol, una pequeña porción de la pantalla podría llegar a brillar a 4.500 nits. ¿Cómo de pequeña? No tenemos el dato, pero son cifras que suelen rondar entre el 1 y el 5% del total de píxeles de pantalla encendida.

¿Cómo se ve el panel del OnePlus 12 en el uso real? De sobresaliente. A nivel de percepción visual real, el panel no brilla mucho más que el de un iPhone 15 Pro o un Galaxy S24 Ultra, pero sí que tiene un comportamiento envidiable con el brillo automático. Este teléfono no tiene miedo de aumentar el brillo cuando el sol incide de forma fuerte sobre el panel, ya que la enorme batería que lo alimenta es capaz de aguantar el trote.

Apuntar que este panel es compatible tanto con HDR10+ como con Dolby Vision, por lo que cuenta con todas las tecnologías necesarias para disfrutar de los mejores contenidos multimedia. El PWM Dimming es muy alto, hasta de 2160 Hz cuando la pantalla baja de 70 nits. Esto ayuda a rebajar la fatiga visual cuando estamos en entornos oscuros con el panel casi al mínimo de brillo.

Una de las ventajas de contar con un panel tan compatible en formatos es que, cuando reproducimos contenido HDR en apps como YouTube, tan solo se aumenta el brillo máximo del panel en la zona del vídeo. Si no tenemos la reproducción en pantalla completa, el resto de la interfaz mantiene el valor que asigne el brillo automático.

Dentro de los ajustes de la pantalla, tenemos opciones como «pantalla de tono natural», que permiten adaptar el panel a las condiciones de luz ambiental con el fin de obtener colores uniformes en cualquier entorno. Tenemos también tres modos de pantalla, a saber:

  • Natural: el recomendado y por defecto en OnePlus. Utiliza «colores suaves y tenues».
  • Pro: utiliza el espacio de color P3-D65
  • Vívido: colores más saturados.

El cualquiera de estos tres modos podemos cambiar al gusto la temperatura de la pantalla. De cara a mejorar más aún el confort visual, tenemos un modo «hora de dormir» que ajusta la temperatura a tonos más cálidos cuando anochece, así como un modo «confort visual» automático o personalizado que cambia la cambia en base a las condiciones ambientales.

Por último, destacar que el teléfono no viene de fábrica en su configuración máxima de pantalla. Llega con una resolución 2.376 x 1080 (Full HD+) con el fin de ahorrar energía. En nuestras pruebas hemos usado este teléfono como debe usarse un flagship. en modo 3168 x 1440, 2K. En este modo, la pantalla tiene una densidad de píxeles de 510ppi, por lo que la nitidez no es problema alguno.

Más allá de números, el panel del OnePlus 12 es sobresaliente. Tiene la resolución que se le pide a un buque insignia, se ve espectacular bajo el sol, tiene compatibilidad con los más altos estándares de reproducción de vídeo y la calibración de color es correcta.

La única pega que le puedo poner es que es un panel bastante curvo, generando unos sombreados bastante desagradables

Sonido

El sonido es otro de los puntos en los que he notado bastante mejora respecto al modelo del año pasado. No es el mejor que he probado, pero la calidad global es excelente. De fábrica, viene activa la configuración Dolby Atmos con perfil inteligente, por lo que el teléfono se adapta al entorno de cara a la experiencia de audio.

No tenemos ningún tipo de personalización propia para la ecualización, la configuración se restringe a los modos de sonido de Dolby Atmos: inteligente (adaptativo), película, gaming y música.

Quizás echo en falta un extra de personalización a la hora de configurar la salida de audio, pero por fin estamos ante un teléfono con un sonido digno de un gama alta que ronda los mil euros de precio base. Por último, destacar que en el apartado de sonido podemos configurar la respuesta háptica del teléfono. Es una de las mejores que he probado nunca, con un motor de vibración contundente y muy personalizable en intensidad.

Rendimiento: no puedo dejar de aplaudir

El rendimiento del OnePlus 12 es sencillamente espectacular, a todas luces. Nuestra unidad es la que equipa 16 GB de RAM y 512 GB de memoria interna, una combinación salvaje que nos garantizará un rendimiento digno durante los cuatro años de soporte que proporciona OnePlus.

