Incertidumbre financiera en Liga de Quito por continuidad de Esteban Paz en la Comisión de Fútbol
La disputa entre el directorio de Liga de Quito, con Guillermo Romero a la cabeza, y la actual Comisión de Fútbol, encargada a la familia Paz, se mantiene. Por una parte están las exigencias de la comisión por mantener autonomía, y por otra las del directorio que quiere que se ajuste la situación del club a su mando.
Un primer acuerdo daba por hecho la continuidad de los Paz al mando de la comisión, que maneja el primer equipo y las divisiones formativas desde 1997; sin embargo, nuevas disposiciones del directorio frenaron la firma del convenio que debía ratificarse este 24 de enero en la asamblea de socios del club.
Reuniones constantes y acusaciones de las partes se han registrado en los últimos meses. «Estoy agotado de este tema, ya no cabe seguir conversando, es imposible manejar esto con el directorio», dijo la anterior semana Rodrigo Paz, presidente vitalicio de los albos.
De su parte, Romero defendió la postura del directorio cuando señaló que el interés del club es que la comisión se ajuste al manejo económico y de tributación del club, algo con lo que los Paz no acordaban al señalar que para manejar el equipo era necesario una independencia económica, y una denominación de «Especial» a esta comisión, un punto en el que el directorio mantuvo preservas.
En este punto, Esteban Paz comentó que la gestión económica del equipo «está detenida», y que «hay una cola enorme de deudas por pagar».
Un crédito bancario «está detenido», dijo el directivo, porque ante la incertidumbre de seguir «no podemos endeudarnos más». Si el directorio no aprueba su continuidad, la gestión de la comisión termina este 31 de enero.
Para el jueves 24 está citada la asamblea de socios, la última instancia y la que podría definir el destino de Liga. «Hasta que no se defina esta situación estamos de brazos cruzados», adelantó Paz, que pide un cambio en la estructutra del plantel para que se permita «tener socios estratégicos», porque si ese pedido no lo acepta el directorio, «en unos años se volverá al mismo problema».
El tiempo de gestión es otro punto de tope, por una parte la comisión pide que se firme un acuerdo por cinco años, mientras Romero asegura que si su periodo dura cuatro años, ese debe ser el tiempo por el que se firme la cesión, algo que también se decidirá en la asamblea de la U.
El jueves se definirá el camino que seguirá Liga en los próximos años, si el directorio maneja el equipo, o si la comisión sigue a cargo. Hasta tanto, Paz adelantó que «si seguimos luego del 24, nos endeudaremos, pagaremos, y seguiremos armando de la mejor manera a Liga». (D)