Países pobres de Latinoamérica tienen serios problemas para acceder a vacunas anti-COVID-19
MONTEVIDEO (Sputnik) — Pese a que mucho se habla en estos días sobre los planes de vacunación contra el COVID-19 en Argentina, Chile, Brasil y México, se ignora que los otros países de la región más desigual del mundo, América Latina, no pueden contar la misma historia.
La «deseada solución» es solo para los que tienen suficiente dinero para comprarla. Centroamérica y los países más pobres y pequeños del sur tienen serias dificultades para acceder a la vacuna al mismo tiempo que el resto del mundo.
Mientras las naciones ricas comenzarán a reactivar sus economías rápidamente luego de la vacunación, las subdesarrolladas podrían esperar, en momentos en que los contagios no cesan y crece la posibilidad de una nueva cuarentena total, hasta el segundo semestre del 2021, lo que aumenta aún más la brecha entre los estados pobres y los de mayor poder adquisitivo.
«Hay varios países que están en una situación crítica, Centroamérica no tiene un plan real de vacunación, lo mismo pasa con los países más pequeños y pobres de América del Sur, como son Ecuador, Perú y Paraguay», dijo a Sputnik el médico César Paz y Miño, director del Centro de Investigación Genómica de la autónoma Universidad UTE de Ecuador.
Los países más pequeños están con una problemática real por su propia situación económica en medio de la crisis que está atravesando toda la región.
Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la economía de esta región tendrá una caída de 7,7% en 2020, la mayor en 120 años.
Frente a esta situación, existe cierta «responsabilidad» de los fabricantes de las vacunas, consideró Paz y Miño.
«Al inicio se dijo que los precios iban a ser muy accesibles, que costarían entre tres y cinco dólares. Pero cuando apareció la vacuna, los precios se ubicaron entre 20 y 40 dólares las dos dosis. Con lo cual, los países pobres se ven enfrentados a tener que gastar precios exorbitantes en relación a su población y su economía, si es que se quiere cubrir el 60%», agregó.
La otra cara
Mientras la mayoría de los países están en un momento crítico, Argentina, Brasil, Chile y México, al tener grandes economías, han podido solventar las compras de las vacunas, señaló el especialista.
«Vuelve a polarizarse Latinoamérica entre las economías más fuertes y los más débiles. Esto muestra que las asociaciones entre países eran muy importantes para tener tratos con los fabricantes mucho más equilibrados, pero la colaboración hizo aguas», señaló.
Paz y Miño explicó que, en el caso de Venezuela, hay un plan de inmunización que empezará el segundo trimestre del 2021, mientras que Cuba está trabajando con sus propias vacunas y tiene una fuerte alianza con Rusia.
Este 24 de diciembre, el Gobierno de Argentina comenzará a distribuir la vacuna contra el COVID-19 Sputnik V, que arribó el mismo día en un vuelo de Aerolíneas Argentinas procedente de Moscú, y espera que entre el 27 y el 28 de diciembre las 24 jurisdicciones del país cuenten con sus respectivas dosis.
Asimismo, las autoridades brasileñas comenzarían la vacunación contra el COVID-19 a fines de enero para las personas de riesgo y masivamente en febrero.
Por su parte, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, recibió este 24 de diciembre el primer cargamento de 10.000 dosis de la vacuna del laboratorio estadounidense Pfizer, y durante toda la jornada se estará inmunizando al personal de la salud que trabaje en hospitales públicos en Santiago.
El Gobierno de México comenzó también este 24 de diciembre la campaña nacional de vacunación contra COVID-19, luego recibir el producto biológico de Pfizer, desarrollado por la alemana BioNtech.
En tanto, Paraguay, Uruguay, Ecuador y Perú intentan hacer negociaciones individuales con los fabricantes, sin haber desembocado todavía en ningún trato, luego de que el mecanismo Covax Facility señaló que las vacunas podrían llegar a partir del primer trimestre del 2021.
FUENTE: SPUTNIK