Hollande promete una ley sobre sedación final para muerte digna

El presidente francés, François Hollande, prometió hoy elaborar una ley, al término de un debate público que se lanzará en enero, que ampare la «sedación profunda» para enfermos graves e incurables con la voluntad de consagrar «el derecho a morir dignamente».

Hollande, que no contempló dispositivos de eutanasia activa o de suicidio terapéutico, dijo en una declaración en el Elíseo que esa sedación irá acompañada de la detención de cualquier otro tratamiento terapéutico y se aplicará a quienes manifiesten su voluntad de «no prolongar inútilmente su vida».

Citó tres tipos de casos que quedarían cubiertos por la futura norma, el primero cuando la muerte se va a producir a corto plazo y el paciente sufre.

El segundo será cuando el enfermo decide dar por acabado el tratamiento y eso tiene como consecuencia el fallecimiento a corto plazo.

El tercero, cuando la persona no pueda pronunciarse debido a su estado, obligará al médico, tras cumplir un procedimiento, a «suspender o no poner en marcha tratamientos que sólo tendrían como efecto el mantenimiento artificial de la vida».

La nueva ley deberá regular la redacción de las «voluntades» que los ciudadanos quieran dejar sobre «cómo desean morir».

Hollande hizo hincapié en que «esas directivas se impondrán a los médicos para todas las decisiones de investigación, de intervención o de tratamiento. Serán directivas obligatorias», pero también «revocables».