Si bien la ROM, como ahora veremos, no tiene nada que ver con la ligera OxygenOS de la era pre-OPPO, la agilidad con la que se mueve este teléfono es pasmosa. Tiene ese toque eléctrico, ese intangible que lo hace especialmente fluido y rápido. A esto se le suma una pequeña joya de software que más adelante desvelaré y que hace que el rendimiento en juegos sea mejor que cualquier teléfono que haya probado.

El OnePlus 12 es impecable en rendimiento. No se calienta en exceso y es capaz de mover juegos a más FPS que sus rivales directos

Apuntar también que la cámara de vapor cumple con su función. Este teléfono apenas se calienta, por más que usemos los juegos más pesados del momento. Hablando de juegos, aunque esta sea una función de software, es obligatorio nombrarla en el apartado del rendimiento. El OnePlus 12 es capaz de correr los juegos a más FPS de los que el propio juego permite.

¿Cómo lo consigue? Interpolando frames de forma artificial, algo que habíamos visto en algunos fabricantes a la hora de reproducir vídeo, pero no en juegos de alta carga gráfica en tiempo real. Una de las joyas no tan populares que utilizo para probar teléfonos es ‘CarX Street’, una barbaridad de juego de carreras de mundo abierto con un modo limitado a 30 FPS y otro modo «ilimitado».

29 FPS en contenido estático. Modo ilimitado del propio juego.

42 FPS en modo estático. Modo de refuerzo de fotogramas adaptativo de OnePlus activo.

En modo ilimitado, en rivales como el S24 Ultra sufrí varios tirones y este OnePlus 12 no era capaz de pasar de 35 FPS. Al activar la interpolación de frames, he podido jugar de forma estable sobre los 45 FPS, con picos de más de 50. Todo el que quiera probar este juego en la máxima configuración gráfica entenderá el reto que supone.

Esto impacta directamente sobre el trabajo que tendrá que hacer la GPU, con el consecuente consumo energético extra. No obstante, no se calienta apenas aunque activemos esta opción y… qué narices. Para esto está la gama alta.

OnePlus 12IPHONE 15 PRO MAXASUS ROG PHONE 8REALME GT 5 PROSAMSUNG GALAXY S23+
PROCESADORQualcomm Snapdragon 8 Gen 3Apple A17 ProQualcomm Snapdragon 8 Gen 3Qualcomm Snapdragon 8 Gen 3Snapdragon 8 Gen 2 (for Galaxy)
RAM12 GB8 GB16 GB16 GB8 GB
GEEKBENCH 5/6 (SINGLE/MULTI)2.248 / 6.987 (6)2.637 / 7.103 (6)2.223 / 6.893 (6)2.229 / 6.769 (6)2.019 / 5.308 (6)
3D MARK Wild Life Unlimited20.28113.66719.13119.33714.250
3D MARK Wild Life Stress Unlimited20.321 / 13.75415.375 / 9.17019.124 / 19.07719.337 / 15.47214.018 / 13.968
PCMARK WORK20.46721.77721.77715.823

A nivel de benchmarks, la experiencia ha sido un poco extraña. He tenido que activar el modo de alto rendimiento para obtener puntuaciones «normales», ya que en modo normal las puntuaciones eran inusualmente bajas (menos de 1.000 puntos en single-core en Geekbench, cuando monta un SoC que puede superar los 2.000 puntos).

Es algo completamente irrelevante, ya que la experiencia en juegos y uso diario es excelente, pero explica que a pesar de ser uno de los móviles más rápidos del mercado, las puntuaciones no sean tan altas.

Biometría

En el apartado biométrico, la configuración es idéntica a la que vimos el año pasado. Este teléfono cuenta con un lector de huellas inusualmente alto al que hay que acostumbrarse si venimos de otro teléfono, pero con un funcionamiento prácticamente impecable. Con el dedo algo húmedo (sudor, después de entrenar) he tenido algún ligero problema, pero nada preocupante.

