«Julian no tiene un antecedente violento en su vida y es obvio que a lo que más miedo le tienen, tanto la jueza como el sistema, es al poder de sus palabras», agregó

Punto Noticias. “Es más que Kafka, es Kafka 2.0, algo inaudito; algo que tiene a toda la audiencia indignada», protestó la directora de la Fundación Ciudadanía Inteligente, Renata Ávila, en un medio internacional sobre el juicio de extradición a Estados Unidos de Julian Assange en Reino Unido.

«Estoy impresionada realmente porque el punto de una audiencia es que la persona imputada oiga la evidencia y pueda responder a través de sus abogados a los argumentos, pero, de una manera inaudita, se le ha colocado a espaldas de sus abogados y solo la jueza puede mirarlo; está aislado completamente, custodiado por los guardias, y no puede estar en la audiencia», dijo la jurista, al describir el cubículo acristalado a prueba de bomba donde Assange sigue las vistas.

Ávila forma parte del equipo legal internacional del fundador de WikiLeaks que coordina el letrado y exmagistrado español, Baltasar Garzón.

Tras varias discusiones, la magistrada negó finalmente permiso para que Assange se siente junto a sus abogados en la segunda parte del juicio, previsto en mayo.

«Julian no tiene un antecedente violento en su vida y es obvio que a lo que más miedo le tienen, tanto la jueza como el sistema, es al poder de sus palabras», agregó.

Fuente: SputnikNews