Golpe de calor en perros y gatos

Golpe de calor en perros y gatos señales de alerta

Golpe de calor en perros y gatos: señales de alerta. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

Durante los meses más calurosos del año, el riesgo de golpe de calor en mascotas aumenta considerablemente.

 

¿Qué es un golpe de calor?

El golpe de calor o hipertermia severa ocurre cuando la temperatura corporal de tu mascota se eleva por encima de los niveles normales y el organismo no puede regularla de forma efectiva. A diferencia de los humanos, los perros y gatos no sudan por la piel; dependen principalmente del jadeo (perros) y de un limitado número de glándulas sudoríparas en las almohadillas y hocico.

Temperaturas corporales superiores a 40.5 °C pueden causar daño a órganos vitales, colapso cardiovascular, y en casos graves, la muerte.

 

Factores de riesgo

  • Climas cálidos o húmedos
  • Actividad física intensa en exteriores u horarios de calor
  • Ambientes cerrados sin ventilación (coches, patios sin sombra)
  • Permanecer en autos cerrados (aunque sea por pocos minutos)
  • Falta de sombra y agua fresca
  • Razas braquicéfalas (Bulldog, Pug, Persa) con mayor predisposición
  • Animales obesos o con enfermedades cardíacas/respiratorias
  • Cachorros y animales geriátricos
  • Edad avanzada o sobrepeso

 

Signos clínicos del golpe de calor

 

Síntomas leves a moderadosSíntomas graves (emergencia)
Jadeo excesivoColapso o debilidad extrema
Encías rojas brillantesConvulsiones
Babeo o saliva espesaRespiración agitada o dificultad respiratoria
Letargo o inquietudDiarrea con sangre o vómito
Temperatura corporal >39.5 °CPérdida de conciencia

¿Qué hacer ante un golpe de calor?

Actúa rápido, pero con cuidado. Aquí te explico paso a paso qué debes hacer si sospechas que tu mascota está sufriendo un golpe de calor:

  1. Traslada al animal a un lugar fresco y sombreado inmediatamente, colócalo preferiblemente cerca de una corriente de aire.
  2. Mide su temperatura rectal, si tienes termómetro (idealmente digital): si supera los 40 °C, es señal de alarma y que debes llevarlo al veterinario.
  3. Moja suavemente su cuerpo con agua a temperatura ambiente (NO fría). Puedes usar una toalla húmeda o esponja. Moja las patas, ingles y cuello. No lo sumerjas.
  4. Ofrece agua fresca, pero no obligues a beber. Si la rechaza, no insistas.
  5. Usa un ventilador para acelerar la evaporación.
  6. Contacta a un veterinario inmediatamente. Si no puedes acudir físicamente, usa un servicio de telemedicina para recibir orientación.

¿Qué NO debes hacer?

  • No uses agua helada ni hielo: puede provocar vasoconstricción y empeorar el cuadro.
  • No tapes al animal con toallas completamente mojadas (puede atrapar el calor).
  • No intentes hacer ejercicio o caminar con tu mascota hasta estabilizarla.
  • No administres medicamentos humanos (como paracetamol) por tu cuenta.
  • No lo dejes solo, incluso si mejora visiblemente.

La prevención es clave para evitar un golpe de calor. Aquí te damos algunos consejos que puedes aplicar a diario:

Consejos prácticos para prevenir golpes de calor

  • Saca a pasear a tu perro temprano en la mañana o al final de la tarde.
  • Coloca múltiples bebederos con agua limpia y fresca.
  • Usa colchonetas o chalecos refrigerantes en días calurosos.
  • En casa, ventila bien los espacios o usa ventiladores o aire acondicionado.
  • Nunca dejes a tu mascota sola en el coche, ni por “solo 5 minutos”.
  • Recorta el pelaje de razas con mucho pelo, pero nunca rapes por completo: su pelaje también los protege del calor.
  • Para gatos, ofrece superficies frescas donde descansar, baldosas, mármol o tapetes refrigerantes.
  • En razas braquicéfalas, controla la actividad física, el jadeo es menos eficiente en bulldogs, pugs o gatos persas

Historias reales

  1. Toby, bulldog inglés, sufrió un golpe de calor tras jugar 10 minutos en un patio sin sombra. Se recuperó gracias a la rápida actuación con agua templada, ventilador y atención veterinaria.
  1. Luna, gata persa, empezó a jadear en una habitación sin ventilación: se colocó sobre baldosas frescas y se ofreció agua con electrolitos veterinarios, evitando complicaciones.
  1. Bruno fue traído a consulta en Guayaquil un mediodía caluroso de agosto. Su tutor lo había sacado a caminar y jugó con él en el parque sin notar que empezaba a jadear con dificultad. Cuando llegaron a casa, Bruno colapsó. Su temperatura estaba en 41.8 °C. Gracias a una rápida atención por teleconsulta y luego traslado a clínica, se logró estabilizar.

No todos los golpes de calor ocurren en autos. Un paseo en el momento incorrecto también puede ser peligroso.

 

¿Cuándo acudir a telemedicina veterinaria?

Cuando notes síntomas iniciales y no puedas llegar rápidamente a una clínica, la telemedicina veterinaria es una excelente opción para recibir orientación inmediata. Profesionales con experiencia en medicina de urgencias y etología pueden ayudarte a tomar decisiones clave para estabilizar a tu mascota mientras te trasladas.

Preguntas frecuentes

 

¿Los gatos también sufren golpes de calor?

Sí, aunque lo disimulan mejor que los perros. Observa si se esconden, jadean o están excesivamente quietos en días calurosos.

 

¿Debo llevar siempre a mi mascota al veterinario después de un golpe de calor?

Sí. Aunque logres estabilizarla en casa, los efectos internos pueden aparecer horas después.

 

¿Es peligroso mojar completamente a mi perro?

Sí, si usas agua muy fría o lo sumerges. Siempre utiliza agua tibia o a temperatura ambiente.

 

¿Puedo dar hielo para que se refresque?

Sí, en pequeñas cantidades. Muchos disfrutan lamernos cuando hace calor.

 

¿Cuál es la mejor bebida en días calurosos?

Agua fresca siempre disponible. Algunos suplementos veterinarios con electrolitos pueden ser útiles si están muy activos o enfermos.

Recomendaciones

El golpe de calor es una emergencia silenciosa pero mortal. Reconocer los signos, actuar rápido y saber qué hacer (y qué no hacer) puede salvar la vida de tu perro o gato. Como tutor responsable, tu mejor herramienta es la prevención.

Aprovecha también las opciones de telemedicina veterinaria para orientación rápida ante cualquier duda o situación sospechosa. Tu acción rápida marca la diferencia.