El sistema de reconocimiento facial 2D, mediante cámara RGB, no funciona en situaciones de baja luz. Es un buen complemento durante el día al lector de huellas, pero siendo un método de desbloqueo tan poco seguro he optado por desactivarlo una vez probado su funcionamiento.

Software: asumámoslo, la antigua OnePlus no va a regresar

La evolución en fotografía y pantalla en los móviles de OnePlus bebe directamente de OPPO. Al igual que el software. Para bien y para mal, la compañía es más OPPO que nunca, y eso se traduce en que OxygenOS vuelve a ser, un año más, una adaptación de ColorOS. OnePlus ya no es esa compañía que se diferencia en software, un punto que seguiremos echando de menos y recordando al analizar su gama más alta.

OxygenOS 14 se basa en Android 14 y llega con una interfaz algo más pulida respecto a lo que vimos el año pasado. La estética sigue siendo algo asiática y alejada de la propuesta Google con Android Stock, aunque no está mal resuelta. En el caso de OnePlus, apenas hay carga de bloatware y el sistema se mueve con agilidad, sin bugs ni problemas de ningún tipo.

Esta es una ROM personalizable y con poco bloatware, aunque no esperes encontrar algo similar a las propuestas de Google con sus Pixel

A nivel de personalización es una ROM bastante completa, pudiendo escoger los colores de acento, animaciones del lector de huellas, estética de los iconos del panel de estado, e incluso hay compatibilidad con paquetes de iconos de terceros. Con un poco de paciencia, es fácil dejar el sistema (casi) a nuestro gusto.

Por último, indicar que OnePlus ofrece cuatro años de actualizaciones de sistema operativo y cinco de seguridad. Según la compañía, no se puede garantizar que con los siete años que ofrecen sus rivales el teléfono vaya a funcionar bien dentro de tanto tiempo.

Autonomía: el nuevo referente en gama alta

No hay manera de acabar esta batería en un día. Es el mejor resumen que puedo hacer de los 5.400mAh en este OnePlus 12. A pesar de montar la misma batería que el Realme GT5 Pro, los resultados están muy por encima, demostrando lo importante que es la optimización. Para que te hagas una idea, en la primera jornada de uso intensivo de la cámara salí de casa al 100% a las 16:30 de la tarde. Estuve haciendo decenas de fotografías y usando algo de redes sociales en redes 5G. Cuando llegué a casa a las 21:00h… la batería estaba al 87%.

Algo similar sucede con los consumos en reposo. No gasta más allá de un 1% por noche, cifra espectacular en la que parece que los fabricantes están olvidando la importancia de los consumos en reposo y cómo afecta ir perdiendo porcentaje de batería al tiempo de pantalla final.

Hablamos de un dispositivo que puede superar las 11 horas de pantalla, algo que llevaba años sin ver (salvando épocas de algún que otro Redmi antiguo con 5.000mAh y pantallas HD de mínimo consumo). Si la cosa acabase aquí, ya sería sobresaliente, pero es que este teléfono se carga en apenas media hora. OnePlus nos habla de 26 minutos, cifra solo aplicable cuando el teléfono está apagado cargando a 100W. Encendido y con las conexiones activas, hemos tardado 35 minutos en cargarlo del 1 al 100%, una cifra que sigue siendo bárbara.

La carga rápida inalámbrica es de 50W, otra cifra sencillamente espectacular. Se convierte así, con diferencia, en el teléfono con mejor batería que ha pasado por nuestro banco de pruebas, desbancando a los mejores teléfonos del momento en uso intensivo.

Cámara: la nueva era de OnePlus

«La cámara de este OnePlus Open no es ya solo una de las mejores (si no la mejor) que hayamos probado en un plegable, es también una de las mejores cámaras del mercado». Arrancaba así el apartado fotográfico del OnePlus Open. Teniendo en cuenta que el OnePlus 12 repite configuración de cámara, los resultados no podían ser muy distintos.

Este teléfono equipa el nuevo Sony LYT-808, un remplazo de serie respecto a los clásicos IMX de Sony. La familia estrella en la nueva gama Lytia son los 900, aunque los 808 son los que empiezan a asomar la patita en algunos teléfonos de este segmento.

