José Oswaldo R. V., de 43 años, fue sentenciado a 16 años de prisión por el asesinato de Ángel Neptalí A., registrado en la provincia de Orellana.

El crimen ocurrió la madrugada del 4 de julio de 2011 y tras casi 10 años el Tribunal de Garantías Penales de Orellana emitió la sentencia el martes anterior y ordenó también el pago de $ 20.000 a la familia de la víctima.

El asesinato de Ángel Neptalí A. fue por venganza, porque la víctima supuestamente habría entablado una relación sentimental con la esposa del agresor.

Después de mantener una cita con la mujer, Ángel Neptalí, que tenía 20 años en esa época, ingresó a la casa que compartía con su familia, pero fue emboscado y herido dentro del inmueble.

El padrastro de Ángel, en su testimonio, precisó que se escucharon ruidos fuertes en la primera planta de la vivienda, donde se encontraba la habitación de su hijo. Cuando salieron a verificar qué sucedía, vieron que Ángel Neptalí A. corría tras su agresor, pero cayó sin vida en los exteriores de su vivienda.

El hermanastro de la víctima observó de espaldas al agresor mientras huía y lo alcanzó a identificar.

El fiscal del caso, Vicente Chamba, en la audiencia de juzgamiento demostró con más de diez pruebas –entre testimonios y pericias especializadas– que el procesado cobró venganza y mató al joven de 20 años.

Ángel murió a causa de cuatro heridas profundas en el pecho, provocadas por un cuchillo, precisó el perito que practicó la autopsia. El agresor permaneció prófugo desde 2011 hasta su localización y detención el año pasado.

La defensa del procesado quiso posicionar ante los jueces, como teoría del caso, que José Oswaldo R. V. asistió al velatorio de un familiar en Muisne, sur de la provincia de Esmeraldas, el mismo día en que ocurrió el asesinato.

Sin embargo, los testigos convocados por la defensa (todos familiares del ahora sentenciado) se contradijeron en sus testimonios.

El asesino fue juzgado por la Ley vigente en 2011. Actualmente el asesinato es castigado con hasta 30 años. (I)