Las Fuerzas Armadas (FF.AA.) apoyarán jurídica, profesional y moralmente a la patrulla militar de 11 integrantes que participó en un suceso en Esmeraldas, en el que falleció Kléver Castillo, de 37 años, el pasado sábado, y quedó herido un menor de 13 años.

El general Oswaldo Jarrín, ministro de Defensa, señaló ayer que la patrulla militar estaba cumpliendo órdenes.

“Si es que el vehículo se detenía y pasaba el chequeo, el control, no pasaba absolutamente nada…”, dijo Jarrín.

Contó que no solo se irrespetó a la autoridad militar, sino que también se los embistió. Y que en legítimo uso de la fuerza se abrió fuego y se disparó sobre el vehículo que llevaba cemento y gasolina a Colombia.

Castillo falleció desangrado por dos impactos de proyectil de arma de fuego en el muslo derecho. Los disparos los habría hecho una patrulla militar móvil en Mataje, Esmeraldas. El hecho habría ocurrido en un control de armas y explosivos.

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María Espinoza, esposa del fallecido, pidió que se aclare la circunstancia de la muerte.

La familia tiene una versión diferente de los hechos. Jhonny Nastacuaz, quien iba en el carro, declaró que ellos iban transportando cemento y combustible desde el sector de Labores, lado ecuatoriano, con dirección a Brisa, en la parte colombiana. “Al observar el control militar y con la finalidad de que no se nos quite el cemento y combustible dimos marcha atrás con la intención de darnos a la fuga, los militares abrieron fuego contra el vehículo”, dijo.

La Fiscalía informó que 11 militares del Grupo de Operaciones Tácticas Mataje son procesados por el presunto delito de homicidio.

A todos se les dictó como medidas la prohibición de salida del país y la presentación cada dos días. (I)