Riesgos de automedicación enfrentan indígenas en Ecuador
Las nacionalidades indígenas de Ecuador se sienten abandonadas por el Estado y desconfían de la medicina tradicional. Por eso han acudido a medicamentos ancestrales para combatir la covid. Han hecho vaporizaciones e infusiones de plantas medicinales.
Ante la falta de atención y la desinformación, también existe la automedicación. Paracetamol, diclofenaco y amoxicilina se usan para combatir la enfermedad producida por el coronavirus, pero esto podría ser contraproducente, advierte una investigación de Mongabay Latam.
La covid ha llegado a nueve de las once nacionalidades indígenas que habitan en la Amazonía ecuatoriana, hasta julio pasado. La Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía (Confeniae) dice que tenían 1776 casos confirmados, 33 muertos y 15 decesos por sospecha de coronavirus.
«Las nacionalidades más golpeadas por la pandemia son los kichwas, que viven en el norte de la Amazonía: 856 casos. Les siguen, los shuar, que habitan principalmente en el centro-sur amazónico, con 443 y los waorani, que suman 307″, se detalló en la publicación.
Incluso, lideresas y líderes de las comunidades alertaron que personal del Ministerio de Salud hizo pruebas rápidas en marzo pasado, cuando aparecieron los primeros casos. Pero les habrían dicho que era amigdalitis y que no había riesgo. Continuaron con la vida comunitaria y luego se confirmó que sí eran casos de covid.
«Los waorani no son los únicos a los que el Estado les ha hecho pruebas y no les han dado resultados. Líderes kichwa y siekopai dicen que el Ministerio de Salud Pública les hace pruebas pero no les dice si dieron positivo o negativo. ‘Para las nacionalidades, no hay Estado’, dice Antonio Vargas, dirigente del consejo de coordinación de la nacionalidad kichwa. Los indígenas han tenido que buscar soluciones solos», se menciona en la publicación.
Ante el uso de medicina ancestral, el investigador Rodrigo Henríquez dijo a Mongabay que no hay evidencia de que ayude contra el coronavirus pero tampoco que haga daño. El problema, alertó el experto, es la automedicación con productos como dióxido de cloro, que no es apto para el consumo humano.
Otro problema de automedicarse es que los síntomas correspondan, por ejemplo, al dengue. Al tomar diclofenaco podría derivar en dengue hemorrágico.
«Algunas de las plantas que más están usando los waorani para recuperarse son bejuco, ajo del monte, uña de gato, jengibre y raíz de ortiga. Antonio Vargas, líder kichwa, dice que ellos están usando hojas, raíces de plantas y bastantes cortezas de árboles medicinales para hacer un hervido concentrado que toman los que están contagiados. Justino Piaguage, líder de la nacionalidad siekopai que se encuentra en la provincia de Sucumbíos, dice que están usando varias plantas para hacer infusiones, que luego son repartidas en todas las comunidades para tratar a los enfermos. También beben té de guayusa, manzanilla y hierba luisa, se dan baños con hierbas medicinales y realizan vaporizaciones», señala Mongabay.
Enrique Terán, PhD en farmacología, dijo que el 80 % de casos de covid son leves y se curan solos con el paso de los días porque es una enfermedad viral. Por eso no se puede atribuir totalmente la cura a la medicina ancestral.
La falta de información o los datos imprecisos se convierten en otro problema. El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) ofrece datos del avance del coronavirus pero no se conoce detalladamente la situación en la Amazonía. Por eso, la Confeniae desarrolló una herramienta para monitorear las comunidades, en colaboración con Amazon Watch, Fundación Aldea y la Universidad San Francisco de Quito. (I)