México insiste en nombre de Celac democratizar producción de vacunas
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México, 6 may (Prensa Latina) México, como presidente pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), insistió en la democratización de la distribución de las vacunas contra Covid-19, indica hoy La Jornada.
El diario señala que el país coordinador de la Celac reconoció la postura del Gobierno estadounidense de liberar patentes, la cual va en concordancia con el llamado internacional de la comunidad a las farmacéuticas para democratizar la producción y acceso a dichas vacunas, y considerarlas bienes públicos globales.
La declaración de México responde al anuncio ayer de Washington de apoyar la suspensión temporal de las protecciones a las patentes de las vacunas contra Covid-19 a fin de acelerar la producción y distribución de inmunizantes en el mundo.
En un comunicado, la representante comercial de Washington, Katherine Tai, expresó que la administración encabezada por Joe Biden cree con fuerza en la protección de la propiedad intelectual, pero ante una crisis sanitaria mundial las circunstancias extraordinarias de la pandemia exigen medidas extraordinarias.
La propuesta de garantizar acceso universal a las recetas y materiales para producir dichos antígenos es respaldada por más de un centenar de países, y es objeto también de un movimiento global, que el 23 de abril hizo llegar a Biden una petición con dos millones de firmas para que apoyara la moción dentro de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Sin embargo, observa La Jornada, la propuesta estadounidense deberá salvar la negativa de naciones como Francia, que apuesta por paliar la aguda desigualdad en el acceso a las vacunas mediante donaciones a los países pobres, lo cual es rechazado por los interesados.
París está haciendo una cerrada oposición en respaldo a empresas farmacéuticas, las cuales argumentan que la suspensión de las patentes sería un disuasivo para emprender costosas investigaciones en el futuro.
El diario admite que las circunstancias exigen medidas extraordinarias, y la liberación de las patentes debe plantearse en calidad de un deber humanitario ante desafíos por el descontrolado repunte de la propagación del coronavirus SARS-CoV-2 en India o el surgimiento de nuevas cepas que amenazar incluso a los vacunados.
Este imperativo ético puede extenderse a una serie de medicamentos cruciales para la salud pública global, entre los cuales cabe incluir a los tratamientos oncológicos y antirretrovirales.
En este sentido, añade el diario, la pandemia obligó a poner en primer plano de la agenda pública global la necesidad de buscar mecanismos de cooperación y financiación internacionales que concilien la investigación y desarrollo de nuevos fármacos con un sistema de patentes que no excluya a nadie de su acceso.
mgt/lma