Hace dos días, 21 playas de la provincia de Santa Elena reabrieron al público. Hoy lo harán de manera parcial los balnearios de los cantones San Vicente y Sucre, en Manabí, que atenderán solo seis horas y de jueves a domingo.

Mañana el turno es para tres complejos turísticos de la parroquia Papallacta, en Napo, que tienen piscinas de aguas termales. Y el lunes vuelven a atender al público tres termas del cantón Baños, provincia de Tungurahua.

Y hay otros sectores turísticos que esperan la aprobación de las autoridades para sumarse y reactivar sus complejos y balnearios, tras más de cinco meses de cierre por la pandemia del COVID-19.

«Es una nueva etapa, entiendo que hay preocupación todavía, pero creo que ya depende también de cada uno de nosotros, los turistas, de tener cuidado», dijo Glen Rodríguez, uno de los primeros visitantes que recibió Montañita, uno de los destinos más visitados por extranjeros y ecuatorianos.

• En playas de Santa Elena está prohibido fumar, consumir bebidas alcohólicas, llevar mascotas y alimentos preparados

Otros turistas y autoridades aún tienen temor por los posibles contagios de COVID-19 que puedan darse incluso al momento de bañarse en piscinas y otros.

El epidemiólogo Jhonny Real dice que debe haber un cambio total en la dinámica de ingresos a estos lugares, pues existe alto riesgo de contagio de COVID-19 en los balnearios comunitarios como ríos, pozas, lagunas, además de las infecciones tradicionales o conocidas que puedan adquirir y de enfermedades como la leptospirosis (que se transmite por la orina de animales infectados), debido a la presencia de animales de campo en zonas cercanas.

«En tiempos de COVID-19 es mucho peor, porque a más de las enfermedades que se adquieren normalmente está el grado de contagio de personas por el virus», indicó.

En el caso de las piscinas, sostuvo, se debe hacer un control exhaustivo y fijar horarios, durante el día, para que se desinfecte el agua luego de cada jornada.

«En las piscinas públicas debe haber un mínimo de asistencia, distanciamiento y poner buenas dosis de desinfección, horarios. También serán clave la nueva señalética y protocolos, fundamentales como medida preventiva». (I)