¿Sabías que las redes sociales pueden convertirse en algo bastante perjudicial para tu salud e imagen personal y/o profesional si no logras utilizarlas de forma comedida e inteligente? Te contamos cuáles son sus 6 mayores peligros.

Por un lado, las redes sociales han servido para que personas anónimas puedan hacerse escuchar y esto les ha ayudado a desempeñar un papel más activo con las instituciones gubernamentales y empresariales, sin embargo, por otro lado, han abierto la puerta a una serie de peligros que muy pocos llegaron a prever hace una década atrás.

Dichos peligros de las redes sociales han sido reconocidos por miembros importantes pertenecientes a los propios gigantes tecnológicos que las crearon y que las mantienen en funcionamiento. Ellos advierten que estas redes, dependiendo de cómo se usen, pueden hacer mucho daño en nuestro bienestar psicológico, en nuestra seguridad, e incluso en la supervivencia de una democracia.

Es por ello, que depende de cada uno de nosotros conocer esos peligros, para poder identificarlos y de esta manera, minimizar los daños que puedan ocasionar en nuestra vida cotidiana.

Peligros de las Redes Sociales

Cuando navegamos por las redes sociales, podemos encontrarnos con infinidad de situaciones negativas, de las cuales destacan la propagación de noticias falsas o lo que se conoce como (fake news), la invasión de nuestra privacidad y la cada vez más frágil seguridad online. Pero hay mucho más:

1.- Su uso no regulado puede convertirse en una adicción.

A costos bastante bajos, es muy fácil estar conectado a internet 24 horas al día. Se podría pensar que esto es muy positivo, pero no lo es tanto, cuando nos encontramos con que, en muchas ocasiones, la navegación no está regulada, lo cual puede llevarnos a desarrollar un vicio y como todo vicio, el panorama del desenlace no puede pintar bien.

Es así como algunos estudios demuestran que el uso excesivo de las redes sociales puede generar trastornos físicos y psicológicos en los usuarios que no logran poner límites a su utilización.

Algunos ejemplos de estos trastornos son: déficit de atención, insomnio (trastornos del sueño), problemas de visión y de la columna vertebral, creación de un falso sentido de realización y un falso sentido de participación en la vida de los demás, creación de lazos superficiales, alejamiento de las personas del mundo real y dificultad para lidiar con la frustración.

Consejo: No está de más que comiences desde hoy a reducir el tiempo que le dedicas a las redes sociales y busques alternativas de entretenimiento más saludables.

2.- Corres el riesgo de desarrollar baja autoestima y ansiedad.

Aunque los más jóvenes son los más propensos a sufrir de estos efectos del uso excesivo de las redes sociales, los adultos no quedan exentos.

La ansiedad se potencia cuando queremos obtener muchos likes o seguidores por nuestras publicaciones y la baja autoestima es promovida por la comparación de nuestra vida real, con las vidas virtuales con las que contactamos por internet.

Por su parte, muchos usuarios a los que seguimos publican en las redes sociales mensajes o fotografías que, en teoría, son pruebas de una vida plena, llena de momentos fantásticos, lo que nos crea la ilusión de vidas divertidas y felices, con las que nos comparamos y probablemente pensamos que no podemos competir con ellas en la vida real.

Asimismo, puede pasar que ingresar a cuentas en dónde se publican constantemente situaciones tristes, negativas o alarmistas, puede hacer que aumente en nosotros el riesgo de desarrollar depresión y ansiedad si las visitamos constantemente.

Consejo: Presta atención a cómo usas las redes sociales. No todo es lo que parece.

3.- La brecha cultural también puede ocurrir.

En las redes sociales pueden crearse mundos virtuales paralelos, en los que se vuelve difícil conectar e interactuar con todos ellos. Así que nos vamos distanciando cada vez más de aquellos a los que no les prestamos interés.

Dicha distancia se alimenta de algoritmos que seleccionan las publicaciones y noticias que más vemos, con base en los “me gusta” que hacemos en la red, lo que crea un efecto burbuja de contenido que poco se diversifica o varía.

Este efecto evita que busquemos para saber más y para conocer más áreas que estén fuera de nuestra intervención (amigos). Paradójicamente, es una herramienta que fue creada para conectar la mayor cantidad de personas en línea, pero que al final, termina encerrándolas en un circuito limitado de amigos, contenidos o temas de conversación.

Consejo: Intenta acortar esa brecha, tanto en el mundo virtual, como en el real. Ve e investiga de todo un poco.

4.- Todo lo que se sube a internet, queda eternamente en internet.

Cualquier cosa que subamos a internet, quedará eternamente allí y más adelante, podrá ser vista por familiares, amigos o empleadores. Ese material se usa para formar un perfil público de nosotros, al que pueden acceder personas físicas (con buenas o malas intenciones), empresas, o cualquier otro tipo de organización.

Por lo tanto, la seguridad y selección de contenido deben volverse muy importantes para quienes usamos las redes sociales y deben convertirse en el foco de cualquier uso de la comunicación en línea.

Consejo: El cuidado de lo que publicamos en internet debe ser máximo y la protección de nuestros datos debe ser nuestra prioridad, porque si alguien con malas intenciones tiene acceso a esa información personal, podrá afectar nuestra vida, tanto personal o profesional, de manera negativa.

5.- La exposición es peligrosa, tanto para tu intimidad como para tu éxito profesional, así como para tu seguridad física.

En tal sentido, no debemos compartir constantemente información sobre nuestra vida real, como lo es: dirección de habitación, amigos, o el lugar en el que nos encontramos en un momento determinado, ya que esa información puede usarse para perjudicarnos.

Consejo: Guarda todo lo que es personal para tus amigos y familiares reales.

6.- Limita la publicación de fotos de tus hijos.

Más que limitar, podríamos decir, que no se publiquen del todo, pues son seres muy vulnerables y nuestras acciones en el mundo virtual, relacionadas con ellos, pueden tener graves consecuencias en el mundo real.

Consejo: Protege a tus hijos enseñándoles a mantener la seguridad cuando de redes sociales se trata, de manera que puedan disfrutar lo mejor de ellas, sin tener que conocer su lado más oscuro y peligroso.

¿Cómo proteger tu privacidad en internet?

Mantener la privacidad en internet puede convertirse en una tarea difícil en estos días, pero te tenemos unos consejos que te podrán ayudar a mantenerte en el anonimato.

1.- No reveles más de lo necesario.

2.- Cuidado con los correos electrónicos para que no seas víctima del phishing.

3.- Utiliza modos de navegación anónimos.

4.- Usa tails para proteger tu privacidad online y evitar la censura.

5.- Actualiza tu antivirus y todo el software.

6.- Ten siempre el firewall encendido.

No dejes que las redes sociales inunden tu día a día y no permitas que tu información quede en manos de gente que pueda usarla para hacerte daño. Dale prioridad a tu seguridad.