La escena era macabra. A Miguel Ramón Gonzáles, de 47 años, sus asesinos lo habrían torturado antes de degollarlo y acuchillarlo al interior de su propio domicilio, ubicado en la ciudadela El Chofer de la ciudad de El Guabo, provincia de El Oro.

El hombre que se dedicaba a labores agrícolas, fue hallado sin vida por su hermano y cuñada, quienes le fueron a dejar la merienda a las 16:30 del jueves 31 de agosto.

Un oficial indicó que la víctima tenía una correa atada a su cuello y heridas de arma blanca.

Aparentemente, el fallecido habría luchado con sus verdugos. En la escena del crimen se podía observar sangre por la sala, paredes y en el dormitorio.

Alexander N., un vecino, dijo que el hermano de Ramón contó que su pariente tenía un corte de gran profundidad en la yugular y uno cerca al corazón. El conocido también describió que en el lugar los oficiales encontraron un cuchillo, una piedra y un martillo.

“Entre las 5:00 y 6:00 de la madruga se oían pedidos de auxilios que lo querían matar”, agregó el joven de 19 años.

La policía de la localidad está tras la pista de los culpables de este hecho atroz. Pero extraoficialmente se conoce que Miguel había estado bebiendo con otros amigos desde la noche del jueves 30 de agosto.