La configuración de cámara es muy similar, pero no es idéntica. El OnePlus 12 tiene un total de 50 megapíxeles frente a los 48 del OnePlus Open (aunque ambos disparan en 12 megapíxeles tras la agrupación de píxeles). ¿Cómo es posible que, teniendo el mismo sensor, la resolución sea distinta? El Sony LYT-808 tiene una resolución total de 52 megapíxeles, aunque se puede recortar en distintas configuraciones. Este OnePlus 12 opta por el mismo recorte que el Realme GT5 Pro, 50 megapíxeles. Esta es la configuración final de cámaras:

  • Cámara principal de 50 megapíxeles: apertura f/1.6, tamaño de sensor 1/1.43″, tamaño del píxel 1.12µm, PDAF, OIS.
  • Cámara teleobjetivo de 64 megapíxeles: apertura f/2.6, tamaño de sensor 1/2.0″, tamaño del píxel 0.7µm, PDAF, OIS, zoom óptico 3x, 6x lossless.
  • Cámara ultra gran angular de 48 megapíxeles: tamaño de sensor 1/2.0″, tamaño del píxel, 0.8µm, equivalente a 14mm.

Antes de analizar los resultados de este teléfono, toca repasar la aplicación de cámara. No ha habido demasiados cambios respecto a lo que vimos el año pasado, salvando algún que otro cambio menor en la distribución de los ajustes.

Seguimos con un carrusel que guarda los modos principales, quedando reservada la parte superior a ajustes como el flash, Google Lens (agrademos mucho que ahora esté dicho ajuste rápido de forma tan cómoda) y un menú desplegable para activar/desactivar opciones como el HDR, formato de fotografía y temporizador.

Como toque distintivo, tenemos la marca de agua de Hasselblad, que nos permite ver de forma rápida los parámetros de las fotografías. En este caso particular la he dejado activa de forma intencionada, para que los más apasionados de la fotografía puedan comprobar los parámetros con los que se han tomado las fotos.

Fotografías con la cámara principal

Buena velocidad de enfoque automático, incluso en condiciones de luminosidad agresiva. Bokeh natural excelente.

La cámara del OnePlus 12 ha mejorado bastante respecto a la del OnePlus 11. El año pasado encontré un teléfono algo pobre en nitidez, con una interpretación del color poco natural y un look general que no me convencía en absoluto. Con el OnePlus 12 me han dado ganas de disparar a todo.

Buen nivel de detalle. Sombras algo apagadas.

El color, al igual que el año pasado, sigue estando algo más saturado de la cuenta, pero se aleja de esos cielos cian y esos verdes inventados que vimos el año pasado. Siendo Hasselblad quien calibra la cámara esperábamos una precisión del color más precisa, pero la sobresaturación se arrastra desde el OnePlus 9.

Pese a ello, el nivel de detalle por fin está a la altura de lo que espero en un móvil de gama alta. No es la cámara más nítida del mercado, pero sí afirmo sin miedo alguno que está a la altura de algunos rivales que cuestan casi 500 euros más. Esto es algo que jamás había experimentado en un OnePlus: ya no hay ese gap entre los gama alta de mayor ticket y este buque insignia.

Me ha gustado el trabajo con el balance de blancos. En escenas muy cálidas, como este atardecer, satura algo más de la cuenta los naranjas, pero eso le otorga un look cálido muy agradable, algo que me recuerda a la peculiar cámara del Huawei Mate 50 Pro. Es un punto positivo en mi opinión, ya que otros rivales tienden a balancear la imagen hacia un tono neutro, acabando con el tono de la imagen.

Si has sido algo observador, podrás apreciar que todas las fotografías diurnas se han tomado con ISO 50 (el más bajo posible) y una velocidad de obturación bastante alta. Contar con una lente f/1.6 es una importante ventaja a la hora de obtener luminosidad. La única pega viene con el trabajo del HDR, que suele dejar las sombras más apagadas de lo que me gustaría.

En condiciones de baja luminosidad e interiores con luz artificial, de nuevo, hay una muy buena gestión. El trabajo con las altas luces es sencillamente impecable en fotografías con predominancia con luz artificial, y algo mejorable en fotografía puramente nocturna (puedes apreciar algún cartel quemado). Pese a disparar en ISO alto (2.000 por la noche), el control del ruido es muy bueno, sin llegar a lavar la imagen.

