Estos son los consejos de los expertos para negociar tu próxima hipoteca
Antes de firmar un crédito hipotecario, no solo tenemos que investigar todas las opciones que existen en el mercado, también debemos ser capaces de negociar las condiciones hasta encontrar la mejor solución para nosotros. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
Los préstamos hipotecarios pueden diferir considerablemente de unos a otros, en función de la entidad bancaria y de si optamos por el interés fijo o variable. Sin embargo, además de eso, también influyen diferentes factores que pueden ayudarnos a conseguir mejores condiciones: como es nuestra habilidad para negociar.
Pero, ¿cómo se pueden negociar las condiciones de nuestra hipoteca? Esta es una duda bastante frecuente, puesto que no siempre estamos acostumbrados a hacerlo. Nos servimos de los consejos del portal HelpMyCash para dar con algunas claves.
Cómo negociar una hipoteca
Lo primero que tenemos que hacer es informarnos de cómo está el mercado y cuáles son las condiciones de las principales entidades bancarias. Al igual que hacemos con cualquier otro producto, cuando queremos firmar una hipoteca debemos saber cuál es la situación del mercado y cuáles son las condiciones que nos ofrecen las principales entidades bancarias de nuestro país.
Acto seguido, es el momento de definir nuestros objetivos. Estos variarán en función de nuestras posibilidades económicas. Cuanto mayor salario y ahorros aportemos, vamos a poder negociar un interés más bajo y menos vinculaciones en forma de seguros o cláusulas. Si, por el contrario, no tenemos muchos ahorros, tendremos que hacer ciertas concesiones relativas al porcentaje de interés que deberemos asumir. Es importante acudir con ciertas condiciones que, de acuerdo a nuestras preferencias, son innegociables. A partir de ahí, podremos hacer una clasificación de las mejores opciones que nos ofrecen los propios bancos.
Es importante que, además de lo anterior, en el momento de visitar a la entidad bancaria, tengamos preparado un dossier con la documentación que es necesaria para el cálculo de la hipoteca: contratos de trabajo, nóminas, declaraciones de la renta… De este modo, estaremos facilitando al comercial o el profesional con el que estemos hablando su trabajo.
Por último, destaca la recomendación de solicitar la hipoteca a varios bancos. De este modo, podremos regatear con las diferentes entidades en base a las propuestas de su competencia. Recuerda que cuanto mayor rango tenga el comercial con el que negociemos las condiciones, mayor facilidad para conseguir un mejor precio vamos a tener.
Aspectos a negociar
Pero, ¿cuáles son los aspectos que podemos negociar a la hora de solicitar la hipoteca? Una vez hemos conocido cómo podemos comenzar a negociar nuestro crédito hipotecario, es el momento de conocer cuáles son los elementos sobre los que podemos construir nuestra negociación.
- El interés: Conseguir un buen tipo de interés es fundamental para el montante total que deberemos devolver. Ahora que algunos bancos han realizado rebajas en sus intereses, puede ser un escenario favorable para conseguir intereses que se adapten a nuestras posibilidades.
- Las comisiones: Los bancos aprovechan la firma de las hipotecas para establecer ciertas comisiones relacionadas con la amortización anticipada, por ejemplo, o la subrogación. Es importante que, si existe la posibilidad, tengamos la mínima cantidad posible de comisiones.
- Productos asociados: Muchas entidades ofrecen condiciones más ventajosas si logran añadir productos asociados a las hipotecas, como son las pólizas de seguro, por ejemplo. Tratar de reducir estos productos a los mínimos imprescindibles, sin que afecte a las condiciones de la hipoteca, puede suponer un importante alivio en términos económicos.
- El montante total: Por último, en función de nuestro perfil financiero, es posible que un 80% no sea suficiente para enfrentarnos a la compra de un inmueble. Algunos bancos permiten cubrir algo más de esta cantidad si hacemos una buena negociación.