Prestar, perder y pasar sin celular: las tres P que posiblemente te causen pánico
¿Me prestas tu teléfono? Es un ‘ratito’ no más. Alguna vez en la vida te habrá pasado esto. Obviamente, no estás obligado a hacerlo, pero según el nivel de amistad que tengas con esa persona, no es nada del otro mundo dejar tu celular para hacer una llamada de emergencia o consultar algo en internet.