La intención, algo desesperada, de la dirigencia del Deportivo Quito de buscar acuerdos con jugadores, estrategas y más acreedores, a quienes el club adeuda dinero y a los que les pide una moratoria, mínimo de un año, para comenzar a pagarles, tuvo un nuevo revés.

El DT Juan Garay junto con 16 futbolistas, entre ellos Carlos Feraud, Dennys Quiñónez, Michael Castro, Geovanny Espinoza, Omar Andrade, Geovanny Caicedo, Luis Congo, Isaac Mina y otros, se reunieron con el vicepresidente chulla, Jaime Espinosa, para escuchar la propuesta, pero no hubo convenios.

Cuchara Caicedo argumentó el porqué: “Solo fueron ofrecimientos y nada por escrito. De palabras no vive el hombre”.

El actual zaguero de El Nacional contó que el dirigente les explicó sobre la posibilidad de que el Municipio de Quito autorice a los azulgranas iniciar un proyecto inmobiliario donde está ubicado el complejo Ney Mancheno y con el dinero de la venta de los departamentos se comience a pagar, pero no de forma inmediata.

En el caso de Mina, el defensa negoció con una tercera persona una parte de lo que se le debe, sin embargo, aún tiene dinero pendiente de cobrar.

Deportivo Quito debe cancelar hasta mañana a las 18:00 un valor superior a $ 250 mil a acreedores que presentaron la demanda en la Ecuafútbol; si no lo hace, no podrá jugar el domingo contra Emelec.