Gabriel Poalacín (57 años), de la comunidad El Galpón, y Tomás Cosquillo (60), de Tondolique, de la parroquia Quisapincha en la parte alta del noroccidente de Ambato, se muestran un tanto preocupados porque consideran que aún no hay quienes les tomen la posta para que toquen el pingullo y el tambor en las celebraciones tradicionales que hace el pueblo.

Recuerdan que desde hace aproximadamente 30 años ellos tomaron la posta de sus antepasados para continuar con esta tradición ancestral que es parte de Quisapincha y de los pueblos milenarios.

Encargo

Euclides Muncha, rector de la unidad educativa del milenio intercultural bilingüe del pueblo Quisapincha, informó que es un encargo emitido desde el Ministerio de Educación a través de la Secretaría de Educación Intercultural Bilingüe para ser los guardianes, con el fin de que se rescate y valore lo que es la identidad del pueblo.

Argumentó que con ese propósito dentro del currículo existe un área específica sobre la cosmovisión, en la que los docentes desde el nivel inicial preparan a los estudiantes con instrumentos autóctonos, que quiere decir que los niños desde los 3 y 4 años de edad comienzan a formarse.

Añadió que se les enseña a entonar lo que es el tambor y el pingullo como instrumentos autóctonos de los pueblos milenarios, entre ellos el Quisapincha, que se complementa con la preparación en danza como del curiquingue y de los danzantes que permitirá mantener viva y latente las tradiciones culturales del pueblo.

Muncha aclaró que no es obligatoria la participación de los estudiantes, pero que se les motiva para que desde tempranas edades valoren y conozcan la música autóctona, la vestimenta, la gastronomía, la lengua materna y la cultura del pueblo, tomando en cuenta que en la comunidad existen recursos muy valiosos que se encuentran ocultos y que se quiere visibilizarlos para que se sepa que el Ecuador es un país multicultural.

Preocupación

Manifestó que hay preocupación porque entre la población adulta están los pingulleros y tamboneros, que por esa razón incluso a través de la unidad educativa se hizo que ellos sean los maestros en el área de Cosmovisión, que son los que transmiten sus conocimientos para que a futuro no se pierda la música autóctona, pero entonada con los instrumentos ancestrales.

Agregó que son alrededor de 25 estudiantes los que se capacitan para que toquen el pingullo y el tambor en las celebraciones tradicionales. (I)

Más datos

Instrumento musical

El pingullo

Es un instrumento antiguo y pertenece al grupo de los aerófonos. Para su confección se usa carrizo, tunda o hueso. Tiene una extensión aproximada de 30 a 35 cm de largo y un diámetro de 1 a 1,5 cm. Su boquilla es parecida a la dulzaina o al clarinete, con un diámetro en que la mitad está rellena y la otra es hueca. Tiene tres perforaciones y ocasionalmente dos.

Modo de usar

Se interpreta usando los dedos medios e índice, y se lo sostiene con la base del pulgar. Aunque hubo un pingullo monofónico que se usó en las ceremonias fúnebres, por lo general es de uso festivo.

El ejecutante

El pingullero, su ejecutante, está presente en las fiestas del Coraza, en la provincia de Imbabura; en la celebración del alcalde, en la provincia de Tungurahua; y en las del Corpus Christi y Navidad, en la provincia del Chimborazo u otras.