Mónica Quinteros es seleccionada de Ecuador desde los 13 años, a esa edad participó en su primer Sudamericano sub-19 y lo hizo con goles, porque el ataque es su posición innata.

Sin embargo, estuvo a punto de perder la clasificación de Ecuador al primer Mundial de la historia del balompié local, porque quería retirarse.

“Pensé en retirarme, porque veía que ya había tenido un tope y en el país no hay mayor desarrollo para el fútbol femenino”, contó el atacante de 26 años sobre su decisión.

Sin embargo, la dirigencia del equipo 7 de Febrero (su actual equipo) la enroló y “me convenció para que continúe”. Así Quintero pudo jugar este año en el campeonato nacional de fútbol femenino, y aunque no quedó campeona le sirvió para que la DT de Ecuador, Vanessa Aráuz, la cite para el proceso de preparación para la Copa América del 2014, clasificatorio al Mundial de Canadá 2015.

“La entrenadora (Aráuz) me llamó y me pidió que juegue para la selección, y me dije bueno, ahora tal vez pueda cumplir ese sueño: clasificar al primer Mundial y gracias a Dios se dio”, expresó Quinteros.

Lo curioso fue que Quinteros no pudo jugar la Copa América. “No tuve permiso de mi trabajo porque era necesario concentrarme en Quito”, reveló la ariete nacida en Machala, el 5 de julio del 1998, pero radicada en Guayaquil desde pequeña.

Pero “me llamaron para estos dos partidos del repechaje, hablé con la dirección del colegio (trabaja en la Unidad Eugenio Espejo de Flor de Bastión) y conseguí que me dieran permiso”, contó.

Así, Quinteros pudo viajar a Trinidad y Tobago y marcar el tanto para vencer 0-1, el pasado miércoles, a Trinidad y Tobago, en la serie de repechaje.

Ahora nuevamente le tocará pedir autorización para ir a Canadá, porque no quiere perderse el Mundial y “representar con orgullo a mi país”.

Mientras tanto, Quinteros cumple su labor como docente de educación física, “que es lo que me permite mantenerme, porque lastimosamente al fútbol femenino aún le falta mucho para ser profesional, no somos como los varones, que sí viven de esto”, concluye.

Con la mayoría de las chicas nos conocemos, porque este es un proceso de años, en los que hemos jugado varios torneos.

Mónica Quinteros

Atacante