23 femicidios se han registrado en lo que va del 2021, el 70% eran madres que dejaron a 11 menores en la orfandad
Esto quiere decir que en Ecuador continua la tendencia de registrar un femicidio cada 72 horas, según datos de Aldea
Paola Maldonado, presidenta de la Fundación ALDEA y responsable de la elaboración del mapa de feminicidios en Ecuador, informó en exclusiva para Pichincha Comunicaciones, que del 1 de enero al 3 de marzo del 2021 se han registrado 20 femicidios en el país.
“Esto quiere decir que seguimos con la tendencia de un feminicidio cada 72 horas. Es la tendencia desde el 2014”.
Es alarmante puesto que el número de femicidios desde el 1 de enero de 2014 hasta la presente fecha alcanza los 870 casos, sin que hasta el momento exista una respuesta adecuada del Estado, no solo para las víctimas mortales sino también para sus familias.
De los casos registrados este año se identifica que Guayas es la provincia donde más violencia criminal se produjo contra las mujeres ya que se reportaron 5 femicidios, le sigue Manabí con tres casos, mientras que en Azuay, Chimborazo, Los Ríos y Sucumbíos hubo dos en cada una de ellas.
“En 10 de las 24 provincias se han registrado femicidios en 2021”.
Maldonado detalló que en el 36% de los asesinatos se usó armas de fuego y en otro 29% ocurrió con armas blancas. Es así que en el 92% de los casos, los femicidas formaban parte del círculo cercano de las mujeres, de los cuales el 7.7% eran padres o padrastros y otro el 7.7% eran amigos o conocido de las víctimas.
“Es alarmante porque desde hace rato el monitoreo ha dejado en evidencia que el 85% de femicidas eran exparejas, esposos o convivientes de las víctimas”.
La titular de Aldea detalló que de los 20 casos registrados en 2021, el 45% corresponde a mujeres de entre 25 y 39 años de edad, un 20% que estaban entre 40 y 64 años, un 15% entre 19 y 24 años y una de las víctimas era una menor de edad.
“Las mujeres no estamos seguras ni siquiera dentro de nuestro propio hogar”.
El 70% de las mujeres asesinadas en el 2021 eran madres, dejando en la orfandad a 11 niños, niñas y adolescentes que requieren de una protección y reparación integral por la tragedia que enfrentó la familia, sin embargo a lo largo de los últimos 4 años, los más de mil menores que han sido víctimas de este tipo de casos no han tenido respuesta del Estado pese a que en agosto de 2018 la entonces ministra de Justicia, Rosana Alvarado, aseguró ante la prensa que el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) emprendería la entrega de bonos y becas escolares para los hijos de las víctimas del femicidio, sin embargo la condición es contar con una sentencia ejecutoriada.
Sybel Martínez, activista en Derechos Humanos y vicepresidenta del Consejo de Protección de Derechos de Quito, criticó este tipo de condiciones que impide proteger a los niños ya que el sistema judicial es ineficiente en estos casos, puesto que una gran parte no llega a tener una sentencia y de otro lado algunos jueces o fiscales no han querido tratar a las muertes como producto de femicidios sino que lo procesan por otro tipo de infracción penal, dejando desamparados a los menores de edad.
“Hay otro casos donde el proceso se para porque el agresor se ha suicidado. Nosotros estamos pidiendo que desde el día uno se entregue el bono”
Efectivamente, Maldonado detalló que cuatro de los femicidas en este 2021 se suicidaron y dos más intentaron hacerlo. Pero la protección del Estado no solo queda en entredicho ahí, sino que de los 20 casos registrados este año, 8 eran mujeres habían reportado antecedentes de violencia y dos más tenían boleta de auxilio: “Esto quiere decir que el sistema de protección no está funcionando porque a pesar de que ponen en alerta la situación que enfrentan no hay acción de respuesta efectiva en defensa de sus derechos”.
“De las 20 mujeres 2 de ellas fueron reportadas como desaparecidas una en Chimborazo y otra en Zamora”.
Para la presidenta de la Fundación ALDEA estas cifras dan cuenta que la situación estructural de violencia no ha cambiado en Ecuador, el cual se complejiza cada vez más por las condiciones de precariedad que viven las familias sin que exista una respuesta estatal adecuada para poder garantizar los derecho y las vidas de las mujeres.
“En el contexto de la pandemia el acceso de las mujeres para reportar situaciones de violencia ha sido cada vez más limitado porque están en un entorno que no les permite tener independencia para acceder a servicios. Ellas conviven con sus agresores”.
Alertó que el confinamiento al que llevó la pandemia no solo aumentó los casos de violencia sino que también impidió que las mujeres puedan acceder a la anticoncepción
“El Estado no ha tenido una política efectiva para proteger la vida de las mujeres y las niñas y erradicar definitivamente la violencia basada en género y otras violencias estructurales que enfrentamos las mujeres en el Ecuador”.
Una vez concluida la entrevista Paola se comunicó un día antes del 8 de marzo y nos informó que mientras se cerraba el reporte, entre el 4 y 6 de marzo ocurrieron 3 femicidios más, razón por la cual en lo que vamos del 2021 ya suman un total de 23 mujeres asesinadas por el hecho de ser mujeres.
Fundación Aldea / Pichincha Universal/