Esta semana han sido los más asediados por la prensa deportiva. No se negaron a una entrevista. Se trata de los artilleros de Aucas y del torneo de la serie B, Jimmy Delgado y Lauro Cazal, quienes han convertido 20 y 16 goles, respectivamente.

Esos 36 tantos, el 60% de la producción del equipo en este 2014, han sido claves para que el ídolo quiteño esté cerca del objetivo: retornar a la serie A. Mañana (13:00) solo necesita empatar con Liga de Portoviejo para volver a ese sitial, tras una ausencia de ocho años.

¿Cuál ha sido la fórmula para haberse convertido en un ataque letal?, se les consulta.

“Él tiene lo que yo no tengo y yo lo que él no tiene. En mi caso, voy a la jugada sucia, a la fricción, a la peinada, al juego aéreo. En tanto, que él por su potencia y velocidad va al choque, al uno contra uno, encara, gambetea rivales”, revela el Loco Cazal (28 años), apelativo que se ganó tras un partido con Liga (P) cuando anotó un penal con una picada a la pelota.

Muy similar fue la respuesta del Osito Delgado, apelativo que le puso la hinchada al guayaquileño, de 24 años, por su parecido físico con el exgoleador de Aucas Édison Maldonado, apodado el Oso. “Él (Cazal) se mueve bien en el área, cabecea, baja la pelota; mientras lo mío es la explosividad”, sintetiza Delgado, quien arrancó la temporada como suplente del uruguayo Facundo Peraza.

La clave del éxito, concuerdan, ha sido el diálogo, y estar conscientes de que más allá del título de goleador, lo primordial era el ascenso de Aucas.