Zoom y ultra gran angular

1x | 3x. Fotografía tomada a las 17:30h de la tarde.

La principal novedad de este año viene con el teleobjetivo: tres aumentos ópticos que se pueden duplicar. Se suma así un modo 6x con calidad lossless, por lo que actuaría como un segundo teleobjetivo de seis aumentos. Con el teleobjetivo tengo sensaciones encontradas, ya que me ha sucedido algo que no experimenté en el OnePlus Open: tiene serios problemas cuando el HDR tiene que trabajar un mínimo.

El ejemplo arriba expuesto es la mejor definición de lo que sucede. Dos fotografías, tomadas a la misma hora, y valores idénticos de disparo (salvando la apertura de la lente). La fotografía del teleobjetivo es prácticamente inutilizable, mientras que la tomada en 1x hace un gran trabajo en rango dinámico. Es algo que sucede de forma bastante consistente cuando hay un contraluz.

3x.

En el resto de situaciones, el nivel del teleobjetivo es bastante bueno. Incluso en seis aumentos, se puede apreciar el poco sharpening y lo bien que se leen los letreros con iluminación artificial. Un teleobjetivo para disfrutar, siempre y cuando no haya luz agresiva.

0,6x

El ultra gran angular, a pesar de ser el sensor más débil, se comporta bien. La distorsión es quizás demasiado marcada, aunque el trabajo en HDR y exposición es más que correcto. No es un sensor pensado para brillar, pero aporta la versatilidad necesaria que se exige en la gama más alta.

Modo retrato

1x | 3x.

El modo retrato sigue con ese bokeh algo artificial y un trabajo con el recorte que queda lejos del mapa de segmentación fino y minucioso que hacen algunos rivales. Pese a ello, contento con el trabajo que hace el teléfono sobre todo en 70mm, ya que esta lente aporta una compresión bastante especial a la imagen.

Selfie

El selfie queda bien resuelto, aunque el tono de piel no es del todo preciso. Es un sensor bastante sensible a los cambios de luminosidad: si no es la hora más óptica para disparar, la imagen no quedará completamente limpia. Un resultado algo alejado de los mejores exponentes del mercado, pero más que digno.

Vídeo

La grabación de vídeo sigue siendo mejorable. Tenemos formato 8K, pero el punto dulce sigue estando en 4K. La cantidad de detalle es correcta, notándose un procesado algo de artificial y algo de ruido cuando las condiciones lumínicas no son perfectas. En este punto OnePlus sigue alejada de los mejores exponentes, aunque es un trabajo aceptable.

OnePlus 12, la opinión de elyex

Qué teléfono más equilibrado. Ha sido mi pensamiento recurrente durante este análisis. El OnePlus 12 por fin compite de tú a tú en las mejores pantallas, cuenta con una autonomía sencillamente impresionante, y a nivel fotográfico ya puede afrontar sin miedo el reto de enfrentarse a algunos de los mejores exponentes del mercado.

Hay mucho trabajo por delante para aspirar a ser top 3 en fotografía, pero por fin deja de haber esa distancia que, en algunas generaciones, hacía que estuviese más cerca de un gama media que de un flagship.

El resto de aspectos son sobresalientes, a excepción de un software al que empezamos a pedirle más. Más diferenciación con ColorOS, más cercanía a las líneas marcadas por Google y a la estética Europea, así como un pequeño impulso en características que hagan de esta ROM algo diferencial. Salvando estos pequeños puntos, el OnePlus tiene muchos argumentos para ser el mejor móvil de gama alta por debajo de los 1.000 euros.

A favor

  • La duración de la batería no tiene nombre. Es increíble.
  • El rendimiento es espectacular.
  • La cámara ha dado un importante salto

En contra

  • El software es correcto, pero no hay mejoras importantes respecto al año pasado.
  • La cámara principal se comporta muy bien, pero el teleobjetivo a veces flaquea.
  • El precio ha aumentado bastante respecto a la generación anterior.